Beneficios De La Corriente De Keynes Y Su Impacto Del Neoliberalismo Y Su Expansión Económica, Así Como Los Desafíos Del Siglo XXI.
Enviado por brendareyes89 • 9 de Junio de 2013 • 1.460 Palabras (6 Páginas) • 2.269 Visitas
Beneficios de la corriente de Keynes y su impacto del neoliberalismo y su expansión económica, así como los desafíos del siglo XXI.
Introducción
La corriente Keynesiana fue un movimiento que influyo mucho a partir de la II Guerra Mundial, esta corriente señalaba la necesidad para cada país de adoptar una “política” económica, al no ser capaz la economía de hallar el equilibrio por sí misma.
Esta teoría nos explica desde un principio que el valor es subjetivo, sin embargo propone que la teoría neoclásica de Say debe ser invertida ya que es la oferta la que crea su propia demanda; eso explica que al introducir la división de la micro y macro economía y al buscar abatir el desempleo buscando que el gobierno intervenga en la economía se propicie que el pueblo consuma (demande) y por consecuencia se fomente la creación de empleos.
Los principales elementos de esta corriente se encuentran en el libro de la teoría general de la ocupación, el interés y el dinero que se publico en 1936. Una de sus principales aportaciones la constituye el análisis de la demanda efectiva y su incidencia en las variaciones del nivel de producción y empleo, en contra de lo sostenido hasta entonces por la doctrina oficial y la denominada ley de los mercados o ley de Say, según la cual es la oferta la que crea su propia demanda.
Las ideas de Keynes tuvieron mucha consideración dentro del plano económico, transformándose en el pilar fundamental de las políticas económicas en los años ´50 y ´60. Sin embargo, desde la década del ´70 volvieron a predominar las teorías neoliberales que señalaban al libre mercado como la mejor forma de funcionamiento del sistema económico.
Todo esto nos conlleva a los nuevos movimientos del siglo XXI y el desarrollo de la economía a nivel mundial.
Desarrollo
La teoría de Keynes aporto algunas “recetas” para poder salir de la gran depresión de 1929, que se dio debido a una gran debilidad de la demanda efectiva y también a una insuficiencia de la inversión productiva.
Para Keynes la causa de las crisis económicas es una disminución en la demanda agregada, principalmente por una caída en la confianza que tienen los hombres de negocios que afecta su decisión, al realizar de nuevas inversiones privadas. Por estas situaciones, se cae la demanda agregada y se genera una paralización de la economía, las empresas enfrentan menores ventas y reducen la producción al mismo tiempo que se generan despidos de personal, generándose así un círculo vicioso por el cual el incremento en el desempleo genera una caída en el consumo y la caída en las ventas tornan más pesimistas a los inversores privados profundizando aún más el problema.
En la Teoría general de la ocupación, el interés y el dinero, su principal aportación la constituye el análisis de la demanda efectiva y su incidencia en las variaciones del nivel de producción y empleo, en contra de lo sostenido hasta entonces por la doctrina oficial y la denominada ley de los mercados o ley de Say, según la cual es la oferta la que crea su propia demanda. Esta teoría rechaza las ideas de say, ya que afirma que si la Ley de Say fuera cierta, los empresarios incrementarían su producción dado que pueden vender todo lo producido y conduciría siempre a un aumento en la ocupación de los factores productivos hasta el máximo nivel de empleo de factores productivos, de forma que la economía se encontraría en una situación permanente de pleno empleo.
El principal argumento del pensamiento keynesiano, es otorgar a las instituciones el poder de regular los procesos económicos para evitar los fallos de mercado, las crisis y las recesiones a las que caen las economías cuando el crecimiento de la producción no es bueno.
En “La Teoría General de la Ocupación, el Interés y el Dinero”, define los ciclos económicos de la siguiente manera:
“... Por movimiento cíclico queremos decir que, al progresar el sistema, por ejemplo, en dirección ascendente, las fuerzas que lo empujan hacia arriba al principio toman impulso y producen efectos acumulativos unas sobre otras, pero pierden gradualmente su potencia hasta que, en ciertos momentos, tienden a ser reemplazadas por las operantes en sentido opuesto; las cuales, a su vez, toman impulso por cierto tiempo y se fortalecen mutuamente hasta que ellas también, habiendo alcanzado su desarrollo máximo, decaen y dejan sitio a sus contrarias...” (Keynes, John Maynard)
El nivel de actividad depende de la demanda
...