Psicología Política
Enviado por marduk1989 • 20 de Febrero de 2012 • 4.627 Palabras (19 Páginas) • 1.524 Visitas
Desde el principio de los tiempos el ser humano ha vivido dependiendo y sujeto a las fuerzas naturales, que no habían tenido explicación del porqué de las cosas; lo desconocido provoca temor, miedo e incertidumbre y eso ha generado la búsqueda de explicaciones causales, un ente que ordene el mundo y que le otorgue un sentido a las cosas que nos rodean, en los inicios fue la religión.
Sin embargo, las religiones no habrían perdurado si no existiera un lenguaje narrativo que describiera por medio de símbolos el origen, la historia de los dioses y supuestos básicos de la cultura, características esenciales del mito.
De esta manera el mito también expresa lo que es real en la sociedad, es decir, lo que es valido para las personas y contribuye a legitimar el poder, así como las instituciones de la misma sociedad, pero esto no seria posible de no ser por la colectividad que lo asume como parte de ellos, por que responde a las necesidades morales, económicas e intelectuales de esta.
El mito va adquiriendo la forma de relato en imágenes de Dioses o de héroes nacionales en la historias de las comunidades esto ayuda a crearnos una imagen de la realidad en la que se integran todo una esfera de significados que le otorga sentido a la sociedad dando forma a que los individuos persigan metas e ideales comunes dependiendo de los grupos sociales a los que pertenecen.
Esta es una de las tareas en las que la psicología política entra en juego reconociendo y comprendiendo las necesidades religiosas, sociales que surgen en cada época y como el comportamiento político se ve permeado por la realidad socialmente construida de los implicados es una colectividad como diría Gustave Le Bon “Para poder combatir las fuerzas reales que gobiernan las cosas es necesario conocerlas mejor”.
Si equiparamos la política con la religión se deja entrever que hay una concepción mesiánica en la que los dos actúan en base a promesas y creencias sobre un futuro alterno es decir se apela a la esperanza.
De esta forma la religión y el mito nos ayudan a diagnosticar a la sociedad en tiempo y lugar en el que ocurren los hechos. Si el mito son las cualidades que le atribuimos por encimo nosotros teniéndolos como modelos a seguir entonces hay muchos mitos como por ejemplo en la ciencia, en los medios de comunicación, en la historia, etc. Que nos marcan la manera en como se debe de ser, de actuar, de hacer etc. Por ejemplo en el caso de la ciencia solo hay una forma de aproximarse a la realidad es la del método científico, en psicología social el método positivista ha permeado la manera de investigar siendo este el mito sobre el que se basa la ciencia y una representación que tenemos sobre ella (si a las personas les decimos que algo esta comprobado científicamente no hay cuestionamiento sobre lo que se dice al menos en la mayoría).
De acuerdo con José Mardones (Mardones José Ma. Ed síntesis 2000 pp.42) “El mito representa y expresa el alma o espíritu de la comunidad” si esto es así hoy en día se refleja lo trivial en la sociedad al ver que las masas son mas consumistas. Esto sugiere que hay una gran carga significativa dentro del mito el cual también se vincula con el rito, ya que ambos penetran en la cultura y llegan permear en la acción humana.
Por lo tanto el consumo y el dinero hoy en día es la religión de las masas, los medios de comunicación han buscado legitimar el poder simbólico que hay en carros, casas, joyas, perfumes... originando una nueva esfera de significados, que conjugan valores, actitudes y estilos de vida centrados en la posesión y el consumo, lo que genera una mistificación y adoración sobre la producción económica.
Lo anteriormente expuesto nos lleva al cuestionamiento sobre el proceso en el que el consumo se ha hecho tan importante en la vida de los individuos esto puede comprenderse a partir de la transición en el que la idea sobre el cual se asienta la certidumbre y que permite la convivencia y las relaciones sociales es a partir del dinero, por lo tanto, antes la certidumbre se encontraba en los dioses incluso existían una serie de ritos centrados en lo sagrado con diversos propósitos: ritos de paso, al inicio de una buena cosecha, para dar gracias etc. Sin embargo hoy en dia nosotros tenemos ritos pero alrededor de las compras, del consumo, de hecho hay lugares designados para realizar dichas acciones como los centros comerciales, también hay momentos específicos para comprar como el día de san Valentín, o el de las madres.
No cabe duda que cuando cambia de un modo de producción a otro la manera de pensar de la colectividad cambia, al igual que los dioses y cosas que nos causan certeza también cambian de forma radical, ya que actualmente se tiene la idea de “lo obsoleto de lo anterior y la necesidad de lo nuevo”, el individualismo exacerbado en el que vivimos hoy no es mas que una construcción creado por nosotros mismos y que se ve reflejado en lo sagrado de la economía y el dinero prometiendo la realización personal y social apuntando a la satisfacción y bienestar que trae consigo la felicidad por lo tanto el desarrollo . El neoliberalismo en su instauración en México como antes mencionado ha hecho una sociedad de consumo y formas de pensar de manera mas individualizada.
Por medio de la socialización que utiliza como instrumento el lenguaje vamos aprendiendo la cultura en la que estamos inmersos, normalmente en la educación que nos da la familia, los amigos o la televisión como sucede a menudo, y es en esta socialización donde vamos otorgándole significado a las acciones que hacemos todos los días, desde un simple ritual consumista “ir de shooping” hasta acciones políticas, como orientándonos y dando sentido a instituciones relacionadas con el poder, autoridad, aprendiendo el significado de las leyes o de la constitución o del saludo a la bandera, o fechas conmemorativas como el 15 de septiembre obteniendo aquellas metas en común guiadas por la sociedad, y modelos de comportamientos a seguir y políticas que hacen a una comunidad las mismas formas de pensar.
Es el Estado quien muchas veces crea estas metas en común, pues utiliza diversos recursos a veces míticos para ensalzar logros y hacer que los ciudadanos actúen de forma sumisa y obediente, otras veces para reforzar la identidad de una colectividad, de esta manera mediante ornamentos de etiquetas, teatralización de sus papeles, los diputados, senadores y el presidente se visten de gala para llevar a cabo la liturgia dentro del parlamento, en el que el presidente se sitúa al centro de la ceremonia, con un lenguaje apropiado se exaltan las virtudes que rodean a todo el sistema democrático, dando como consecuencia el reforzamiento del orden social. Así que no hay mucha diferencia
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