LAS INFECCIONES DE TRANSMISIÓN SEXUAL

LAS INFECCIONES DE TRANSMISIÓN SEXUAL

Según Garrido (2012) La salud sexual tiene el objetivo del desarrollo de la vida y de las personales en un ambiente propicio, sustentado en una adecuada atención e higiene sexuales; en una sexualidad consciente y gratificante, sin discriminación de las preferencias individuales o formas de expresión y que garantice la atención en materia de reproducción y de enfermedades de transmisión sexual.

Por ello, es preciso recalcar la importancia que han dado los organismos internacionales a temas tan delicados como lo es la salud sexual; ello ha sido planteado por Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud en temas tales como los planes de prevención y tratamiento del VIH y otras infecciones de transmisión sexual para trabajadores sexuales en países de ingresos bajos; en donde se propones recomendaciones pertinentes para un buen enfoque en la salud pública.

En cuanto a los posibles beneficios en base a una futura tipificación de dicha conducta, estos pueden asegurar el resguarde de la salud sexual de los sujetos pasivos; por lo que se prevendrían la infección de infecciones de transmisión sexual tales como la sífilis, la gonorrea, la clamidia, VIH, etc.

Para ello vale especificar primero, una pequeña definición de las infecciones de trasmisión sexual.

Según la OMS, entre los más de 30 virus, bacterias y parásitos que se sabe se transmiten por contacto sexual, ocho se han vinculado a la máxima incidencia de enfermedades de transmisión sexual. De esas 8 infecciones, 4 son actualmente curables, a saber, la sífilis, la gonorrea, la clamidiasis y la tricomoniasis. Las otras 4 –hepatitis B, virus del herpes simple (HSV o herpes), VIH y virus del papiloma humano (VPH) - son infecciones virales incurables, aunque existen tratamientos capaces de atenuar o modificar los síntomas o la enfermedad.

Las ITS se propagan predominantemente por contacto sexual, incluidos el sexo vaginal, anal y oral. Los síntomas comunes de las ITS incluyen flujo vaginal, secreción uretral o ardor en los hombres, úlceras genitales y dolor abdominal.

Vale recalcar que las ITS tienen efectos profundos en la salud sexual y reproductiva en todo el mundo y figuran entre las cinco categorías principales por las que los adultos buscan atención médica; por lo que más allá del efecto inmediato de la infección en sí misma, las ITS pueden tener consecuencias graves.

Según la OMS, algunas ITS, como el herpes y la sífilis, pueden multiplicar el riesgo de contraer el VIH por tres o más.

ITS tales como la gonorrea y la clamidiasis son causas principales de enfermedad inflamatoria de la pelvis, desenlace adverso del embarazo e infertilidad.

Según la OMS, A pesar de los considerables esfuerzos realizados para identificar intervenciones simples que puedan reducir los comportamientos sexuales de riesgo, los cambios de esos comportamientos siguen suponiendo un desafío complejo, por lo que, actualmente, se tiene como visión de la OMS centrar la atención en poblaciones cuidadosamente definidas, consultar ampliamente con las poblaciones destinatarias identificadas e incorporarlas en las actividades de diseño, aplicación y evaluación.

Otros de los esfuerzos insuficientes incluyen la escasez de recursos, la estigmatización, la calidad insuficiente de los servicios y el limitado o inexistente seguimiento de las parejas sexuales. En numerosos entornos los servicios no pueden detectar infecciones asintomáticas dado que carecen de personal idóneo, capacidad de laboratorio y suficientes suministros de medicamentos adecuados.

1. La Sífilis

Según Martínez (2005) se caracteriza por la presencia de una pápula (lesión similar a una roncha) que evoluciona a una inflación de un ganglio regional; posteriormente, sin tratamiento, esta se produce sordera, queratitis intersticial, lesiones nasales, lesiones de la rodilla, artritis, anormalidades en la dentición permanente, etc. Los primeros síntomas de la sífilis pueden no ser detectados debido a que son muy leves y desaparecen. En resumen, lo primero que aparece es una lesión llamada “chancro”. Esta lesión no produce dolor y es como una llaga en el pene o en la vagina o alrededor de la vagina. También puede ocurrir cerca de la boca, ano o manos. Si la sífilis no se trata, puede avanzar a etapas más avanzadas incluyendo una erupción o rash y eventualmente complicaciones del corazón y sistema nervioso central. La penicilina sigue siendo el tratamiento más efectivo para tratar la sífilis.

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