EL APRENDIZAJE AUTÓNOMO EN LA EDUCACIÓN A DISTANCIA

EL APRENDIZAJE AUTÓNOMO EN LA EDUCACIÓN A DISTANCIA

INTRODUCCIÓN

Numerosas teorías se han ocupado de explicar la forma en que los adultos, ya sea en forma presencial o a distancia, aprendemos. Estas teorías han contribuido con diversos enfoques, cada uno de significativa importancia a la hora de reflexionar sobre cual es la mejor forma de encarar el diseño de un proyecto EAD. Sin duda, y como convenimos en el trabajo anterior, los modelos más apropiados para este tipo de proyectos son: el aprendizaje por descubrimiento ( Bunner), el aprendizaje significativo (Ausubel), el rol del facilitador en el aprendizaje (Rogers), y otros modelos, algunos de ellos constructivistas, que dan cuenta de algunos de los procesos involucrados en el aprendizaje de los adultos.

Sin embargo, cuando nos detenemos a reflexionar a cerca de la naturaleza de los alumnos que optan por una educación presencial y los que lo hacen por una educación a distancia, advertimos, que si bien los dos grupos podrían utilizan los mismos procesos cognitivos para resolver consignas, frecuentemente los estudiantes de la modalidad virtual desarrollan otras características a través de la incorporación de estrategias cognitivas y afectivas, logrando favorecer el trabajo autónomo e incrementar el rendimiento general de los alumnos.

Una investigación realizada en la Universidad Nacional de Educación a Distancia, UNED (España) por José Manuel Suárez Riveiro y Daniel Anaya Nieto, para determinar las diferencias en componentes cognitivos y motivacionales en el aprendizaje presentes en ambos grupos, arrojó los siguientes datos con respecto a los alumnos de modalidad virtual:

1. Los alumnos presentan un mayor nivel motivacional

2. Se consideran a sí mismos más capaces de controlar el proceso de aprendizaje, así como más eficaces tanto en el desarrollo de su aprendizaje como en el resultado que pueden obtener, acompañado de menores niveles de ansiedad

3. Muestran mayor nivel en orientación a metas de aprendizaje

4. Y la utilización de estrategias más básicas, como las de repetición y organización, pero también de otras más complejas, como las de autorregulación metacognitiva.

Estos datos establecen claramente que los alumnos que optaron por los cursos de modalidad a distancia, desarrollaron la capacidad de ser más autónomos (ítem2), y más conscientes de los procesos cognitivos utilizados durante la investigación (4), mostrando un menores niveles de ansiedad (2), y un mayor grado de motivación en la realización de las tareas administradas (1).

A la luz de los resultados de esta investigación, sería apropiado preguntarnos, que hace que los alumnos de modalidad virtual se comporten en forma diferente durante a la resolución de una misma actividad.

Por un lado, es evidente que los alumnos que eligen la modalidad virtual, lo hacen, o por que no pueden trasladarse a las instituciones educativas, o por que no pueden responder a las demandas de tiempo que la modalidad presencial les exige. Por otro lado, sienten que quieren cambiar su proyecto de vida y sienten que la modalidad a distancia les brinda la oportunidad de tener una titulación que de otro modo no podrían conseguir. Sus ansias de aprender son grandes, su perseverancia aún mayor, se sienten seguros de poder cumplir con un programa al que ellos mismos pueden darle su toque personal. Es precisamente su motivación la que los impulsa, los empuja a trasformar su realidad. El autor Sarramona López, en forma simple y clara, define la palabra motivación:

“Es un constructo empleado para describir las fuerzas internas y externas que producen la decisión, dirección, la intensidad y la persistencia del comportamiento”

Es esta motivación la que los lleva a poder trabajar en forma independiente, por que, aún cuando necesitan la ayuda del “facilitador” no pueden esperar que alguien les “tire una punta” como dicen los chicos……Estos estudiantes son autónomos, son capaces de investigar, encontrar sus propias conclusiones fundamentarlas, aún cuando el resto de sus compañeros, no están de acuerdo con su elección. Villavicencio, en su obra “El aprendizaje autónomo de la educación a distancia cita al autor Constance Kamil que señala:

“se alcanza la autonomía cuando la persona llega a ser capaz de pensar por sí

misma con sentido crítico, teniendo en cuenta muchos puntos de vista, tanto en

el ámbito moral como en el intelectual”

Como he mencionado anteriormente, el aprendizaje autónomo y la motivación constituyen dos palabras claves en la educación a distancia. En la siguiente sección especificaré y fundamentaré cuales son las cualidades que me definen como estudiante que aprende en forma autónoma.

DESARROLLO

Establezca, fundamentando:

• Si reúne las condiciones propias del estudiante capaz de aprender de modo autónomo

• Qué cualidades posee para el aprendizaje a distancia

Una de las características que los alumnos que participan de un proyecto de educación a distancia deben presentar es la de tomar decisiones a cerca su aprendizaje, ser conscientes de cuales son las mejores estrategias para planificar y realizar su trabajo, que aún cuando necesite la guía de un facilitador, sea capaz de resolver las consignas que se le presenta, y evaluar su aprendizaje, es decir, aprender de una forma autónoma.

Es precisamente en el marco de este pensamiento, que como estudiante de modalidad virtual, debería reflexionar a cerca de si reúno las condiciones necesarias para ser un estudiante autónomo, y de ser así, identificar cuales son las cualidades que reconozco en mi comportamiento como estudiante.

Para poder realizar esta tarea, tomaré como marco de referencia la definición que el autor Manrique Villavicencio nos presenta de la palabra autónomo en su trabajo:

“Entonces a manera de síntesis, podemos afirmar que la autonomía en el

aprendizaje o el aprendizaje autónomo es la facultad que tiene una persona

para dirigir, controlar, regular y evaluar su forma de aprender, de forma

consciente e intencionada haciendo uso de estrategias de aprendizaje 1para

lograr el objetivo o meta deseado.”

De acuerdo a esta definición, mi aprendizaje es autónomo, ya que soy capaz de dirigir mi propio aprendizaje, es decir, darle una dirección personal (dentro de los parámetros esperados), pero a la vez acertada a la resolución de las tareas; puedo controlar mis tiempos, aunque a veces, los tiempos nos juegan en contra

(especialmente cuando contamos

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