Antecedentes Teóricos Y De La Invest. Bloques Nutricionales

CAPITULO III.

MARCO TEORICO.

Antecedentes de la Investigación:

En el trópico seco de América Central, se sufre una sequía cíclica que afecta la respuesta productiva y reproductiva del ganado, en el corto y mediano plazo.

Para mitigar el déficit de alimentación durante ese período, los productores comúnmente recurren al uso de rastrojos agrícolas, pastos de corte generalmente en estado de madurez muy avanzado y pastoreo libre en potreros donde sólo están disponibles pastos secos o forrajes residuales (también conocidos como henos en pie). Todos esos materiales se caracterizan por poseer un alto contenido de fibra y bajo contenido de proteína cruda y minerales. Ante esta situación, se hace necesario utilizar opciones de suplementación para rumiantes bovinos que consideren las características particulares de la fisiología digestiva de estos y que contribuyan a mejorar la eficiencia del uso de los recursos fibrosos de baja calidad, los cuales son prácticamente los únicos recursos alimenticios disponibles en los períodos críticos.

En algunas regiones ganaderas en Centroamérica, como alternativa para contrarrestar los bajos niveles de nitrógeno que presentan los forrajes usados en la época seca, se promovió, durante varios años, el uso de la mezcla líquida de melaza con urea. No obstante, hay que reconocer que esta forma de suplir las necesidades de nitrógeno del ganado con urea en forma líquida, no ha sido aceptada por muchos productores, por el riesgo de intoxicación y muerte de los animales, si no se toman los debidos cuidados en el manejo de este alimento y en la adaptación de los animales al suministro del mismo, además de la dificultad que representa el transporte, almacenamiento, manipulación y distribución de esta mezcla líquida. Como una alternativa, se desarrolló la tecnología de los bloques de melaza, la cual ofrece resultados similares a los obtenidos con la mezcla líquida. Ante esta situación, en la década de los 70, se buscó en África la forma de “solidificar” la mezcla de melaza y urea, para limitar el consumo por parte de los animales, mantener los niveles de nitrógeno necesarios en el rumen (panza), disminuir los riesgos de intoxicación por urea, hacerlos más accesibles a un mayor número de ganaderos y que los animales aprovecharan al máximo los alimentos fibrosos.

Es más, varios investigadores observaron que las ganancias de peso de animales suplementados con bloques de sal con urea y melaza fueron similares a las obtenidas por aquellos que recibían la mezcla de urea y melaza ofrecida en forma líquida.

Desde entonces, muchas tecnologías se han usado para mejorar el uso de estos alimentos, entre ellas se encuentra la fabricación de bloques multi-nutricionales de forma artesanal, para suministrar a los animales un suplemento concentrado de bajo costo, que permita mejorar el desempeño animal, que sea fácil de implementara nivel de finca y que, por ende, esté acorde a las necesidades y condiciones de los pequeños y medianos productores.

Los bloques de melaza enriquecidos con urea fueron diseñados originalmente para suplir las necesidades de nitrógeno en períodos críticos y mejorar la función del rumen; sin embargo, también, han sido usados como un medio para suministrar minerales y nutrientes que escapan de la fermentación en el rumen (llamados nutrientes de sobrepaso). Además, en potreros de grandes dimensiones, los bloques pueden ayudar a dirigir el pastoreo rotándolos dentro de los mismos, pues los bloques constituyen puntos de atracción para los animales en pastoreo, y por tanto los animales tienden a mantenerse pastoreando cerca de donde se encuentran los bloques, y al moverse estos de lugar, se puede orientar el uso de los pastos presentes en un potrero.

En todos los casos, el propósito principal de los bloques de melaza con urea es promover un incremento en el consumo de alimentos fibrosos, como pastos maduros y residuos de cosecha, y de esa manera lograr mejores niveles de desempeño y producción animal.

En el mundo entero se conocen experiencias con el uso de esta tecnología desde hace más de 40 años, en las que se ha probado su eficacia en vacas lecheras, novillos de engorde, cabras y ovejas, aunque su efecto es variable en función de la dieta basal ofrecida. Desde los puntos de vista técnico y científico, la tecnología del bloque ha demostrado ser confiable para mejorar la producción ganadera; sin embargo, la viabilidad económica y práctica de su fabricación depende de muchos factores que incluyen entre otros la disponibilidad, precios y acceso a los ingredientes clave (por ejemplo, melaza, urea, sustancias cementantes) así como los costos de transporte.

Las alternativas al uso de bloques son el uso de concentrados comerciales y subproductos agropecuarios. Sin embargo, ante el escenario de los altos costos de los concentrados y la limitada disponibilidad de subproductos y los problemas relacionados con su uso (por ejemplo, muchos países no permiten el uso de pollinaza en la producción de leche), el uso de los bloques de melaza con urea o el uso de los Bloques Multinutricionales constituye una alternativa viable y económica, dado que en su preparación se pueden utilizar como ingredientes recursos locales que poseen buen valor nutritivo, y de esta manera se obtiene un suplemento de bajo costo que es capaz de mejorar las condiciones nutricionales de los animales, especialmente en la época seca.

Bases Teóricas:

El uso de los Bloques Multinutricionales representan una alternativa práctica, eficiente y segura para la corrección de deficiencias nutricionales en los rumiantes, en animales alimentados con forraje de mala calidad (Sansoucy et al., 2000).

Debido a su consistencia ofrece facilidades de manejo en cuanto al transporte, almacenaje y permite por su misma dureza, el consumo controlado de manera limitada y progresiva, con esto se logra una reducción del consumo excesivo de melaza o urea por disolución (Wu y Liu, 1995; Onwuka, 1999).

Los BM contienen energía, fuentes de nitrógeno, vitaminas y minerales; disponibles para los microbios del rumen y el animal (Olvera y Gutiérrez, 1999; Cabrera y Gutiérrez, 2000).

Una de las formas de suministrar nutrientes al ganado, es a través de los bloques multinutricionales. El objetivo fundamental del bloque multinutricional es proveer nitrógeno, bajo la forma de amoníaco, para asegurar una óptima función ruminal (Sansoucy, 1987).

La base principal de la respuesta animal, respecto a la utilización de los BM, se da cuando el ganado es alimentado a base de pastos nativos. Estos pastos debido

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