La Escuela Y La Sociedad

He tomado la iniciativa de escribir este articulo y compartirlos con ustedes, motivado por una frase que aparece en el libro de Emilio Tenti Fanfani titulado: “Nuevos temas en la agenda de política educativa” impreso en marzo del 2008 y en el cual Jesús Martín Barbero enfatiza:

“desde la primaria a la universidad se debe aprender a jugar con la ciudad”

Pretendo hacer a través de ella un breve recorrido histórico desde la década de los 80 y de poder visualizar juntos los cambios que hemos venido teniendo y enfocarnos justamente en la relación que ha tenido la escuela con la sociedad, comunidad; también desde mi corta carrera docente me he venido planteando algunas preguntas sobre el tema, las cuales también quiero compartir para que ustedes también las reflexionen y por que no en algún momento poder compartir sus apreciaciones al respecto.

Jugar con la ciudad significa un llamado a que las instituciones educativas a que salgan de sus bien demarcados, asegurados predios y entren a la cancha grande donde juegan los ciudadanos de a pie.

Recordemos brevemente la relación escuela-sociedad en que hemos sido formados los mayores de 30 años, sabemos que la escuela ha sido el medio de reproducción de clase sociales y que había personas que no podían acceder a estudios, pero también es cierto que había una mayor oferta laboral que le permitía encontrar un lugar en la sociedad, y los que cumplían con los trayectos de la antigua escuela secundaria eran formados ya sea para poder desempeñarse como auxiliar administrativo, bancos, etc en el caso de la educación impartida por las ex escuelas nacionales y comerciales; en el caso de la escuela técnica le permitía a los estudiantes incorporarse en la industria, talleres, etc y en el caso en que el egresado quisiera seguir con sus estudios universitarios se encontraba preparado para hacerlo. Por el año 95, 96 en el sistema educativo se empezaron a gestar cambios, escuela primaria de 9 años(obligatoria), polimodal de 3 años, pos una mejor educación para todos, que todos tuvieran acceso a la misma, sin perder de vista la calidad, en busca de la contención y la atención a la diversidad. De acuerdo al modelo de país que teníamos en ese momento la escuela fue perdiendo el rumbo social, es decir la misión de sus aprendizajes. Nos encontrábamos que las conductas adolescentes se vieron perjudicadas por el alargamiento de la niñez, es decir tenemos alumnos de 15 años en la escuela primaria lo que seria 3° año de la vieja secundaria, además de las diferentes modificaciones en nombres en la materias que en definitiva seguían dictándose de la misma forma, la eliminación de las normas de disciplinas agudizo aun mas la incertidumbre para la planta docente que no fuimos preparados para el cambio. A todo esto la escuela fue perdiendo credibilidad en la sociedad, en la que hemos escuchado preguntas como: ¿Para qué prepara la escuela? ¿Un alumno que egresa del polimodal puede ingresar a trabajar? ¿De qué? Además de ver en todos los diarios extensas notas sobre los fracasos en el ingreso universitario y el escaso nivel académico alcanzado por los estudiantes para acceder a estudios superiores. En el transcurso de esos cambios la familia también se fue alejando de las instituciones educativas y las falencias del sistema hicieron que los docentes empezaran a ser cuestionados por los padres y por los alumnos, los cuales hoy en día tienen “tomada la escuela”. Acaso no son adolescentes y estos necesitan imperiosamente una guía para su formación tanto conceptual como en valores, por que se dejaron de hacer las cosas que nos han hecho bien para nuestra formación. Bueno a todo esto las mas perjudicadas en las modificaciones fueron las ex escuelas nacionales y comerciales, porque las escuelas técnicas pudieron ir resistiendo y les permitió su infraestructura ir adaptándose a algunos requerimientos sociales como por ejemplo técnico en computación, técnico mecánico, electricista, etc. Todo lo anterior ha hecho que la escuela

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