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Herbert Spencer


Enviado por   •  4 de Octubre de 2012  •  2.697 Palabras (11 Páginas)  •  1.218 Visitas

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Pensamiento Sociológico de Herbert Spencer

Capítulo I:

Introducción.

La sociología nace como ciencia en un momento crítico de la humanidad, en una época de rápidos y bruscos cambios sociales heredados a consecuencia de la Revolución Industrial a mediados del siglo XIX. Esta revolución, en opinión de muchos autores, representó el cambio social más importante desde el paso de una sociedad cazadora, recolectora, nómada a una sociedad agrícola, sedentaria.

Estos grandes cambios sociales motivaron una mayor preocupación sobre las características de la sociedad, sobre la estructura social y sobre cómo se pasa de una estructura social a otra diferente por medio de los cambios sociales. A esta preocupación por la sociedad se le unió el hecho de la popularización, entre los pensadores, del método científico. De la fusión de ambos fenómenos surgió la sociología como ciencia independiente.

Muchos han sido los hombres que han dejado sus ideas o pensamientos plasmados en diferentes escritos, libros, enciclopedias, o manuscritos a lo largo de la historia de la humanidad, mismos que hoy día siguen siendo objeto de estudio, discusión o polémica, pero que de alguna u otra forma han contribuido en la formación de la sociedad actual.

Uno de esos grandes hombres fue sin duda Herbert Spencer, del cual se explicará dentro de este ensayo su pensamiento sociológico y el por qué es importante el mismo dentro del campo de la sociología.

Capítulo II:

Desarrollo de las ideas

Herbert Spencer nació en Derby, Inglaterra, el 27 de abril de 1820, en el apogeo de la industrialización británica. Fue muy enfermizo desde niño, condición que mantuvo durante toda su vida, aunque más tarde comenzaría a sufrir ataques de nervios de los que nunca se recuperó, además de sufrir de insomnio crónico, se comenta que para atacar sus males consumía cantidades considerables de opio. Experimentó una extraña sensación en la cabeza que él llamó "el mal", y era conocido por excentricidades como el uso de tapones para los oídos para evitar el exceso de entusiasmo, sobre todo cuando no podía mantenerse firme en una discusión. Fue educado por un tío, principalmente, en ciencias naturales y matemáticas. No recibió enseñanza universitaria alguna y sólo tuvo como título, de hecho y no de derecho, el de ingeniero civil.

De 1837 a 1846 fue empleado en una compañía de ferrocarriles y durante este período, con 22 años de edad, publicó su primera serie de estudios, titulada "The proper sphere of government". A partir de 1846 se dedicó al periodismo y a escribir sus reflexiones filosóficas. Un par de años después fue incorporado como secretario a la redacción de la revista "The Economist", donde permaneció cinco años y del cual asumió la dirección de mismo en 1848. A esta revista se le consideraba un órgano del liberalismo radical de la época, gracias al cual pudo interactuar con muchos de los intelectuales de la época, lo cual sería parte determinante dentro de su formación. En la posición extremista de la revista se reflejaba claramente sus ataques contra una legislación basada en la ignorancia de las leyes de la naturaleza, y que no podía tener ninguna consecuencia beneficiosa; El que la sociedad debía organizarse de conformidad con las leyes de la naturaleza, y que el mejor gobierno era el que menos intervenía en la vida de los individuos, eran convicciones que Spencer defendió constantemente en sus escritos posteriores.

Su objetivo consistía en descubrir, dentro del marco evolutivo, las leyes científicas naturales de conformidad con las cuales los individuos debían regular sus vidas, sin intervención del Estado. Estas opiniones se recogen en su primer libro, Social Statics, que publicó en 1850, cuando sólo tenía 30 años de edad. El contenido del libro estaba claramente en consonancia con las opiniones expuestas en The Economist, antes de que abandonara esta publicación en 1853.

En el Social Statics Spencer enuncia la doctrina de la libertad igual, según la cual el límite de la libertad de cada persona coincide con el comienzo de las libertades de las demás. A los 79 años de edad revisó toda su obra y se reafirmó en esta opinión. Su capítulo sobre la educación en Social Statics, dio lugar de forma inmediata a controversias ya que a algunos críticos les indignó en particular la idea de que el Estado no debía intervenir en la educación. A medida que se fueron desarrollando los sistemas nacionales en el siglo XIX, esta opinión fue ignorada o se consideró excéntrica, salvo quizás en los Estados Unidos donde había un movimiento de resistencia a la intervención del Gobierno Federal en la educación. Hoy día se reconocen más claramente los peligros del control estatal de la educación.

En 1853 deja de trabajar en The Economist para dedicarse a escribir, tal y como había querido siempre. En aquella época su educación autodidacta estaba completada. En comparación con sus contemporáneos, Spencer carecía de muchos de los elementos de la educación formal que son necesarios para hacerse filósofo o científico. Los filósofos no le consideraban verdaderamente uno de los suyos, y los científicos tampoco veían en él a un científico profesional. En cambio, sus propias observaciones, el ambiente intelectual que conoció con su padre y con su tío, y su trabajo de ingeniero en la industria y de periodista en una publicación radical, supusieron una admirable preparación para dedicarse a la escritura.

El contexto socioeconómico y político

Para comprender mejor las aportaciones que Spencer hace a la sociología, es necesario conocer el ambiente económico, político y social que se vivía justo en esa época. El siglo XIX británico fue un período en el cual la aplicación de la ciencia a la industria, adquirió un gran auge e impulso. Muchos fueron los hombres que contribuyeron al crecimiento de la industria y de su infraestructura; la sociedad rural se transformó en una sociedad urbana. La abundancia de carbón facilitó el desarrollo de la industria siderúrgica; las máquinas de vapor revolucionaron la producción de textiles de lana y de algodón.

En 1835 Inglaterra producía más del 60% de los artículos de algodón consumidos en el mundo.

La red de canales se amplió para enlazar los distritos industriales del norte de Inglaterra con los centros de distribución y los puertos. A todo ello vino a añadirse la expansión de la red de ferrocarriles, que había comenzado a funcionar en 1825.

Este proceso de desarrollo

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