Sistema electoral chileno
Enviado por Pablo Muñoz • 13 de Noviembre de 2019 • Informe • 4.714 Palabras (19 Páginas) • 99 Visitas
INTRODUCCIÓN
En todo sistema democrático es importante que esta sea estable en el tiempo y que a la vez sea lo más representativa de todas las sensibilidades y realidades ideológicas existentes en un sistema político. Un instrumento que se utiliza para que ambos tópicos que dan estabilidad al sistema político (estabilidad y representación) se den lo más armonioso posible, es el sistema electoral. Dicho instrumento permite que ambos tópicos puedan darse. La cuestión esta en que no existe sistema electoral alguno que pueda otorgar al sistema político ambas virtudes de por sí. De allí, la astucia de los ingenieros electorales para hacer que estos elementos se den lo mas armonioso posible.
Los sistemas electorales de por sí, tienen a irse a uno de los tópicos, el sistema proporcional otorga una mayor representación, pero a la vez genera fragmentación partidaria en el sistema político, lo que muchas veces atenta contra la estabilidad del sistema democrático en sí. Por otra parte, los sistemas mayoritarios, si bien de por sí, se les reconoce como aquel sistema que otorga mayor estabilidad, a la vez, no permite que los partidos menores tengan una representación en escaños. De allí el dilema, ante la imposibilidad de congeniar ambos tópicos, los países en sus respectivos momentos históricos, señalen que es lo que más les importa o el fin que quieren lograr al adoptar un sistema electoral: representación o estabilidad.
Nuestro trabajo se abocará a describir los sistemas de partidos y electorales (dando un enfoque mas amplio al segundo) imperantes en Chile desde 1969 hasta la fecha, dando un mayor énfasis en el sistema electoral imperante en Chile desde 1989 hasta la fecha. En tiempos en que el sistema electoral actual ya no resiste más tiempo en la forma que esta realizado, es bueno reflexionar en torno a este tema. Al respecto tenemos dos hipótesis:
- Tanto el sistema binominal como el sistema proporcional no han sido lo suficientemente representativos en los partidos políticos
- El sistema binominal además de no ser representativo, no ha cumplido un fin que se propusieron en la dictadura, el que tenía relación con modificar el sistema de partidos, reduciendo el número de partidos en el congreso.
Nuestro trabajo se divide en 5 partes, en la primera se plantea el tema de la representación, en la segunda parte se describe el sistema proporcional, en la tercera parte se plantea el sistema electoral desde 1969 hasta 1973, en la cuarta parte se relata el origen del sistema binominal y en la quinta se describe el sistema electoral y el sistema de partidos en chile imperante desde 1989 hasta hoy, por ultimo se señala una conclusión al tema.
I) Representación.
La Democracia tal como la conocemos es indirecta, es decir, el pueblo mismo no gobierna, sino que lo hace a través de sus representantes. En las democracias modernas los ciudadanos están representados a través de los partidos políticos.
En la actualidad, se habla una creciente crisis de representatividad de la dirigencia política, ya que los representantes lo son más de los partidos políticos que de los electores. La preeminencia del partido político es una consecuencia del cambio social de los últimos años. Las modernas sociedades han crecido marcadamente en población, y el partido político cumple con el rol de canal de demandas de la sociedad y de procesamiento de las mismas. Sin embargo, las opiniones del representante solo a él le pertenecen y las mismas tienen preeminencia cuando debe tomar una decisión.
1.- El Problema de la representación:
Un gobierno es representativo cuando refleja la voluntad del cuerpo de electores. Pero no todas las autoridades son elegidas por elecciones populares, por lo tanto, ninguna democracia seria realmente representativa. Además, los parlamentarios y el presidente no son jurídicamente responsables ante la sociedad que los puso en los cargos que ocupan. No se hallan ligados a los electores, estos no los pueden remover de sus cargos.
El mandato representativo significa que los representantes se encuentran libres de toda influencia siendo independientes del cuerpo electoral, pudiendo hablar libremente. La representación no seria jurídica, sino política. Ya que el representante tiene responsabilidad política pensando en una eventual reelección.
2.- Los sistemas electorales
Los sistemas electorales son instrumentos imprescindibles para lograr la representación política, el pilar básico de la democracia representativa. Y como ha dicho Nohlen “regulan el proceso electoral mediante el establecimiento de la distribución de las circunscripciones, de la forma de la candidatura, de los procesos de votación y de los métodos de conversión de votos en escaños”[1].
2.1.- Breve clasificación de los sistemas electorales
Básicamente, se han distinguido tres tipos de sistema electoral: el sistema electoral mayoritario, en el que la representación la logra quien alcance la mayoría relativa o absoluta de los votos, bajo el principio de la mayoría. Los sistemas proporcionales, en tanto, tienen como objetivo o principio de representación, mostrar o reflejar con la mayor exactitud las fuerzas políticas existentes en la sociedad. De modo que cada partido debe lograr una cantidad de escaños proporcional a la votación que le otorgó la población. En tercer lugar se han distinguido los sistemas electorales peculiares[2], entre los cuales figura en sistema binominal, el que genera discusión en nuestro país.
II) Sistema Electoral de Representación Proporcional
Es un sistema electoral que trata de asegurar que la proporción del apoyo que reciben diferentes grupos este precisamente reflejada en los resultados de las elecciones. El nombre “representación proporcional” se usa para describir este efecto[3]. Este sistema tiene tres variaciones populares
1.- Representación Proporcional Por Listas
En su forma más simple, el RP por lista requiere que cada partido presente una lista de candidatos al electorado, que los electores voten por un partido y que los partidos reciban sus escaños en proporción a su porcentaje de votación nacional. Los candidatos ganadores son tomados de las listas en el orden en que se ubican. Muchas veces se requiere un mínimo de de votos para obtener representación. Típicamente el umbral que se usa es de 3-5% de votos[4].
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