Poner Lideres En El Sofa

Poner Líderes en el sofá

Una conversación con Manfred F.R. Kets de Vries por Diane L. Coutu

El liderazgo es la obsesión mundial. Miles de libros, muchos de ellos los últimos Best Sellers -han diseccionado los estilos de liderazgo de los grandes líderes de Jesús a Jefferson. Escritores de negocios, también, se han unido al frenesí. El problema es que en gran parte de la literatura de negocios acerca del liderazgo, a diferencia de la literatura más amplia sobre el asunto, comienza con la suposición de que los líderes son seres racionales. En parte, eso se debe a que los lectores llegan a estos libros de negocios buscando asesoría, lo que obtienen son sugerencias sobre cómo imitar motivaciones conscientes, comportamientos y opciones de modelos de conducta. Es poco probable que los libros de autoayuda se centran en gran medida en el lado irracional de los líderes, aún menos probable es que sugieran que los modelos de "éxito” puedan derivar de sus debilidades psicológicas. Sin embargo, la irracionalidad es parte integral de la naturaleza humana, y el conflicto psicológico puede contribuir de manera significativa a conducir al éxito. Seguramente, por lo tanto, podemos beneficiarnos de poner los CEOs en el sofá, para explorar cómo sus experiencias personales tempranas forman comportamientos posteriores y para entender cómo estos líderes se ocupan de los reveses y el dolor.

Aunque algunos eruditos de negocios – Los más destacados Abraham Zaleznik y Harry Levinson de Harvard -han explorado la psicología de los ejecutivos, sólo uno ha hecho el análisis de las vidas de los CEO`s: Manfred FR Kets de Vries, Profesor de Desarrollo de Liderazgo en INSEAD en Fontainebleau, Francia, y director del Centro de Liderazgo Global de Insead. Kets de Vries es también un psicoanalista practicante cuya investigación ha proporcionado excelentes ingresos: Es autor o editor de 20 libros de sobre la psicología de los líderes y organizaciones, incluyendo best sellers, como “Vida y la muerte en el carril rápido de los ejecutivos”, “La mística del Liderazgo”, y “La Organización neurótica”. El trabajo de Kets de Vries le ha llevado cerca de muchas de las principales corporaciones del mundo: Los ejecutivos de empresas como Heineken, BP (British Petroleum), y Nokia han recurrido a su experiencia. De hecho, es quizás justo decir que ningún otro estudioso sobre liderazgo ha tenido tanta exposición en la mente del líder empresarial.

Así que fue a Kets de Vries quien HBR (Harvard Business Review) buscó para conocer a fondo lo que realmente sucede dentro de la mente del líder. En esta versión editada de un amplio debate en su oficina en París, Kets de Vries se basa en tres décadas de experiencia y estudio para describir el perfil psicológico de los CEOs exitosos. Él explora las vulnerabilidades de los principales ejecutivos, que a menudo se intensifican por la forma como sus seguidores tratan de manipular a sus líderes. Kets de Vries también explica cómo estas vulnerabilidades se manifiestan en las organizaciones y sugiere cómo los líderes podrían superarlas. Cual es su receta para el liderazgo saludable? Conocimiento de sí mismo y una vida personal bien balanceada, así como una capacidad de sufrir caídas y reírse de sí mismo.

Usted ha estudiado la psicología de los líderes toda su vida. ¿Cómo identificar a los que tienen éxito?

Lo primero que busco es la inteligencia emocional, básicamente, cómo se auto refleja la persona? Por supuesto, la inteligencia emocional implica mucho más que sólo ser introspectivo. También implica lo que yo llamo el factor de oso de peluche: ¿La gente se siente cómodo con usted? ¿Quieren estar cerca suyo? Un líder emocionalmente inteligente también sabe llegar a la gente y decir: "Oye, Deborah, eres especial. He buscado mucho tiempo por ti, y realmente quiero que seas parte de mi equipo”. En general, los líderes emocionalmente inteligentes tienden a convertir a sus seguidores en mejores jugadores en equipo, y son más eficaces para motivarse a sí mismos y a otros.

Desafortunadamente, el lado derecho del cerebro, -la parte responsable de los procesos intuitivos- no es estimulado en las escuelas de negocios. Como resultado, solo algunos estudiantes trabajan para desarrollar la habilidad de la inteligencia emocional. Por otra parte, los líderes no siempre aprenden en el trabajo. Esto es particularmente cierto en la actualidad, a medida que más y más consejeros delegados provienen del sector financiero, donde la perspicacia emocional y las habilidades de la gente son a menudo subestimadas. Por supuesto, a lo largo de los años, he conocido a ejecutivos de gran éxito que no son auto-reflexivos en absoluto. Son ejecutores totales. Tienes que ser un ejecutor para triunfar en los negocios; dedicarse a observar no hace grandes líderes. Sin embargo, en mi experiencia, los líderes más eficaces son capaces de actuar y reflexionar tanto, que los prepara para la gestión a largo plazo. Estas personas no sólo corren, también toman el tiempo para preguntarse hacia dónde van y por qué.

¿Los antecedentes de los líderes exitosos que has estudiado tienen algo en común?

Hay evidencia de que muchos líderes masculinos exitosos tuvieron madres fuertes de apoyo y padres ausentes, más bien remotos. Esto está muy bien ejemplificado por Jack Welch, quien, en su autobiografía, describe su apego a un centro neurálgico de una madre y representa a su padre, un conductor de tren, como lo suficientemente agradable, pero no muy presente. Lo mismo puede decirse de un muy diferente Richard Branson – Líder de Virgin-, cuya madre dijo a todo el mundo que sabía que Richard se convertiría en primer ministro un día. Fue la madre de Branson quien lo convenció de que podía hacer todo lo que tenia en mente; su padre jugó un papel mucho menor en su vida. El ex presidente Bill Clinton es otro producto de una madre adorable y un papá que falta (que murió antes de que naciera Clinton). De hecho, me parece que hay mucho de verdad en la famosa frase de Freud de que “no hay nada tan propicio para el éxito que ser el favorito de su madre”. Cuando se trata de mujeres, sin embargo, es más difícil de explicar lo que hace que sean exitosas -todavía no hay suficientes mujeres líderes en los negocios para que los investigadores hagan generalizaciones reales-. Pero parece que el modelo de grandes mujeres líderes es más complicado que la de los grandes líderes masculinos. Al igual que con los hombres, algunas mujeres líderes tenían el apoyo de poderosas madres. Pero otras tenían padres poderosos. De hecho, una mujer exitosa a menudo ha sido el hijo favorito de su padre.

¿Diría usted que la cultura juega un papel determinante

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