CIRUGIAS PLASTICAS ESTETICAS

CIRUGIAS PLASTICAS ESTETICAS: ¿BELLEZA EXCESIVA?

INTRODUCCION

Crecer y sobrevivir en el mundo de hoy no es algo fácil. La sociedad en la que vivimos y nos desenvolvemos se rige día a día bajo los parámetros emitidos por el consumismo. Somos una sociedad consumista por excelencia; por lo tanto, todas las cosas que tenemos y las que deseamos tener en un futuro, son las que nos motivan día a día a luchar por lo deseado y muchas veces a hacer sacrificios hasta el punto de hacer, pensar y sentir algo que puede ir en contra de nuestros propios principios y de nuestra ética.

Son precisamente las cosas materiales las que hacen que la mayoría de personas trabajen y ganen el suficiente dinero como para poder poseer todo lo que tanto anhelan, pues en el régimen capitalista en el que vivimos, la sociedad de consumo nos ofrece todo aquello que deseamos obtener. Claro está, bajo la trampa de comprar y compras más cosas, pues nuestro poder de ambición, vanidad e inconformismo pesa más que un principio moral.

Es por esto que a continuación, tocaré un tema de vital importancia y por el que la mayoría de personas, en especial las mujeres, ha tocado fondo; un tema que el consumismo de manera irresponsable ha utilizado, creando así un prototipo de mujer y de hombre que “debe” caracterizar a la sociedad: la cirugía plástica estética.

Este, aunque sea un tema de poca relevancia, si es de vital importancia y que trae consigo una serie de causas y consecuencias que sería importante mencionar en este escrito.

Para empezar, es importante aclarar la distinción entre cirugía plástica y cirugía plástica estética, teniendo en cuenta que cada una de estas ramas tiene definidos sus objetivos y el tipo de población al que va dirigida.

El término “cirugía plástica” proviene de dos vocablos griegos: “Girurguiki”, que significa significa cirugía, mano, obra y “Plastikos”, cuyo significado es moldear. .

La cirugía plástica es una rama de la medicina dedicada a la reparación de las deformidades y la corrección de defectos funcionales. La cirugía plástica, tiene dos áreas que son la cirugía reconstructiva y la cirugía estética; ésta última tiene como fines esenciales y específicos los estéticos, más allá de lo biológico-funcional.

Dados los beneficios tanto físicos como psicológicos que puede aportar ésta clase de cirugía al individuo, en las últimas décadas el valor de la belleza física ha cobrado una importancia tal en la sociedad de hoy, que muchas personas han llegado a considerar el aspecto físico como una cuestión funcional en el desarrollo de la persona. Aspectos como la aceptación propia y la incidencia de éste aspecto en la autoestima, son cada vez más importantes en el proceso de una adaptación social. El protagonismo de los valores estéticos, la competitividad y el afán de mejorar la imagen física ha desembocado en la decisión de muchos hombres y mujeres de someterse al quirófano para mejorar su apariencia física y emocional.

Esto ha convertido a la cirugía estética en una de las ramas más importantes de la medicina, pues el aspecto físico representa no solo una esperanza de vida, también representa una cuestión de bienestar y de preservación de la salud emocional.

Volviendo a la realidad de nuestra sociedad, podríamos decir que la población está actualmente definida y limitada según el prototipo de belleza por el cual se rige; el cuerpo de una persona y más exactamente el de las mujeres, se valora socialmente en función de su forma y medidas.

Anteriormente el modelo de belleza de una mujer estaba estrechamente relacionado con su capacidad reproductiva, de manera que se valoraba positivamente que una mujer contara con curvas muy generosas y un mayor peso y cadera.

A partir del siglo XX el prototipo que maneja nuestra sociedad es la delgadez extrema. Los medios de comunicación, la publicidad y las mismas tiendas de moda hacen énfasis en que lo importante para una persona es estar delgada. Debido a esto las personas recurren a las operaciones de estética porque no pueden obtener por medios naturales la perfección deseada.

En torno a este tema se llega a un serio e importante problema que cada vez cobra más importancia en la sociedad de hoy y que requiere especial cuidado y detenimiento. ¿Las mujeres de hoy recurren a una cirugía estética por mejorar su salud física y buscar su bienestar? O por el contrario se está haciendo uso excesivo de las cirugías estéticas buscando con ello la perfección y el prototipo de belleza por el cual se rige nuestra sociedad?

Para dar respuesta a esta problemática se han planteado dos posiciones que a continuación se desarrollarán. En primer lugar se hace referencia a los beneficios físicos, psicológicos, emocionales y económicos que este tipo de cirugía puede traer al ser humano y más exactamente a las mujeres de nuestra sociedad. Por otra parte y como segunda tesis se expondrán los riesgos que pueden acarrear este tipo de intervenciones. De igual manera se hará especial énfasis en el uso excesivo de las cirugías plásticas estéticas y el resultado que arroja el uso desproporcionado de una intervención de este tipo.

ARGUMENTACIÒN

Las cirugías estéticas más allá de cambiar el aspecto físico de una persona, pueden traer consigo muchos beneficios psicológicos como el aumento del autoestima o el amor propio, que es un problema que aqueja a muchas personas en la actualidad, debido a que por diversos factores no están conformes con su apariencia y buscan diferentes alternativas para aumentar su valor como persona. Diversos estudios comprueban que las personas que tienen una alta autoestima son más seguras, les va mejor en el campo laboral y personal y tienen relaciones estables. Es por esto que muchos especialistas como la Doctora Aliza A. Lifshitz consideran a la cirugía estética como una “cirugía psicológica” porque afecta para bien el estado emocional.

Según un estudio realizado por la Universidad de Florida, en la mayoría de los casos el autoestima de las personas que se someten a una intervención estética se eleva porque produce beneficios psicológicos importantes.

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