TEMA 1: LAS ECONOMÍAS PRECAPITALISTAS Y EL TRABAJO.

TEMA 1: LAS ECONOMÍAS PRECAPITALISTAS Y EL TRABAJO

CRONOLOGÍA

La etapa preindustrial abarca desde la Alta Edad Media (siglo V) con la caída del Imperio Romano (476 dc) hasta la Edad Moderna o Antiguo Régimen con el inicio de la Revolución Industrial inglesa, aunque lo que limita el Antiguo Régimen es la Revolución Francesa (1789).

El feudalismo tiene sus orígenes en la decadencia del Impero Romano y predominó en Europa durante la Edad Media. En esta época el tipo de feudalismo era pleno.

A partir del primer milenio renacen las ciudades y el comercio donde hay una fase de crecimiento. Al aparecer la peste negra (1348), se inicia la fase de crisis.

Con la Gran expansión ultramarina (1492 ss), descubrimiento de América, comienza el feudalismo tardío, considerado como capitalismo mercantil e inicio de la edad Moderna que abarca hasta el s. XVIII.

1. CONTEXTO HISTÓRICO, ECONÓMICO E INSTITUCIONAL. EL TRABAJO VINCULADO

FEUDALISMO

Sistema de organización de las ciudades europeas desde el siglo XI  hasta la Revolución Industrial. Era una formación social y económica, que predominaba la economía agraria y estaba sujeta personalmente a los propietarios o a la tierra que trabajaban.

Las extensiones de tierra eran mucho más pequeñas con respecto al esclavismo. Estas pequeñas partes de tierra eran ofrecidas por el señor feudal (propietario de la tierra) a los campesinos libres para mantener a su familia.

Podemos distinguir 2 relaciones de señores feudales:

-Las relaciones feudo-vasalláticas: estaban formadas por los hombres libres (vasallos del señor feudal), que a partir de una ceremonia establecían ayudas mutuas militares.

-Las relaciones señoriales: estaban formadas por los campesinos y los señores. Había una triple vertiente:

1)El señor feudal era dueño de los frutos de la tierra.

2)Tenía poder sobre los hombres adscritos a esa tierra.

3)Impartía justicia entre los hombres libres y los campesinos.

ECONOMÍA FEUDAL

En la economía feudal  entre el 80% y el 90% de la población se dedicaba a la explotación de las tierras.

Las explotaciones se organizaban en el señorío territorial, que era el conjunto de tierras en manos de un señor (noble o eclesiástico). A su vez se dividía en reserva señorial, que eran las tierras más productivas reservadas para el señor, que a su vez servía de residencia en el castillo.

Dentro de la reserva señorial estaba el molino, el horno, el lagar, la forja, el establo,… era el monopolio del señor donde los campesinos tenían que pagar para utilizar los establecimientos.

 Los mansos eran el resto de las tierras, parcelas fragmentadas que las cultivaban los campesinos que aunque fueran pequeñas tenían suficientes productos para mantener a sus familias.

Al lado de los mansos estaba la aldea, donde vivían los campesinos.

En el señorío territorial también estaban las tierras comunales, eran tierras de bosque y pasto para el ganado que pertenecían a todo el feudo.

LOS DERECHOS SEÑORIALES

Los señores en virtud de su dominio sobre la tierra recibían un conjunto de prestaciones y rentas.

A través de prestaciones personales (el trabajo del campesino en las tierras del señor, lavar el ganado,...), prestaciones en especie (a la muerte del campesino tener que darle el mejor animal) y exacciones monetarias (la renta por parte el campesino al señor por la cesión de un manso).

Los derechos jurisdiccionales a través de atribuciones, el señor podía tener poder jurisdiccional más allá del señorío territorial.

A través de las regalías, el señor tenía una serie de funciones como militares, de justicia, fiscales y de gobierno.

En cuanto a los derechos de paso el señor cobraba a los campesinos por pasar por puentes, puertas, por la circulación de mercaderías, etc.

El campesino cada cierto tiempo tenía que dar un diezmo, la décima parte, bien de lo recolectado o bien económicamente al señor o al clero. A parte podía cobrarle tributos extraordinarios.

¿CÓMO SE PRODUCÍA?

En la vida rural la unidad básica que trabajaba en el campo era la familia campesina, que no sólo trabajaba la tierra, sino también producía las herramientas y los textiles.

En el núcleo familiar no existía división del trabajo, sino que todas las personas desempeñaban las mismas funciones.

En las familias preindustriales era frecuente que los niños y los jóvenes de las clases mecánicas tuviesen que trabajar desde el momento en que eran aptos para alguna labor. Lo que permitía aumentar los ingresos familiares o, cuando menos, reducir los gastos, ya que la actividad suponía la residencia en casa del amo.

El trabajo de la mujer en la ciudad preindustrial quedaba siempre relegado a cierta marginalidad, aun cuando era un trabajo necesario para la subsistencia familiar.

 LA EXPLOTACIÓN AGRARIA

La explotación agraria en la Edad Media tenía bajos rendimientos de la agricultura, fuentes de energía escasas (carbón, leña,…), desarrollo nulo de la tecnología e inexistencia de abonos artificiales o pesticidas por eso se dejaba una parte del manso en barbecho para que descansara la tierra durante un tiempo determinado .La agricultura era de subsistencia, es decir, tenía bajo rendimiento y baja productividad.

La explotación de la tierra se dividía en 2 territorios:

-Los campos abiertos (Open fields), en esas tierras se cultivaban sobre todo cereales y se practicaba el barbecho.

-Las tierras comunales, dedicadas a bosques o pastos. De ellas se beneficiaban los campesinos.

LA CRISIS DE SUBSISTENCIA

Las crisis se generaban en las zonas rurales por las malas cosechas, ya sea por falta de lluvia, por plagas, abundantes lluvias, la trampa malthusiana, epidemias, etc. Esto provocaba el aumento de precios de los cereales (trigo). A causa de la crisis, la población pasaba hambre. Todo esto repercute en la reducción de la venta de productos artesanales al tener las personas menos cantidad de dinero para consumir y en el ámbito urbano esta crisis genera paro.

Todo esto unido hace que los ingresos de la población disminuyan. A causa de esta disminución existen varias consecuencias como la Revuelta del Pan, en la que la multitud de la población pretendía el abastecimiento suficiente de alimentos básicos (fundamentalmente del pan) a un precio asequible, y la disminución de los ingresos reales (déficit presupuestario) esto se debe a que los campesinos no les podían dar los suficientes tributos al señor feudal.

A partir del siglo XVI se produjeron duras crisis de subsistencia y la mortalidad se elevó hasta alcanzar el primer tercio del siglo XVII.

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