EJHEMPLO DE ADMINISTRACIÓN DE PERSONAL

ORDEN DE PREDICADORES

FAMILIA DOMINICANA DEL PERÚ

CELEBRACIÓN DEL JUBILEO 2016

"Enviados a predicar el Evangelio"

1. ENTIDAD ORGANIZADORA:

FAMILIA DOMINICANA DEL PERÚ

1. LUGAR Y FECHA:

• Lugar: País Perú
• Fecha: Año Escolar 2016

1. BENEFICIARIOS:

• Estudiantes de las Instituciones Educativas de la Familia Dominicana.

1. FUNDAMENTACIÓN

Los Dominicos nacen en el contexto de la lucha contra las herejías, que eran muy fuertes y numerosas a comienzos del siglo XIII, amenazando con dividir a una Iglesia Católica cuya jerarquía y clero se encontraba en uno de sus puntos de mayor degeneración.

Hacia 1206 Santo Domingo tuvo la idea de organizar un grupo que fuera a predicar en tierras de herejes, buscando su conversión. Dicho grupo debía vivir pobremente, sin criados ni posesiones. El Papa aprobó la idea, pero la experiencia no tuvo éxito inmediato.

Santo Domingo continúa madurando su idea y se va a vivir a la diócesis de Toulouse donde fundó un monasterio mixto en Prouille, bajo una espiritualidad a la vez monástica y a la vez apostólica. Finalmente, hacia 1215 organizó la primera comunidad formal de "hermanos predicadores", como fue llamada la Orden naciente.

El lema escogido fue "contemplate aliis tradere", es decir: "Contemplar y dar a otros el fruto de la contemplación". Todo esto fue novedoso para la época, pues hasta entonces, los religiosos vivían en monasterios y no se dedicaban a la predicación, la cual, en teoría, era monopolio de los obispos. Los Dominicos tomaron como ejes de su carisma el estudio y la predicación, unidos a la pobreza mendicante.

1. JUSTIFICACIÓN

¿No hemos sentido hoy también la urgencia del éxito inmediato de nuestra predicación? ¿No hemos buscado, más que la liberación real de las personas, el triunfo de nuestras ideas, incluso de algunas tan nobles como por ejemplo la de "liberación"? ¿No hay una muy reciente tentación de profesionalizar la predicación en la Iglesia, actuando los "predicadores" como maestros que se creen únicos poseedores de toda la verdad?

La figura de santo Domingo nos ha de servir tanto para denunciar actitudes, como para anunciar la grandeza de la predicación. Grandeza que se cifra: en la aproximación cordial al mundo en que vivimos, al que predicamos; en el gozo de ver cómo las semillas del Verbo están extendidas por tantas culturas y sociedades y cómo somos capaces de descubrirlas, para disfrutar del diálogo con hombres y mujeres de buena voluntad; en la conciencia de que todos necesitamos estar atentos a la escucha del soplo del Espíritu que sopla donde quiere.

Grandeza que no se mide por las multitudes que la escuchan, ni por el número de las "conversiones", sino por el diálogo paciente, como el de Domingo con el posadero, por la disponibilidad para escuchar en el simple trato personal, en la disponibilidad para extender la mano para ofrecer ayuda o para solicitarla. En definitiva, grandeza porque no nos predicamos a nosotros mismos, sino a Cristo, el liberador de la condición humana. Y siempre desde la simpatía, sintonía, compasión, cariño hacia los hombres y mujeres a los que llega esa predicación. Algo que está al alcance de todos, todos tenemos algo que decir y mucho que aprender.

Ubicarnos en el tiempo, en el espacio y en lo que somos, nos ha permitido como Orden Dominicana, mantenernos como un pilar importante en nuestra Iglesia Católica para seguir compartiendo la misión de Jesús: Anunciar la Buena Nueva a la humanidad doliente a partir del contacto con la pobreza de la gente; haciendo de la contemplación, la predicación y la vida fraterna, ejes de nuestra vida para la tarea evangelizadora.

1. OBJETIVO GENERAL

Celebrar desde la vida el acontecimiento de los 800 Años de la Fundación de la Orden de Predicadores, con espíritu de familia y reconciliación, para asumir la misión de anunciar la Buena Nueva de Jesús a todos los hombres y mujeres de buena voluntad, haciendo nuestros los valores que animan la vida dominicana.

1. OBJETIVOS ESPECÍFICOS

1. Sensibilizar y motivar a la comunidad educativa dominicana para disponerse a la celebración del Jubileo de los 800 años de la Orden de Predicadores.

1. Profundizar en el conocimiento de la vida de Nuestro Padre Santo Domingo, así como en la historia, santos y personajes de la Orden, para asumir nuestra misión de predicar el Evangelio al estilo dominicano.

1. Comprometernos en la tarea de predicar el Evangelio, dando testimonio de los valores que animan la vida dominicana.

1. Dar gracias a Dios por los 800 Años de la Orden de Predicadores, compartiendo nuestra experiencia de vida, y asumiendo nuestra diversidad como una riqueza, para dejarnos iluminar por la espiritualidad dominicana y adquirir unidad en la tarea evangelizadora.

1. Asumir la tarea de predicar el Evangelio en los distintos ámbitos en que nos desempeñamos, al estilo de Santo Domingo de Guzmán.

1. ETAPAS:

1. ACTIVIDADES POR ETAPAS:

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