ENCUESTA SOBRE EL SUICIDIO
Enviado por • 21 de Noviembre de 2014 • 3.268 Palabras (14 Páginas) • 848 Visitas
Gerson Esau Calvo Jonapa
Escuela secundaria tec.num 79
Grado 2 grupo I
Español 2
Oscar Manuel Nucamendi Hernadez
REDACCION DE CUENTOS
INTRODUCCION
ESTE CUADERNILLO CONOCERAS CUENTOS MEXICANOS E HISPANOAMERICANOS CON SUS RESPECTIVOS AUTORES
El lobo que cree que la Luna es queso.
Andaba el lobo muy hambriento y ya no sabía que hacer para coger algún animal para comerselo. Y por hay encuentrasé con la zorra y le dice:
-- Oiga usted, señora zorra, que me la voy a comer.
Y la zorra le dijo:
--Pero mire usted, que estoy muy flaca. No soy más que huesos y pellejos.
--No, que usted estaba muy gordita el pasado año.
--El año pasado si que estaba gordita, pero ahora tengo que darles de mamar a mis cuatro zorritos y apenas hallo bastante para crear leche para ellos.
--¡Que no me importa!, la dijo el lobo.
Y iba a darle la primera mordida, cuando la zorra le dijo:
--Deténgase usted, por dios, señor lobo. Mire que yo se donde vive un señor que tiene un pozo lleno de quesos.
Y se fueron la zorra y el lobo a buscar los quesos. Y llegaron a una casa y pasaron unas tapias y llegaron ande el pozo, y la Luna se reflejaba en el agua y parecía un queso. Y se asomó la zorra y volvió y le dijo al lobo:
--¡Ay amigo lobo, que el queso es grandón! Mire asomesé usted.
Y se asomó el lobo y vió la Luna y creyó que era un queso grandón. Pero el lobo sospechoso ,la dijo a la zorra:
--Pues bueno, amiga zorra, entre usted por el queso. Y la zorra se metió en uno de los cubos y entró por el queso. Y desde abajo le gritaba al lobo:
--¡Ay, amigo lobo! ¡Que grandón está el queso! ¡No puedo con él! Venga usted a ayudarme a subirle.
--Pero no puedo yo entrar -- la decía el lobo--. ¿Cómo voy yo a entrar? Súbalo usted sóla.
La Mata de Albahaca, de España.
Era una mujer que tenía tres hijas. Y tenían en el jardín una mata de albahaca y cada día salía una de las hermanas a regarla.
Un día salió a regar la mata de albahaca la hija mayor. Y cuando estaba regándola, pasó por allí el hijo del rey y le dijo:
--Señorita que riega la albahaca, ¿cuantas hojas tiene la mata?.
Y como no supo responder se fue el hijo del rey para su palacio.
Y al día siguiente pasó otra vez el hijo del rey por la casa y salió la hermana segunda a regar la albahaca, y él la hizo la misma pregunta:
--Señorita que riega la albahaca, ¿cuantas hojas tiene la mata?.
Tampoco supo responder y el hijo del rey se fue para su palacio.
El tercer día, cuando volvió el hijo del rey a pasar por la casa, la hermana menor pasó a regar la albahaca, y él le hizo las misma pregunta que a las otras:
--Señorita que riega la albahaca, ¿cuantas hojas tiene la mata?.
Y ella le respondió:
--Señorito aventurero, ¿cuántas estrellas tiene el cielo?.
Y como el hijo del rey no supo responder a esta pregunta, se fue a su palacio muy avergonzado.
Y entonces el hijo del rey como estaba muy avergonzado de ver que no habia podido responder a la pregunta de la hermana menor, se metió a encajero y salió a vender encajes a todas partes. Y llegó a la casa en donde vivían las tres hermanas y salieron a ver que vendía. Y la hermana menor escogió por fin una puntilla y le dijo al encajero:
--¿Cuánto quiere usted por esta puntilla?
Y él le dijo:
--Por esta puntilla un beso.
Pablito el bajito
Había en un pueblo un niño que era muy bajito y estaba muy acomplejado por su pequeña estatura. Además los amigos siempre se lo hacían saber, lo pequeño que era.
Un día él y varios amigos (de los que siempre se metían con su estatura) se fueron al campo. De golpe aparecieron unas nubes negras y se empezó a oscurecer el día. Una fuerte tormenta les pillo y para resguardadse de la lluvia, buscaron cobijo, ya que estaban a varios kilómetros del pueblo.
Después de un buen rato buscando, encontraron una cueva y se metieron en ella. La cueva era muy bajita y todos tenían que ir agachados, menos Pablito que era como se llamaba el niño bajito.
De golpe se sintió un ruido en el fondo de la cueva y todos se asustaron, menos Pablito, que aunque era más bajito, era el más valiente de todos. La lluvia era muy fuerte y relámpagos y truenos no paraban.
El ruido se iba acercando y todos en la puerta de la cueva temblando, sin saber que hacer.
Pablito cogió un palo y se adentró en busca del ruido.
Minutos más tarde se presentó con un pequeño cordero en la mano.
Los amigos le dieron un abrazo y desde entonces, para ellos dejo de ser bajito.
La grandeza de las personas, no se mide en centímetros.
Fuente: Pablito el bajito
Nilu y gato
Nilu decía a todo el que quería oírla que su gatito Gato era sorprendentemente listo.
Presentó a Gato al señor perro, al gallo Ki y al pájaro Pió.
Un día la madre de Nilu escucho piar en la habitación de la niña.
-¿No tendrás un pájaro Nilu?
- No mama, es Gato.- el gatito hizo pio pio
- ¡Dios mío!.- exclamo la madre de la niña.- este gato esta loco
- No mama es que .........- la madre no le dejo acabar la frase.
Otro día el padre de Nilu escucho ladrar.
- Nilu no tendrás un perro en la habitación
- No papá, es Gato.- el gatito hizo guau guau
- ¡Santo cielos este gatito esta enfermo!
- No papa es que es .....- Pero tampoco le dejo acabar la frase.
Una mañana muy temprano los padres de Nilu se despertaron asustados al oír un gallo cantar. Corrieron a la habitación de Nilu, sobre el armario de la niña estaba Gato dando los buenos días con su kiriquiki.
- Esto no puede continuar así, tendremos que llevarlo al veterinario, este gato esta muy loco. Y así fue, como padres, niña y el gato fueron a visitar al veterinario,
- A ver Gato, qué es lo que dicen que puedes hacer ¿guau?.- Pregunto el veterinario.-Y el gatito hizo guaua
- Y piar ,sabes piar?.- Y el gato pió
- Nilu, por qué crees que tu gatito es tan raro, ¿qué le puede estar pasando?
- Nada, dijo la niña
...