HACIA UNA PROPUESTA DE EVALUACIÓN EN LA RESOLUCIÓN DE PROBLEMAS

La evaluación es un proceso que tiene como objetivo determinar el grado de eficacia y eficiencia con que se han empleado los distintos recursos para que el alumno adquiera un conocimiento y/o habilidad, es también una actividad muy importante dentro del proceso enseñanza-aprendizaje, ésta siempre tiene que cumplir con una característica: debe servir para medir los conocimientos de forma cualitativa y cuantitativa, cualitativa que mida lo que el alumno sabe en cuanto a información y que sirva para asignar un valor numérico a ese mismo conocimiento (cuantitativo).

En el proceso enseñanza-aprendizaje de cualquier materia es de suma importancia el evaluar, tan es así que para diversas asignaturas se realizan un sin número de formas de evaluación, todo depende de lo que se pretende arrojar con dicha evaluación, en la asignatura de matemáticas no se hace la excepción y existen diferentes propuestas para evaluar al alumno de acuerdo a la actividad que realice en la asignatura como por ejemplo la resolución de problemas.

El autor Luz Manuel Santos Trigo hace referencia a una propuesta para evaluar a los alumnos cuando resuelven problemas; se manejan dos opciones donde la segunda es la complementación de la primera, la primer opción es evaluar el proceso que el alumno realiza para resolver un problema el cual tiene que arrojar la información sobre las actividades que el alumno realizó y desarrolló para darle solución al problema planteado. El segundo es por medio de una entrevista según Davis (1984).

Según Santos Trigo un modelo de evaluación que intenta analizar el proceso utilizado por los estudiantes al resolver problemas está integrado por tres momentos que son:

El primer momento está dirigido al entendimiento del problema, es decir que el alumno demuestre que entendió y comprendió el problema.

El segundo momento se relaciona con la habilidad del estudiante para seleccionar y usar estrategias de solución, es decir que una vez que el alumno entendió el problema sabrá que estrategias puede usar para resolver dicho problema y elegirá una de ellas para hacerlo.

El tercer momento implica revisar los aspectos relacionados con lo razonable de la solución y la extensión del problema, es decir que tan buena fue la selección de la estrategia para su resolución y qué tan largo y complejo es el problema, si al final el alumno hizo una buena selección o si se le debe indicar que sería bueno optar por alguna otra estrategia.

He aquí donde se hace presente la segunda opción para evaluar, la entrevista (Davis, 1984), puesto que poner al alumno a resolver problemas en su cuaderno no arrojaría toda la información que se necesita para evaluar, es por ello que Davis plantea la entrevista como medio de complementación a este tipo de evaluación, es el perfecto instrumento para arrojar información complementaria sobre

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