LA FALTA DE BUENAS COSTUMBRES

¿Por qué el Perú está sufriendo una pérdida de valores en la actualidad?

Existe una enorme carencia de valores en el mundo, incluyendo al Perú, una realidad que vemos a diario en los noticieros, revistas, periódicos y demás medios de comunicación, nacionales e internacionales. Es quizás, este el problema más grave que atraviesan las familias y las sociedades del mundo en general. Este problema se puede observar en todas las clases sociales, desde el más rico hasta el más pobre y entre estos están la pérdida de respeto a la autoridad, la impuntualidad, la descortesía, la agresividad, la discriminación, etc. La falta de respeto que se le ha perdido a la mujer y ya en muchos casos que ya ni la mujer exige ese respeto, ya que en la mayoría de los casos se quiere igualar mucho al hombre por la “igualdad de géneros” que debe haber entre ellos; las adicciones tempranas al cigarro, consumir bebidas alcohólicas, el fumar que ya no solo se ve en los adolescentes si no en la mayoría de la comunidad, también los embarazos no planeados en adolescentes, y a veces esta falta de responsabilidad por parte de la persona lo resuelve con un aborto, una forma muy fría y deshumanizada.

Debido a que nuestra sociedad peruana en estos últimos tiempos está atravesando situaciones muy difíciles y críticas, no solamente de carácter estructural, sino, al mismo tiempo, la cotidianeidad se está convirtiendo en el horror y la orden del día, se observa y se experimenta una crisis en el hogar, en la que la crisis de valores de tipo Ético y Moral no solo afecta a la persona, a la familia, a la sociedad, sino también a toda nuestra cultura.

La educación y formación de valores en el hombre empieza desde su más tierna edad. La identificación de educación y desarrollo de valores es una interacción continua entre el individuo y su entorno sociológico, en donde se van desarrollando de una forma progresiva los hábitos de una convivencia civilizada, de unos valores éticos como la solidaridad, la tolerancia, entre otros. La habituación y consistencia de estos valores pueden ser sofocadas o estimuladas según los complejos educativos que actúan sobre ellos. Los valores culturales de un pueblo, de una sociedad, de un país, en los que se ven implicados como docentes y discentes la sociedad entera. Los medios que empleen estos agentes educativos pueden marcar el futuro formativo de toda una generación. Es la cultura de un pueblo, su identidad, que la diferencia de otros pueblos o países.

Todo esto se debe a los padres que no les dan la educación necesaria a sus hijos, o tienen malas amistades que les dan conceptos erróneos de los valores y ya ni siquiera si los saben los ponen en práctica. Si en la educación que les dieran a los hijos hubiera una mejor enseñanza en cuanto al respeto a la vida y a la importancia de los valores, todos los seres humanos serían consientes de practicar valores y virtudes en donde nos conlleve a vivir mejor dentro de una sociedad íntegra y organizada, sin delincuencia, muertes ni narcotráfico. Es por eso que la enseñanza sobre los valores es necesaria, no como obligación de aquello que la persona tiene que dar o hacer por el bien del otro, como algo impuesto, si no como aquellas normas que deben enseñarse a la sociedad como por ejemplo, los principios morales y una mejor conducta

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