La Alternancia En El Poder

LA ALTERNANCIA EN EL PODER

El diseño de las políticas públicas requiere un balance delicado de objetivos múltiples, en ocasiones contradictorios, y también una mecánica sofisticada para alinear incentivos y mandatos diferentes. En una sociedad democrática y abierta, esto debe lograrse enfrentando restricciones severa de orden político y externas, y con recursos materiales siempre limitados.

La Administración del Presidente Vicente Fox ha debido responder a estos dilemas, en circunstancias políticas, económicas y sociales muy especiales. La alternancia en el Ejecutivo Federal se caracterizó por una transición sorprendentemente tersa que ocultó la magnitud del cambio operado y los enormes desafíos que tenía el país a inicios del siglo XXI. No basta con ir en la dirección correcta si los países con que competimos avanzan más rápido; no basta con tener un país democrático si la democracia no está ofreciendo los resultados que espera la sociedad; no basta con tener elecciones libres y competitivas si somos incapaces de llegar a los acuerdos y realizar cambios estructurales que han esperado por mucho tiempo los mexicanos.

En nuestro país, el debate en materia de políticas públicas se ha visto limitado por moldes preconcebidos y por una rigidez ideológica incompatible con las necesidades prácticas de la actuación de un Estado moderno y la sociedad dinámica. En la extrema simplicidad de ubicar a algunos gobiernos como neoliberales y a otros como estatistas, los defensores de un lado señalan que los modelos basados en una mayor participación del Estado en la economía, mostraron con absoluta contundencia su capacidad para empobrecer a los mexicanos; los defensores del otro, critican la falta de capacidad para impulsar el crecimiento, abatir la pobreza y mejorar la distribución del ingreso de los modelos con reformas que se han dado, si no la insuficiencia de las mismas, ya que en México, como en mayor parte de los países de América Latina, nos hemos quedado a la mitad del camino en su aplicación. Debe reconocerse asimismo que el diseño de muchas de estas reformas fue inadecuado en sus aspectos operativos. Más allá de este debate, lo que realmente permite identificar la tendencia de un gobierno en materia de políticas públicas tiene que ver con ubicar la frontera que existe en cada país o cada gobierno entre lo público y lo privado, entre la participación del Estado y la participación del mercado. Y en esto se dan todos los matices; cada país tiene la mezcla de participación del mercado y del Estado que considera conveniente. No existen reglas porque cada país se encuentra en condiciones especiales en cuanto a su desarrollo, a su cultura política y la madurez de sus sectores público y privado.

EL MEXICO QUE RECIBIMOS, UN MÉXICO CON ENORMES DESAFIOS

En el año 2000, México se encontraba inmerso en un proceso de transición económica política y social. En el ámbito social, mucho se había avanzado en la segunda mitad del siglo XX, como mostraban los indicadores en su materia de salud, educación y servicios básicos para la población. Sin embargo persistían niveles ofensivos de pobreza y carencias incompatibles con el grado de desarrollo general del país. Los contrastes eran evidentes y lacerantes entre los hogares de distintos niveles de ingreso, entre las regiones y las comunidades urbanas

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