ENSAYO,EVALUACION DE APRENDIZAJES

INTRODUCCIÓN

Centrar la tarea del preescolar en el niño no significa de ninguna manera dejar la educación al azar de los deseos infantiles. Supone, por el contrario, una planificación rigurosa, tal como lo menciona Dean (1993:74) hay que ser capaz de prever los problemas y evitarlos mediante la planificación cuidadosa considerando cada detalle. Pero esta planificación no está ya basada en lo que los adultos creen que deben transmitir, sino en lo que sabemos que los niños pueden descubrir, en sus posibilidades reales de avanzar en la construcción del conocimiento.

La atención educativa que deben recibir los niños preescolares debe interpretarse como un sistema de interrelaciones profundas entre el niño y sus compañeros, entre el niño y su maestro, la familia, el ambiente y la comunidad. En tal sentido es importante tener presente en qué momento un niño se encuentra en edad preescolar. El niño también forma parte de un sistema de relaciones que influyen en su desarrollo que se inician en el hogar con sus padres y miembros de su familia, luego otros niños y adultos distintos, las relaciones en el colegio, y más tarde la comunidad en la que se desenvuelve (Brophy, 1998).

El niño tiene necesidad de explorar, conocer y actuar sobre el mundo que lo rodea y es a partir de allí que construye y avanza en sus conocimientos. El niño necesita tomar decisiones, planear y llevar a cabo acciones para así ubicar, dominar y controlar el ambiente que lo rodea. Por todo ello se necesita brindar una educación integral y de calidad con la cual el niño pueda desarrollarse plenamente.

LA EDUCACIÓN PREESCOLAR… ¿UN PROCESO INTEGRAL?

Se habla de integralidad porque todo lo que se realiza en el preescolar es en beneficio del desarrollo del niño, basando los conocimientos en competencias. Los niños que ingresan al preescolar tienen la oportunidad de recibir una educación acorde a sus necesidades para que puedan lograr desarrollar su autoestima, ciertas habilidades y conductas básicas, lo que les permitirá integrarse fácilmente a niveles superiores de su vida social, y a un sistema educativo más avanzado, se puede mencionar que las mejoras en el desarrollo intelectual y emocional del niño que se incorpora al preescolar, es tarea de los docentes; así como de crear un ambiente determinado que propicie un clima positivo y de mutuo enriquecimiento entre alumnos y profesores (Martín Bris, 1997), de esta manera se estará logrando que el pequeño adquiera experiencias que influyan en las actitudes hacia el proceso de aprendizaje, en el concepto que tiene de sí mismo, y en la capacidad para formar y mantener relaciones sociales y emocionales en el futuro.

Durante la edad preescolar aparece un notorio contraste en el desarrollo de capacidades y ritmos de aprendizaje; esta diversidad es una de las grandes características de dicha edad y ha servido de base para plantear estrategias docentes que apoyen la diversificación, constituyendo uno de los retos más difíciles de la pedagogía actual. Con relación a esto cabe citar a Tomlinson, Carol Ann (2001) quien opina:

Los profesores deben estimular los puntos fuertes de los estudiantes y hacerles superar los escollos que encuentran en el aprendizaje. Esto sólo puede hacerse mediante el uso de diferentes técnicas de instrucción.

Por lo anterior cabe mencionar que el currículum del nivel preescolar adopta como fin último facilitar el desarrollo integral del niño, lo que considero que se deben tener presentes dos principios prácticos de importancia: uno es que todas las actividades a realizar con el niño han de respetar y adecuarse al proceso y ritmo de su desarrollo, graduándose de acuerdo a la secuencia con que aparecen las diferentes necesidades, intereses y habilidades, esto ha de hacerse respetando también las diferencias individuales y estilos personales que muestran los niños de una misma edad, la cual tiene amplia relación con la atención a la diversidad (Batalla de Imhof, 2001). El otro principio práctico es que las actividades se definen según la relación que guardan con las diferentes áreas en que se divide el desarrollo: física, psicomotora, cognitiva, socioemocional y de lenguaje. Con relación a este punto, es bueno destacar que ésta es una división metodológica para hacer más fácil el trabajo, pero esas áreas en el niño se dan integradas, todas están relacionadas entre sí con ello se estaría favoreciendo la globalización; por ello, una actividad dada puede favorecer el desarrollo del área cognitiva, pero al mismo tiempo permite a los niños una intensa interacción socioemocional, además de favorecer sus destrezas motoras en este punto se estaría abordando la transversalidad. En este sentido, la orientación curricular preescolar adopta como fin central el facilitar el desarrollo integral del niño.

Otro factor al que nos podemos enfrentar en los preescolares es la participación de los padres y de la comunidad los cuales pueden influir tanto de manera positiva como negativa para ello seria importante asistir a las familias en la atención y cuidado de sus hijos menores de 6 años. Esta asistencia se entiende en el sentido de que la institución preescolar y los maestros

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