Un Ambiente Favorable Para Una Enseñanza

Un Ambiente Favorable Para Una Enseñanza

En los últimos años la educación impartida por los docentes a los alumnos de la escuela secundaria ha sido criticada por toda la sociedad, algunas de la veces los padres de familia y alumnos culpan a los maestros porque no hacen su trabajo bien, es decir, no tienen dominio de contenidos, faltan a clases, durante las clases no trabajan y aprovechan el tiempo para realizar otro tipo de actividades que no tienen nada que ver con las actividades educativas pero también los maestros culpan a los alumnos de los resultados obtenidos durante el ciclo escolar justificándose y diciendo que los alumnos no ponen de su parte, es decir durante la clase se la pasan jugando, se distraen, faltan a clases, no trabajan durante las clases y entre otras opiniones de ellos. Al ser evaluados los maestros por la sociedad se preguntan entre ellos mismos ¿cuál es la característica de una enseñanza que favorezca la entrega y la atención de los alumnos para alcanzar su objetivo principal, el cual es que los alumnos adquieran conocimientos significativos? Las soluciones a ésta problemática pueden ser varias y lo ideal sería que los docentes al impartir sus clases vean si en realidad lo hacen de una manera adecuada y de no ser así buscar en cuanto antes la solución para alcanzar su objetivo.

Los primeros cuestionamientos que un docente se debe hacer para solucionar la principal problemática acerca de las características de una enseñanza que favorezca la entrega y la atención de los alumnos seria si ¿las intervenciones de los maestros permiten causar la curiosidad de los alumnos?, ¿de qué manera las relaciones entre el maestro y los alumnos durante la clase favorecen que el alumno mantenga la atención en ella?, ¿de qué forma conviene relacionarse con los alumnos?, para algunos investigadores de la educación como Alonso Tapia (1999) sugiere y dice que es importante que para que los alumnos puedan aprender y obtener conocimientos nuevos lo primero que deben de hacer los docentes es despertar la curiosidad del alumno. Otro investigador Saint-Onge, Michel (1997) propone que es necesario que los alumnos perciban aceptables los objetivos del aprendizaje, y que para la gente joven, lo que les llama la atención son las problemáticas que puedan despertar su curiosidad. Es evidente que la enseñanza descansa en una tradición, ya que nuestro modo de abordar el conocimiento corre peligro de caer en la rutina más común de los maestros que es la del método tradicionalista y para que esto no ocurra es necesario que el maestro busque diferentes estrategias que con las cuales logren despertar la curiosidad de los alumnos y llevarlos al conocimiento.

La otra solución a la problemática es la de la relación con el grupo de aprendizaje y con los maestros y de igual manera el investigador Saint-Onge, Michel (1997) sugiere que la dedicación al estudio se refuerza con la integración en un grupo que tiene como función el aprender y también que el alumno debe considerar su esfuerzo útil al grupo, que perciba que tiene un papel que desempeñar y que el crecimiento de sus capacidades y las de sus compañeros contribuye al desarrollo de un proyecto grupal. Para que esa relación sea posible, es evidente que los comentarios del profesor sobre los rendimientos nunca deben afectar a las aptitudes del alumno. A través del esfuerzo es por donde hay que estimularlo y subrayarle la importancia que su dedicación puede tener para realizar

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