The pillow book. (1996). [DVD] Reino Unido: Peter Greenaway.

Este trabajo está basado en la película “El libro de cabecera” (The Pillow Book, 1996) Del director Peter Greenaway, la cual haré una reflexión sobre esta película, así como mí punto de vista acerca del tatuaje y para finalizar se hará un análisis acerca de vídeos que se abordan en el trabajo de Expresiones culturales del cuerpo: un espacio para el arte por Francisco Lermo.

Acerca de la película de Peter Greenaway, me ha dejado un poco atónita, tiene un acomodo un tanto complejo, por la narrativa, la fotografía (los cambios de colores) y la música, sin más detalles he de contar que la película es la explicación clara de cómo nuestro cuerpo también puede usarse como una hoja en blanco, al mismo tiempo son suaves y delgadas; este film muestra que el texto no solo se queda en eso sino en una imagen, no sólo es un texto en el libro o en su cuerpo, las imágenes en su cuerpo cobran otro sentido.

Dentro de la película el padre de nuestra protagonista fallece, este padre, el cual era calígrafo pintaba a nuestra protagonista cada año (En su cumpleaños para ser más preciso), era marcada, así para ella esta caligrafía en el cuerpo tiene un significado de forma personal en su vida, así ese “ritual” que hacia su padre con nuestra protagonista trasciende, para ella no se trataban garabatos en su cuerpo sino plasmar palabras además la caligrafía se podía entender como una caricia (la cual siento no tiene fines sexuales, sino meramente ligados al cariño). Es uno de mis puntos destacables por el cual he hablado acerca de la película.  Otro punto sería la acción artística que destaca, desde un punto de vista occidental al menos, tiene que ver con la caligrafía o pintura; las frases sobre el cuerpo como un libro, pueden ser interesantes y consideras hasta “poéticas”, pero al paradigma no oriental lo impacta más este lienzo distinto, el cual es poco común, porque es un cuerpo humano vivo cubierto por pintura. Y podría verse como una acción un tanto extraña o quizás muy “exótica”.

También ocurre con el tatuaje el cual hoy en día  sigue siendo mal visto es decir, si vemos a una persona con tatuaje y que no sea estético (es decir que sea visualmente agradable, o que a veces este se pueda comprender con facilidad) podemos pensar que estos individuos son del “el bajo mundo, la pobreza, la carencia, la exclusión, la violencia social y familiar, el social de drogas”

(Nateras, Alfredo: 72) son marginados y estereotipados habitualmente con alguna de estas etiquetas negativas.

Sin embargo pienso que el intervenir tu cuerpo o darle un uso para algún tipo de expresión artístico o político, va más allá de ser un pobre o un “revoltoso sin pudor”  yo veo como la sociedad aún cuestiona la decisión a estos sujetos que satisfacen decir algo con su cuerpo como es el caso de las mujeres convictas,  este caso es muy interesante y vale la pena saber acerca del tema.

“Los tatuajes femeninos no son accidentales, particularmente entre mujeres encarceladas. Alguno de estos dibujos poseen diferentes usos: son marcas para exorcizar el dolor, peticiones para recibir una justicia ausente y ritos que buscan efectos mágicos, como poner fin a su caos emocional o reunificar a su familia”. (Cruz, Antimio. 2014)

Podría decir que el tatuaje dentro de los centros penitenciaros forma parte de una visión diferente de la vida, es una huella histórica personal,  no busca ser algo bonito (estético), agradable a la vista de terceras personas, sino buscar expresar y sacar las emociones por medio de la imagen algo de que apropiarse así como también funciona como un medio de construcción de identidad, o así como obtener algo “que perdieron o acerca de su  alejamiento con sus  seres queridos y llevarlo siempre, “las mujeres internas dicen que su cuerpo es el único lugar donde pueden integrar su pedecería familiar”. (Cruz, Antimio. 2014)  Emplear el cuerpo como un medio: entender que el cuerpo y la piel pueden servir como espacio sensible, el cuerpo que se recupera en lo físico y que este se reconstituye implica un otro modo de entender la vida es decir puede sanar algunas veces por fuera pero por dentro aún queda marcado (el dolor, la pena, soledad) a veces aún como una herida que sigue siendo profunda y dura como las agujas con las que se tatúan.

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