La Eutanasia

1. La Eutanasia

Para comenzar con el tema aquí está la definición de este concepto:

1.- Muerte dulce, sin sufrimiento.

2.- Muerte que se produce durante un sueño, provocado generalmente mediante drogas, con el fin de evitar una agonía dolorosa.

3.- Se conocen dos clases de eutanasia: activa y pasiva.

Se emplea principalmente esta palabra para designar una teoría según la cual es lícito precipitar la muerte de los enfermos incurables y aquejados de fuertes dolores con el fin de evitarles sufrimientos inútiles. Esta teoría ha merecido la reprobación de la Iglesia católica y no ha sido aceptada por ningún Estado, puesto que, además de chocar contra los principios religiosos, carece de fundamento jurídico.

Retomando el punto 3 de la definición la eutanasia pasiva significa abandonar los refuerzos infructuosos, por considerarlos absurdos para prolongar o mantener la vida, cuando se considera que ya no tiene sentido la supervivencia. La eutanasia activa consiste en poner término a la vida de manera deliberada cuando faltan signos considerados esenciales para la vida. En teoría ambas acciones pueden hacerse a requerimiento del paciente (voluntaria), o sin su conocimiento (involuntaria).

Desde un punto de vista jurídico es la muerte provocada por propia voluntad y sin sufrimiento físico, en un enfermo incurable, a fin de evitarle una muerte dolorosa, y la práctica consistente en administrar la droga, fármacos u otras sustancias que alivien el dolor, aunque con ello se abrevia su vida. Caen fuera de este concepto las muertes causadas a enfermos ancianos, enfermos mentales y otros, que se estimaran simples homicidios y asesinatos. Tampoco se considera eutanasia el no aplicar al enfermo incurable un medio extraordinario de costo muy elevado o de sofisticada tecnología que puede procurar el alargamiento de la vida del paciente, pero no su curación.

Como no suele existir previsiones especificas en los códigos penales, por lo general si la eutanasia sé práctica sin el consentimiento de la persona, la mayoría de los ordenamientos la considera delito de homicidio o si se lleva a cabo con consentimiento, delito de auxilio al suicidio. Con todo, un médico puede sin embargo, decidir la no-prolongación de la vida de un paciente desahuciado, o la administración de una droga que le aliviara el sufrimiento, aunque le acorte la vida. El problema se suele plantear cuando la víctima se encuentra imposibilitada para prestar el consentimiento y no había manifestado nada al respecto con interioridad.

El debate sobre la licitud moral de la eutanasia ha llegado a exacerbarse tanto en el siglo 20 que incluso se han creado no pocas asociaciones que claman por el reconocimiento de un legítimo derecho a morir con dignidad. El movimiento para la legalización de estas prácticas, comenzó en Inglaterra en 1935 con la creación de la asociación por la legislación de la eutanasia voluntaria, que después se denominaría asociación la eutanasia. Año después se fundó otra asociación con el mismo objeto de estados unidos. Sin embargo, la polémica se remonta a la antigua Grecia pues se haya textos acerca de este tema en Sócrates y Platón.

Creencias sobre la eutanasia

Las creencias cristianas fueron bien documentadas por Tomás de Aquino, él condenó el suicidio porque:

• Infringe el deseo natural de vivir.

• Daña a otra gente.

• La vida es un regalo de Dios y así mismo sólo él puede quitarla.

Michel de Montaigne fue el primer disidente importante entre los escritores europeos. Escribió 5 ensayos que tocaron el tema del suicidio, y concluyó que es una elección personal, y racional bajo algunas circunstancias

Posición de las distintas religiones frente a la eutanasia

La Iglesia Católica Romana, la Luterana y la Episcopal han emitido declaraciones formales opuestas a la eutanasia y al suicidio asistido. Los grupos de fe Evangélica y Fundamentalista se cree que están también en desacuerdo con estas prácticas.

La Asociación Unitaria - Universalista, un grupo liberal, emitió una declaración en 1.988 a favor de la eutanasia y, si hay condiciones adecuadas, del suicidio asistido. Declaraciones similares

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