PERCEPCIONES DE LA CONTABILIDAD

PERCEPCIONES DE LA CONTABILIDAD

DANIELA BEDOYA

ALEJANDRA OROZCO

SANDRA JANETH VARGAS

CORPORACIÓN UNIVERSITARIA REMINGTON

FACULTAD DE CIENCIAS CONTABLES

CONTADURÍA PÚBLICA

RIONEGRO

2016

Uno de los interrogantes que surge a los jóvenes en el momento de decidir que quieren estudiar o en que profesión se quieren desempeñar es la del campo de acción que tiene y no es solamente en la Contaduría Publica sino en todas en general, realizamos un análisis de oferta y demanda y  aunque parezca egoísta a simple vista es normal ya que estamos escogiendo la profesión de la cual vamos a vivir, es normal escuchar no solamente en los estudiantes sino también en los docentes la cantidad de cargos en los que se puede desempeñar el Contador e incluso los salarios de dichos cargos, pero no podemos perder de vista que la Contaduría Publica aparte de ser un medio de vida para el profesional, tiene una función social muy importante que debe inculcarse en el estudiante.

Hasta hace algún tiempo el Contador Público era visto solamente como el tenedor de libros, el encargado de hacer las declaraciones de impuestos y tener la información Contable y financiera de la compañía en orden, este concepto ha evolucionado  a la par con la Tecnología permitiéndole al Contador realizar una labor más de análisis, sin embargo el profesional se debe enfrentar a una sociedad donde los intereses personales de algunos administradores están por encima de los intereses generales aprovechando el conocimiento del Contador para maquillar las declaraciones e informes a su favor convirtiéndolo en un instrumento de manejos inadecuados y acciones que van en detrimento del bienestar social de la sociedad y poniendo en tela de juicio la ética de los profesionales.

El Contador Público debe recibir una educación integral para formar un profesional no solo con habilidades técnicas sino humanas, que más allá de preparar y analizar informes financieros practique valores como la honestidad, la justicia y el respeto.

Es por eso que las universidades están llamadas a modelar la conducta de los futuros profesionales transmitiendo valores que ayuden a lograr una sociedad más justa, sin embargo esta tarea no es fácil ya que los estudiantes solamente quieren centrarse en las materias específicas de su perfil profesional, las que los preparan para intervenir en un mercado laboral con fines netamente económicos, las cátedras que están enfocadas en formar un profesional integral son vistas como “relleno” y las que hay que cumplir como imposición pero por no convicción o decisión ya que desde la óptica no aportan para el fortalecimiento económico del futuro profesional.

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