COMISIONISTA DE VALORES

EL COMISIONISTA DE VALORES

¿Qué es un comisionista y cuando recurrir a sus servicios?

Un comisionista de valores es un profesional dedicado a realizar, por cuenta de un tercero pero a nombre propio, un negocio que le han ordenado perfeccionar. Ejecuta, pues, el negocio en virtud a que lo han comisionado para hacerlo, reclamando por su servicio un pago, llamado comisión. Por qué usted, persona jurídica o natural, con capacidad de concretar negocios, recurriría al auxilio de un especialista, comisionándolo para cerrar un negocio por su cuenta? ¿Por qué se convertiría usted en comitente (el que da una orden, una comisión) de un intermediario de valores? La razón última solo puede ser que usted crea que, perfeccionando el negocio con auxilio del comisionista, tiene mayores posibilidades de hacer un buen negocio que haciéndolo solo.

El comisionista y su función

Concretar un buen negocio es producto de muy variadas y humanas circunstancias; la suerte, que no lo afecta a usted exclusivamente y a la que también están sometidos los expertos, es una de ellas, y por cierto de las más importantes. Una inversión que hoy aparece como la mejor, mañana puede verse deteriorada por cambios inesperados en los precios, generados por factores que no eran previsibles, y contra ese tipo de sorpresas no existe un antídoto por completo eficaz; ningún tercero, por experto que sea, está en capacidad de ofrecerle una garantía del todo segura frente al incierto futuro, aunque algunos puedan ofrecerle, con un costo, instrumentos que aminoran el impacto que sobre su bolsillo pueden tener esos acontecimientos. Hecha esta salvedad, tenga bien claro que ni el comisionista de valores que ejecuta un negocio por orden suya, ni el vidente que, armado de una bola de cristal, le da consejos de cómo actuar en sus transacciones, puede garantizarle que usted hará un buen negocio.

Por qué, entonces, pedirle al comisionista su colaboración, que no es gratuita?

La respuesta a esa pregunta tiene que ver con la de qué son los comisionistas: son profesionales expertos en la consecución y colocación de recursos financieros, que aunque incapaces de predecir con certeza lo que aportará el mañana, son capaces de orientarlo sobre el hoy de los negocios de papeles, indicándole con precisión las alternativas que usted puede usar para invertir o para obtener en buenas condiciones su dinero, proveyéndole de elementos de juicio útiles para anticipar, con alguna probabilidad de éxito, lo que le aportará su decisión (elementos de previsión) y sirviéndole de canal de acceso a mercados en los que usted no puede intervenir directamente, pero en donde se compran y se venden instrumentos financieros que pueden responder a sus necesidades. Los comisionistas de valores son, pues, intermediarios expertos en transacciones de títulos financieros, que ponen a su servicio el conocimiento que tienen de los mercados y el acceso privilegiado de que disfrutan, por diversas razones, en los mismos. Sin embargo, la decisión última sobre el negocio por el que optará reposa en usted. Es su dinero lo que está en juego, y es por eso que usted debe evaluar con cuidado las alternativas a su disposición, el canal a través del cual cerrará su negocio y el tipo de negocio que hará. En ambos aspectos, los dos tipos de servicios que ofrecen los comisionistas pueden, por cierto, ser muy útiles...

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La utilidad del comisionista

El comisionista de valores puede brindarle en principio una ampliación de sus alternativas de negocio y la certeza de que usted participará en el mismo con conocimiento de causa, incrementando sus posibilidades de éxito.

No obstante la incertidumbre que marca, desde el punto de vista financiero, el carácter bondadoso o perverso de una transacción, hay ciertas

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