Scaramouche por louis

Scaramouche por Louis

Desde que tengo uso de razón he vivido como hijo adoptivo del Marqués de l’Echalonne, en Francia, y he permanecido allí como intelectual encargado de la biblioteca del palacio. Desde entonces, nunca he vuelto a ver a mi hermano gemelo, René, ni a mi verdadero padre, Dégeon.

El Marqués, conocido como gran esgrimista, estaba prometido con la bella, inteligente y revolucionaria Olympia, quien, a mi parecer, no estaba enamorada de él, pues parecía demostrar un gran afecto por mí.

Un día, apareció una compañía de teatro de comedia italiana que iba a representar su comedia ante el Marqués y la hermosa Olympia, pero antes de tal evento, el Marqués me hechó de su palacio con el pretexto que yo le había atacado la noche anterior. El Marqués, para respaldar semejante acusación hacia mi persona, me obligó a quitarme la camisa con tal de demostrar la estocada de esgrima que él había conseguido asestarme tal noche, pero no encontró nada en mi hombro, aunque, por desgracia, eso no le hizo cambiar de parecer.

Ese mismo día, paseando desconcertado por los alrededores del pueblo, vinieron a mí unos desconocidos socorriéndome, como si me encontrara gravemente herido, tal y como afirmaba el Marqués. Entre ellos, se encontraba una sensual mujer llamada Camila que parecía mostrar un gran afecto y preocupación por mí.

En esos momentos vivíamos a finales del s.XVIII y el pueblo francés, que superaba en gran número a la nobleza y al clero, no resistía más el mandato de éstos, ya que se encontraba en tan grave estado que sus vidas pendían de un hilo. Está injusticia produjo una gran difusión de ideas revolucionarias que llegaron al corazón de la dulce Olympia.

Cuando llegó la noche, pude ver con mis ojos como el Marqués y Scaramouche se batían en duelo. En esa extraordinaria batalla el Marqués consiguió vencer, dando muerte a Scaramouche o mejor dicho René, mi hermano, que al verme, me suplicó venganza. Horrorizado por lo que a mis ojos había llegado, decidí terminar con el poder del Marqués convirtiéndome en René y el nuevo Scaramouche. Habiéndome transformado, fui en busca de mi amada Olympia, quien descubrió que sus dos grandes amores, Scaramouche, con sus ideas revolucionarias y Louis, su amor de infancia, eran la misma persona, por lo que estuvo dispuesta a ayudarme con el propósito de no casarse con el Marqués y terminar con él. Para que Camila no sospechase, seguí trabajando en la compañía de teatro, pero finalmente descubrió mi tapadera, pues ella amaba a un hombre burlón y justiciero y yo por un contrario era un hombre de letras que amaba estudiar y que no tenía la habilidad de dominar la esgrima tan bien como su hermano. Aún así nuestra intención de acabar con la aristocracia no cesó, por lo que repartimos montones de escarapelas mostrando así nuestro deseo

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