Los sistemas de salud latinoamericanos en transición: una visión para el futuro

Los sistemas de salud latinoamericanos en transición: una visión para el futuro.

La salud se encuentra inextricablemente enlazada con las amplias transformaciones sociales de nuestros tiempos. Tanto las condiciones de salud de la población como los planes institucionales para la atención a la salud revelan aspectos profundos de la estructura social en la que están inmersos. El campo de la salud, determinado en si por el sistema social, reflejan aspectos esenciales de cada sociedad en particular.

Una comprensión de la transición de la salud nos permite imaginar y diseñar caminos alternativos para el futuro.

Entre las distintas maneras de abordar el estudio del futuro, son tres las que sobresalen por su particular importancia. La primera es la proyección cuantitativa de las tendencias, la cual a menudo supone que las relaciones observadas en el presente perdurarán en el futuro. Otro enfoque apoya la construcción forma de seminarios alternativos, frecuentemente ateniéndose a opiniones de expertos. El tercer enfoque, que es utilizado en el presente trabajo, se basa en el desarrollo de una visión explícita de uno de los preferidos para el futuro.

Retos a la salud: la doble carga.

Durante la última década la mayoría de los países de América Latina se han dedicado una búsqueda común para encontrar nuevas y mejores formas de reglamentar, financiar y presentar servicios de atención a la salud.

El contexto cambiante de la Reforma.

Hoy en día la mayor parte de los países de América Latina enfrentan múltiples oportunidades originadas por los avances de la reforma económica y la democratización. Durante el último medio siglo muchos países latinoamericanos han experimentado cambios que los países desarrollados sufrieron durante periodos de tiempo más prolongados. Ha ocurrido a diferentes pasos y velocidades entre los diversos segmentos de la sociedad, lo que con frecuencia ha dado por resultado una creciente desigualdad.

Esos cambios están avivando la campaña en pro de la reforma del sistema de salud. No se enfocamos hacia las principales áreas de transformación con el fin de examinar de qué manera estas se traducen en retos específicos. Las siguientes se cuentan entre las más importantes.

Urbanización. La migración masiva y algunas veces desordenada hacia los centros urbanos ha tenido serias implicaciones ambientales. En 1950, El 25% de la población vivía en zonas urbanas, y para 1970, la proporción era de 58% y para 1990 de 71%. Esta urbanización conduce a una reorganización y aún aumento de la demanda de atención a la salud.

La condición de la mujer. Durante el periodo de 1970 a 1990 la actividad económica de las mujeres aumentó 151% en comparación con un incremento de sólo 68% en el caso de los varones.

Cambios educativos. En las décadas recientes, la asistencia escolar a nivel primaria, secundaria incluso superior aumentado de manera significativa. En Chile, por ejemplo, 29% de los adolescentes y de la juventud se encontraban inscritos en la escuela secundaria en 1970, comparado con el 55% en 1990. En 1960 la población colombiana contaba con un promedio de poco más de dos años de educación terminada; para fines de los años ochenta, el promedio se había incrementado a más de seis años. Esto ha facilitado un avance en los conocimientos y hábitos de salud y a la vez ha originado una población mejor calificada para exigir servicios de salud.

Cambios económicos. El desarrollo económico es el resultado de una serie de procesos de transformación estructural a largo plazo que acompañan al crecimiento. Estos pueden caracterizarse en términos de los elementos del crecimiento económico moderno que incluyen fenómenos tales como la industrialización, urbanización y transformación agrícola. La formación estructural se refleja también en los cambios arriba mencionados que incluyen la transición demográfica, la expansión educativa y urbanización, con sus correspondientes implicaciones para el sistema de salud.

Cambios políticos. Andado como resultado un incremento de las oportunidades de participación social. En el área de salud aumentó una mayor demanda de servicios de mejor calidad y en una mayor libertad para elegir a los prestadores de dicha atención.

Cambios tecnológicos. Los avances de las comunicaciones también cambien la demanda de salud, creando individuos más conscientes de las opciones existentes para recibir atención y de las maneras como se puede conservar la salud.

Retos para la población y las instituciones.

Debido a la desigualdad

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