Las actitudes como elemento clave de las habilidades docentes y profesionales para la atención educativa de las necesidades específicas de apoyo educativo (NEAE) del alumnado

La educación inclusiva es un ítem que reside hoy en día en nuestras vidas, a veces no de la mejor forma, pero con esfuerzo y dedicación, al final conseguiremos que haya una buena educación inclusiva en nuestras aulas y en las vidas diarias. Por eso, es muy importante que lo trabajemos desde bien pequeños y dentro de las escuelas para poder fomentar esa inclusión en todos nuestros compañeros. La educación inclusiva requiere de una formación inicial y continua del profesorado en la que se basa en conocimientos, competencias, valores y actitudes.

En revistas internacionales explican que la mayoría de los docentes mantienen una actitud neutral o negativa hacia la integración de estos alumnos en las clases ordinarias de primaria. Estos expertos también plantearon una serie de preocupaciones sobre la cantidad de tiempo que dedican a los estudiantes con necesidades especiales, la falta de servicios de apoyo y preparación para esta práctica, la insatisfacción con la mala calidad de su trabajo, y también debido a una serie de otros aspectos negativos, efectos relacionados con la inclusión. Las actitudes hacia la inclusión son replanteadas cuando entran en juego variable de formación o de experiencia con personas con NEE. En cuanto a la formación, la formación adquirida en las primeras etapas es necesaria para desarrollar una actitud positiva. Los futuros profesionales de la educación están de acuerdo con la educación inclusiva, pero no se sienten preparados para satisfacer las necesidades de los diversos estudiantes en el aula. Los estudiantes con actitudes más positivas hacia la inclusión son los que cuentan con experiencia previa con personas con NEE en un ámbito específico: el familiar. Las creencias de los docentes sobre los alumnos con necesidades especiales (NEE) están relacionadas con valores y actitudes sociales. En este sentido, los docentes enseñan a sus alumnos a que defienden el derecho que tienen todos los niños a ser educados sin exclusiones, se ha demostrado los valores justos y equitativos y de cooperación.

Nuestras actitudes respecto al tema son cómo en el artículo leído y comentado anteriormente, ya que, recibimos mucha teoría sobre la educación inclusiva, pero tampoco la hemos vivido mucho en nuestra escolarización. Con eso quiero decir, es muy importante la educación inclusiva en las escuelas y, gracias a las formaciones que van saliendo y la experiencia de cada docente, vamos mejorando diariamente con mucho esfuerzo y dedicación.

•  ¿Creéis que con vuestra formación inicial estaréis lo suficientemente preparados para enfrentarnos a la realidad inclusiva de las aulas ordinarias? ¿Por qué el Prácticum puede ser un momento crucial para el desarrollo de actitudes positivas hacia el alumnado con NEE?

Haciendo referencia a la formación, a nivel teórico estaremos muy formados, pero, es importante tener en cuenta que al inicio nos puede faltar mucha experiencia, la cual se adquiere llevando a la práctica todo lo aprendido, con situaciones que suceden en el aula, saber gestionarlas, etc.

...