Derechos Humanos

Derechos Humanos.

Punto importante del nuevo texto constitucional es el que se refiere a los derechos humanos

Los derechos humanos no pueden ser vistos como algo decorativo plasmado en las leyes. Son expresiones concretas en la vida cotidiana de las gentes. Deben ser garantizados. Derechos humanos sin garantía son una ilusión. Por supuesto, la vigencia de ellos esta mas garantizada en democracia.

Los derechos humanos nacen de la dignidad de las personas. La palabra dignidad significa “que merece algo”. Los derechos humanos “merecemos” ser respetados y amparados por el Estado.

Tenemos derechos por el simple hecho de ser personas; y por cada derecho nuestro, el Estado tiene que cumplir con deberes para que ese derecho sea garantizado. La Constitución Bolivariana establece, por ejemplo, el derecho a la salud.

El Estado tiene, en tal sentido, el deber de prevenir las enfermedades tomando medidas como la canalización de las aguas negras o realizando campañas de vacunación; crear y mantener ambulatorios y hospitales bien dotados en los que se atienda a todas las personas en forma gratuita.

EL Estado tiene el deber de garantizar todos los derechos. Las personas tienen el deber de exigirlos.

Los derechos humanos nacen de las necesidades humanas. Estas cambian con el tiempo. Por eso, nuevas luchas se libran a diario para que nuevos derechos sean reconocidos. Por ejemplo, muchas personas tomaron conciencia de que si la naturaleza es degradada, la humanidad se extinguiría en algún momento.

Se creó, por lo tanto, la necesidad de preservar la vida de las generaciones futuras y de esa necesidad sugirieron luchas ecológicas que lograron que se reconociera el derecho humano a un ambiente sano.

En la actualidad, la mayoría de los derechos humanos nos están consagrados en Constituciones de los distintos países y en las leyes internacionales.

Características de los derechos humanos.

Son innatos:

Todas las personas nacemos con derechos que nos pertenecen por nuestra condición de ser seres humanos creados a imagen y semejanza de DIOS.

Son universales:

Todas las personas tenemos derechos.

Cada persona tiene la misma dignidad. Nadie puede estar excluido o discriminado del disfrute de sus derechos.

El niño, la niña, el indígena, el campesino, el hombre, la mujer, el chino, el venezolano, el musulmán, el cristiano, el negro, el blanco, el pobre, el rico, el corrupto, el honesto, tienen los mismos derechos.

Son inalienables e intransferibles:

Nadie puede renunciar a sus derechos o negociarlos. El Estado tampoco puede disponer de los derechos humanos.

En situaciones extremas, los derechos humanos se limitan o se suspenden, por ejemplo, cuando se suspende las garantías constitucionales. En esos casos los derechos no desaparecen sino temporalmente y mientras sigan presentes las razones que originaron la suspensión. Sin embargo, el derecho a la vida, el derecho a no ser torturado ni incomunicado siguen vigentes aun en momentos de suspensión de garantías.

Son acumulativos e imprescriptibles:

La humanidad es cambiante y en necesidades también. A través del tiempo vamos conquistando nuevos derechos.

Una vez reconocidos formalmente los derechos humanos, su vigencia no caduca. En 1863 fue abolida la pena de muerte en nuestro país; desde entonces, el derecho a la vida está garantizado en la Constitución.

Son inviolables:

Nadie puede atentar, lesionar o destruir los derechos humanos. El derecho a la vida, por ejemplo, no puede ser violado bajo ninguna circunstancia.

Son obligatorios:

Impone la obligación concreta, a las personas y al Estado, a respetar aunque no haya ley que así lo diga.

Son indivisibles, interdependientes y complementarios:

Los derechos humanos están relacionados entre sí. Negar uno significa negar el conjunto.

Un texto Constitucional es, en primer lugar, una carta de reconocimiento de los derechos esenciales de la persona. Visto así, nos estamos refiriendo a los derechos del individuo: derecho a la vida, a la integridad física, a la libertad, etc. Pero también nos referimos a los derechos del ser humano como ser político, económico, social y religioso. Por eso hablamos igualmente de los derechos políticos y civiles, de los derechos económicos sociales y culturales.

Todo derecho presupone un deber. En tal sentido, la Constitución Bolivariana nos señala tanto derecho como deberes.

En nuestra nueva Carta Magna se establece el respeto a los convenios internacionales suscritos por la República, comenzando por la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Esto supone, obviamente, en reconocimiento de todos los derechos esenciales.

Declaración de los derechos humanos.

Esta declaración, de 1948, fue aprobada por el voto de 48 Estados y 8 se abstuvieron.

• La URSS y las democracias populares no podían votar a favor de un documento donde se consagraba la propiedad individual.

• La

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