Luchas por el territorio

Las luchas por el territorio

En el marco del ”Día Internacional de las luchas campesina”, se llevó a cabo la mesa de debate “Córdoba y las luchas por el territorio en el campo y la ciudad”, el día 5 de mayo en ciudad universitaria, U.N.C., en el cual se expusieron diferentes problemáticas, todas unidas por un mismo objetivo, La Lucha.

Particularmente en este ensayo, retomaremos el caso de una comunidad de 36 familias de la Ciudad de Córdoba ubicadas territorialmente en el límite de la Ciudad Capital y Villa Allende, donde habitan desde el año 2007.

Según lo expuesto por una jefa de hogar perteneciente a esta comunidad de familias, la situación de todas estas familias en el año 2007, era de desempleo, sin vivienda, y con familias con necesidades básicas que no podían afrontar cotidianamente. Por lo cual, ante situación, deciden localizar sus hogares en tierras de espacio verde en la periferia de la ciudad de Córdoba.

Paulatinamente realizaron trámites, como la obtención de planos catastrales para ubicar geográficamente su espacio, sin obstáculos aunque sin documentos que avalen la legal propiedad de estos terrenos.

En el año 2014, a través de notificaciones la Empresa de Construcción de viviendas GAMA, anuncia a los vecinos que esas tierras eran suyas, y por lo cual deberían desocuparlas.

A raíz de esta situación se agrupan los vecinos en búsqueda de información y asesoramiento para evitar la desocupación forzosa, con personal policial en ocasiones, y sin respuesta de parte del estado municipal y provincial.

Se organizan y con ayuda de otras organizaciones como la Comisiòn Provincial de Tierras, encuentran apoyo y acompañamiento en la lucha que se da actualmente.

Así mismo, es de destacar que la empresa GAMA, realiza la compra de estos terrenos en el año 2014.

Aquí se visualiza la disputa de la empresa Gama y de las familias por las mismas tierras, por un lado una empresa que pelea por la compra realizada y la que así mismo judicialmente no está avalada, y por otro lado por las familias que ocupan de hecho el lugar desde hace siete años, donde han construido sus viviendas y vida familiar con todo lo que conlleva en su trascendencia. Y existe otro actor protagónico en esta escena que es el estado municipal y provincial, que realiza la venta de este espacio sin realizar constataciones o evadiendo la realidad de estas familias en ese territorio, solo con priorizar el beneficio económico obtenido. Su acción es ante la empresa como ante las familias es ausencia, no interviene ni da respuestas ante la situación generada o con la búsqueda de soluciones para todos los afectados.

En relación a lo expuesto por estas familias, es inevitable plantear cual es el papel del Estado, como regulador de la cosa pública. ¿Cuál sería el papel que debería ocupar ante la situación de las familias con emergencia habitacional y con desempleo que no pueden dar respuesta a esta problemática de forma independiente?¿Cuál es la respuesta que le da el estado a la empresa que compro estas tierras ocupadas? ¿Cuáles son las garantías que debe dar como institución pública?

No está de más recordar un artículo de nuestra constitución nacional, “… El estado otorgará los beneficios de la seguridad social, que tendrá carácter de integral e irrenunciable. En especial, la ley establecerá: … la protección de la familia; la defensa del bien de familia; la compensación económica familiar y el acceso a una vivienda  digna” artículo 14 bis.

Es claro que los emprendimientos inmobiliarios, no contemplan a los sectores que intentan segregar, pero en este proceso también es abalado y acompañado por las distintas esferas estatales.

En este contexto el sujeto popular adquiere ante su lucha, la identidad de vecinos auto convocados por la lucha y cuidado de su espacio, tanto la vivienda, como su tierra de trabajo y familiar.

Desde de esta misma construcción histórico social, estas identidades se moldean, enriquecen, se fortalecen con más o menos sujetos en la lucha del día a día.

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