INFOGRAFIA REGIMENES TRIBUTARIOS
Enviado por Carol Iparraguirre Grijalba • 28 de Mayo de 2021 • Trabajo • 1.960 Palabras (8 Páginas) • 125 Visitas
CAPÍTULO 1: PERÚ ESFUERZO DE TODOS
La primera ponencia tiene como objetivo, resaltar la importancia que tiene la cultura tributaria en nuestro país, y para poder entender dicho objetivo, es imperativo saber en que se basa la recaudación de tributos y para ello es importante conocer el contrato social.
El contrato social es un contrato tácito entre los ciudadanos y el Estado, por este acuerdo los ciudadanos ceden parte de su libertad, dándole un poder al Estado para que este les garantice los principales derechos, y el ciudadano a su vez tiene que cumplir ciertas obligaciones como cumplir las leyes y normas, respetar las instituciones públicas y pagar los tributos.
Los tributos están en la base del contrato social para que el Estado pueda cumplir con la parte que le corresponda. Si esto se cumple por ambas partes, se va a dar un círculo virtuoso; el cual consiste en la conciencia tributaria de los ciudadanos para que voluntariamente cumplan con sus obligaciones tributarias y de esta manera, el Estado obtenga los recursos necesarios para generar bienes y servicios públicos garantizando los derechos de los ciudadanos. Si el Estado hace un buen uso de estos recursos, la población verá que vale la pena cumplir con las obligaciones tributarias y se generará un círculo virtuoso.
El Estado, para poder generar valor público, necesita construir el presupuesto público, y para ello, primero se identifica cuáles son las necesidades del país (programas sociales, salud, seguridad, educación, justicia, etc.); se elabora el presupuesto para cubrir estas necesidades y finalmente, se coteja con los ingresos fiscales, teniendo como finalidad el bienestar de los ciudadanos. Para esto, los ingresos deben estar equilibrados con los gastos, y de allí viene la importancia de los impuestos.
En el Perú, para el año 2020 se tenía un presupuesto de S/177,366 millones de soles, siendo la principal fuente del financiamiento del presupuesto público, los tributos; los cuales representan el 75% de los ingresos. Esto permite cubrir las inversiones, los gastos operativos, servicios, pago de remuneraciones, pago de deuda y cumplimiento de convenios. Entonces, la importancia que tienen los impuestos es que permiten financiar los gastos públicos para garantizar los bienes y servicios de los ciudadanos.
En nuestro país los principales contribuyentes (PRICOS) representan el 76% de la recaudación, aunque solo son el 0.2%; y los medianos y pequeños contribuyentes (MEPECOS) aportan el 24% de la recaudación, a pesar de ser la mayoría de aportantes. Para que los MEPECOS aporten más, debe aumentar la presión tributaria, para que los gastos públicos se financien con recursos propios. Dentro de América Latina nuestra presión tributaria es de las más bajas con un 14.2 %, mientras que en países como Uruguay y Brasil llegan al 32%.
El Perú es el país que, hasta el mes de mayo, destinó el mayor porcentaje de su PBI (9%), para contener los efectos del COVID 19, expresado en dólares se llegó al monto de 20,000 millones y se pudo cubrir con el ahorro del Fondo de estabilización fiscal. Esto ha permitido poder mejorar la infraestructura de los hospitales, comprar insumos médicos, pruebas rápidas y moleculares y colocar mayor seguridad en las calles.
En nuestro país, tenemos un gran problema y es que las personas no asocian el pago de impuestos a bienes y servicios públicos, y este es uno de los motivos por los que se presenta la evasión tributaria, por la gran informalidad del país y porque el pago de impuestos está muy vinculado con la corrupción. Esta situación es un problema cultural que nos corresponde a todos poder corregir, ya que nuestros impuestos también van a programas sociales y, por ende, a las poblaciones más vulnerables como por ejemplo el programa Juntos, Pensión 65, Qaliwarma, etc.
En el Perú por contrabando cada año se pierde S/17,500 millones de soles y por evasión tributaria se pierde S/58,000 millones de soles (36%IGV y 57% en renta), si se suman ambas, el Perú anualmente pierde de recaudación para el presupuesto público, S/75,500 millones de soles; esto es aproximadamente lo que hasta mayo se gastó para amortiguar los efectos del Covid 19, de no existir evasión ni contrabando se habría contado con los recursos suficientes para enfrentar la etapa de contención del Covid 19 sin necesidad del endeudamiento.
Los ciudadanos de a pie, pueden ayudar a la recaudación tributaria, simplemente al pedir su boleta de compra, porque al no pedir el comprobante de pago ese monto no se declara, disminuye la recaudación en renta y en IGV, además, así se evita la informalidad y la evasión tributaria.
Por otro lado, se tiene el costo de la corrupción, un problema que acecha al Perú y a sus funcionarios públicos, en términos monetarios el costo de la corrupción asciende a S/12,600 millones de soles anuales. Por eso, los ciudadanos deben de tener una participación activa para combatir estos temas que dañan al país, para no contribuir a que el círculo virtuoso se convierta en un círculo vicioso (evasión, corrupción, obras públicas deficientes, mal uso de los recursos, falta de conciencia tributaria).
CAPÍTULO 2: PANDEMIA - CRISIS U OPORTUNIDAD
La pandemia en el Perú inició como una crisis sanitaria; sin embargo, al paso del tiempo con la cuarentena, la inmovilización, etc., se generó una crisis económica. En los últimos 6 meses la economía se ha frenado, y en algunos sectores como el turismo se ha dado un retroceso. Según las proyecciones del CEPAL, el Perú al final del año tendrá una caída del PBI del 13%, siendo el segundo país más afectado en América Latina después de Venezuela; por otro lado, países como Uruguay y Paraguay solo han tenido una caída del 4%.
La coyuntura de alerta sanitaria actual nos reta a pensar de manera distinta e innovadora, más allá de las paredes de un local o una empresa y ante esta situación SUNAT no ha sido la excepción, sino que por el contrario ha tenido que echar mano de diversos recursos para poder financiar al Estado, garantizando el presupuesto del próximo año y la operatividad del mismo. Para ello, bajo esta coyuntura, se han tenido que aplicar una serie de medidas para ayudar a los contribuyentes a seguir cumpliendo con sus obligaciones tributarias y no romper la cadena de pagos, además de verse inmersos en un crecimiento exponencial de sus servicios virtuales.
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