La igualdad de género en la Religión

La igualdad de género en la Religión En la actualidad este es un tema en el cual muchas veces caemos en especulaciones y supuestos, cuantas veces nos hemos preguntado si la mujer tuviera un peso más grande en cuanto a los temas religiosos. En primer lugar hablar de Religión es un sinónimo de debate para cualquier tipo de persona, no importa su clase social o su posición económica, el simple hecho de pensar en un ser teológico que ciertas ocasiones son “regidos” por cierto tipo de “reglas o mandamientos” los cuales siempre han tomado a la mujer como segundo término es igual a formular ideas que nos lleven a una conclusión subjetiva. Si nos ponemos a analizar desde el aguje de la religión católica/cristina, el papel de la mujer siempre ha sido de esta manera, secundario. Retomando algunos pasajes de índole bíblicos como aquella ocasión en que Jesús, el hijo de Dios salvo a una mujer de ser apedreada por el cargo de adulterio, donde surgió la famosa frase célebre “Quien esté libre de pecado que lance la primera piedra”. Dicha frase se ha colocado como icono representativo en todas las conversaciones de la vida cotidiana, por mencionar un ejemplo para que sea más claro el concepto de la mujer en la religión. A pesar de los avances en el pensamiento cultural y humano, en las posiciones jerárquicas de los empleos, cargos políticos e institucionales, en cualquier tipo de comunidad o país, la mujer no tiene un peso tan relevante como el hombre. Manteniendo la siguiente postura en la cual el hombre es el ser biológica y evolutivamente hablando, el más apto para realizar las actividades de mayor peso o cargo por medio de la “fuerza” o por ser simplemente “hombre”. Claro está en las diferentes culturas como la judía que la mujer se encarga de cuidar del hogar y el macho tiene la tarea de ser el proveedor y ver que a su familia nada le falte, ser el encargado de organizar las actividades y celebraciones, estas son organizadas por un clero que también rige políticamente como ellos le llaman “comunidad”. Retomando el tema religioso, la cultura judía tiene bases en He ova siendo este padre de Jesús, pero ¿Cómo es que estas religiones tienen tanto en común y para nuestro pensar parecieran completamente distintas? Lo que tienen en común es lo siguiente: La mujer asume el papel (no porque ella así lo decida, sino porque está dicho en las escrituras del ser teológico) de sumisa u obediente ante el hombre. Sin embargo existen diferentes religiones que promueven la igualdad entre hombres y mujeres, dándole el mismo peso cultural, social y jerárquico a ambos sexos. Para ello cito a Juan José Tamayo “Si continúan por la senda patriarcal por la que ahora caminan, en el siglo XXI las religiones perderán a las mujeres, hasta ahora sus mejores y más fieles seguidoras.” Hablando de manera concreta, la religión católica/cristiana es la que posee mayor “popularidad”, puesto que es la que más seguidores o fieles tiene. La simple celebración del doce de diciembre es otro tema de discusión y debate, si nos pusiéramos a pensar en por qué una Virgen morena es mujer y tiene tanto peso como para atraer bastantes files de diferentes naciones (obviamente de habla hispana, en su mayoría latinoamericanos), lo paradójico de este asunto es que se le está dando un peso a una “imagen” de una mujer que todos aun siendo creyentes conoce la historia en la cual un indígena de nombre Juan Diego se encontró con esta mujer en el cerro de Tepeyac, curo a su tío y en cambio fue con el clero acaro para formar su capilla y ahora la conocemos como la Villa. Según el libro Cuestiones de género: de la igualdad y la diferencia escrito por Teresa Gonzáles Pérez “los roles que le son asignados al hombre y a la mujer han marcado la experiencia religiosa de nosotras, la rigidez en los rituales han replegado a las mujeres como subordinadas a la “estirpe varonil”. El patriarcado fue desplazando a las mujeres de las principales religiones del planeta ocultando su protagonismo e individualizándolas” Uno de los ámbitos con gran influencia en la construcción de los estereotipos de género lo es la religión, es muy común escuchar en los discursos religiosos que la mujer debe someterse a la autoridad del varón ya sea su esposo o su padre, pero nunca se menciona el que tienen que compartir la responsabilidad en las labores del hogar o si pero muy esporádicamente. Como conclusión la equidad de género es la igualdad que existe entre hombres y mujeres, sin que exista machismo o feminismo. Mientras que las creencias religiosas son aquellos gustos de Dioses o creencias que ellos conllevan que tenemos de acuerdo a diversos factores relacionados con el mismo y para resaltar este punto existe el artículo #24 que defiende nuestras creencias; un ejemplo ocurrido en un aula, sucedió mientras se impartían las clases donde se encontraba un alumno que traía un dije de la muerte en su pecho, entonces sucedió que sus compañeras que estaban cerca empezaron a criticarlo por lo que le colgaba del cuello, según ellas estaban dando su punto de vista pues eran de distintas creencias y religiones, incluso le llegaron a decir que tenía pacto con el diablo y cosas por el estilo que llegaron a espantar al joven; la maestra al darse cuenta de esto se puso de pie y trató de poner orden, entonces le dijo que cuando terminara la clase quería hablar con él, y así sucedió, una vez a solas ella le preguntó que por qué portaba esa imagen, que no le iba a ordenar quitársela ni mucho menos, que solo le daría su punto de vista, le comenzó a hablar sobre la biblia, lo que en ella estaba escrito, que ahí decía que no traerás imagen y semejanza de lo que hay en la tierra, en el cielo, etc., una vez terminada la conversación el muchacho le dijo que le había gustado lo que ella le había dicho, que le agradecía enormemente y que investigaría más sobre eso pues él traía el dije sin saber más de él, de lo que se trataba. En este ejemplo se muestra el respeto a las distintas creencias, que quizá en ocasiones algunos quieren dar sus puntos de vista e incluso consejos, pero no encuentran la manera, debemos acercarnos con cautela pues no el que nosotros no profesemos esa religión ellos estén mal, cada quien tiene diferentes formas de ser, de creer, de sentir y de pensar. Maduremos en cuanto la libre creencia y equidad de género pues el machismo o feminismo puede darse por que en sus hogares siempre lo han vivido y de ahí se aprende, salgamos de lo cotidiano, hagamos lo que nos parezca siempre y cuando no perjudiquemos o lastimemos a terceras personas.

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