EL ENFERMERO COMO COMUNICADOR/A

TRABAJO PRACTICO N°2 COMUNICACIÓN TEMA: EL ENFERMERO COMO COMUNICADOR/A

Trabajo Practico  Nº 2

Datos del instituto: Instituto Superior de Formación Técnica FECLIBA Distrito V 

Datos del alumno/a: Manrique Oscar Hernán 

Datos del docente:   Prof. Lic. Borrego Mariana

Materia: COMUNICACIÓN

Fecha de entrega: 07/04/22

Tema: El enfermero como comunicador/a.

Cuestionario

1 ¿Por qué es importante que el profesional de enfermería logre disminuir la ansiedad del paciente y aumentar su confianza?

2 Identifique que componentes y característica tiene la relación enfermero-paciente en cada uno de ellos puede hacer un cuadro comparativo

3 ¿Cómo se genera una comunicación exitosa con el paciente?

4 Enumere las características que debe reunir un buen profesional de enfermería para convertirse en buen comunicador

5 Describa que estrategias utilizara usted para el paciente y sus familiares recuerden los mensajes de salud

6 A partir de lo aprendido

A ¿Cuál o cuáles son los tipos de comunicación que utilizaría con más frecuencia en sus tareas de enfermería? Detalle

B ¿Qué conflictos pueden presentarse durante su actividad laboral que le impidan llevar a cabo los procesos de comunicación?

7 Si se le diera información vital del paciente y a su vez esa información tiene que ver con algún individuo cercano a usted:

A ¿Violaría el secreto profesional?

B ¿Cuáles son las implicancias?

8 ¿Qué importancia tiene el lenguaje corporal y nuestra apariencia cuando trabajamos con pacientes?

9 ¿Cuáles son las barreras más comunes en enfermería?

A en relación a sus compañeros de trabajo

B en relación al paciente y sus familiares

1 La relación enfermero-persona enferma o sana es una especie de vínculo que se establece entre dos o más seres humanos, que han determinado su mutuo acuerdo, e interdependencia: el profesional de salud, proveedor de cuidados, administrador de tratamientos, compañero y confidente que intentará proporcionar confort, tranquilidad, comprensión, escuchará atentamente las vicisitudes, inquietudes y emociones del enfermo y de sus familiares sobre el problema de salud y de aquellas problemáticas que están alrededor de ella, intentará ponerse en su lugar para comprenderlo y atenderlo mucho mejor, convocando cuando considere necesaria la participación de otros profesionales; y por otro lado, el enfermo o persona sana, aquel que intenta colocar su problema de salud y su humanidad bajo el cuidado del profesional de la salud, en busca de mejores soluciones y alivio de su malestar, que espera ser escuchado, comprendido u orientado.

Es aquí donde la ética en enfermería se plantea el desenvolvimiento de los cuidados cotidianos al paciente, no los grandes dilemas; cuestiones tan aparentemente banales como llamar a un paciente por su nombre, tratarle de usted o llamar a su puerta antes de entrar en la habitación, y no son estas normas de cortesía, sino el mínimo y necesario respeto por aquel que ha acudido solicitando nuestra ayuda profesional, sin que por ello pierda su identidad o su derecho a la intimidad.

Se considera que el encuentro entre el profesional de salud y el paciente implica una interacción comunicativa, que requiere para lograr un clima favorable, aceptación, respeto, empatía y confianza entre otras cualidades.

El profesional debe estar atento tanto a la información verbal como no verbal, o sea los gestos, mímicas y silencios. La manera en que se comunica el enfermero con el paciente es fundamental en el proceso de salud-enfermedad, estos deben saber escuchar mucho más que hablar. A los pacientes se le debe brindar una adecuada atención, deben sentirse escuchados, sin apuros, dando importancia a sus requerimientos y demandas.

El profesional de salud influye mucho más positivamente en la psiquis del enfermo cuanto más respeto inspire por su calidad ética y humana. La comunicación con el paciente no solo adquiere un valor social, sino también un valor terapéutico. En este planteamiento se considera a la comunicación como la primera y principal medicina del paciente; además de ser la más efectiva en la modulación de conductas en el proceso salud-enfermedad.

El enfermero como profesional, en lo general es ubicado por el paciente en una posición de superioridad, por lo que este debe con su actuación equilibrar dicha situación.

Comunicar es una actitud, una capacidad, pero es sobre todo una aptitud.

“Todos podemos comunicarnos con los demás, pero no siempre sabemos hacerlo”. De ahí la importancia de promover habilidades en el aspecto comunicativo de las relaciones interpersonales.

El profesional de enfermería cuidará su apariencia personal, así como la forma de dirigirse al enfermo, con sencillez y corrección, lo que le dará confianza y seguridad.

Debe ser muy cuidadoso en los comentarios y conversaciones que se hagan delante del paciente, en los pasillos, en los ascensores o fuera del centro de salud, porque la persona a nuestro lado puede ser un familiar o conocido del paciente y puede tener la impresión de que el enfermero habla en lugares públicos, de modo frívolo y sin la menor discreción.

Todo buen profesional debe ser, a su modo, humanista y si alguno debe serlo en grado sumo es el enfermero/a, quien está al lado del paciente en muchas circunstancias y mucho más tiempo que el propio médico.

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3 La comunicación posibilita a la enfermera delimitar las metas de intervención y cumplir los objetivos de la enfermería como la oferta de ayuda. Y para ello, la enfermera debe dar énfasis a la habilidad de comunicarse y mantener una comunicación significativa.

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