EL TIEMPO DE REACCION O TIEMPO DE RESPUESTA VOLUNTARIA.

PRACTICA NÚMERO 1.

EL TIEMPO DE REACCION O TIEMPO DE RESPUESTA VOLUNTARIA.

El concepto tiempo de reacción en Fisiología del Ejercicio, hace referencia a la cantidad de tiempo que transcurre entre la presentación o aplicación de un estimulo, y la manifestación de una respuesta VOLUNTARIA especifica.

Con frecuencia la expresión TIEMPO DE REACCION, es erróneamente reemplazada por la de VELOCIDAD DE REACCION. La velocidad, es un término resultante de la relación de dos dimensiones fundamentales de la materia, que son la longitud y el tiempo, lo cual conduce a que se exprese en unidades propias de la velocidad como metros/segundo, centímetros/hora, kilómetros/hora,...etc.; mientras el tiempo de reacción se expresa exclusivamente en unidades de tiempo.

También suele reemplazarse el TIEMPO DE REACCION por el concepto TIEMPO DE LATENCIA, que se ha empleado en fisiología para referirse al tiempo transcurrido entre la aplicación de un estimulo y la manifestación de una respuesta refleja (las respuestas reflejas son involuntarias).

Con la expresión respuesta voluntaria especifica, se pretende determinar que ésta sea lo más delimitada que se pueda a un músculo en especial.

IMPORTANCIA:

El TIEMPO DE REACCION es un factor que se supone tiene importancia definitiva en la obtención de buenos resultados en competencias que requieren respuestas motoras de rápida ejecución.

Las marcas en las diferentes modalidades deportivas son cada vez mejores, pero el grado de aproximación entre los participantes es cada vez más estrecho de tal suerte que si antes las diferencias eran de segundos, ahora lo son de centésimas o aún de solamente milésimas de segundo.

Nadie desconoce que de la prontitud con que salga un corredor de cien metros llanos, depende en la actualidad el triunfo o la derrota. Los guarda metas en el fútbol, deben poseer tiempos de reacción muy cortos para ser eficientes. Otro tanto sucede con los jugadores de tenis de mesa, los jugadores de baloncesto y muchas otras disciplinas deportivas.

El estudiante debe recordar que los estímulos para los receptores nerviosos del organismo humano son de varias clases: son estímulos mecánicos todos aquellos que estimulan los receptores del tacto y presión; son estímulos fiscos la luz y las ondas sonoras; son estímulos químicos las variaciones en la concentración de substancias que en conjunto determinan la homeostasis del organismo. Son ejemplo de estas substancias las hormonas, las parahormonas y muchos iones y moléculas que desencadenan respuestas orgánicas específicas.

Para este trabajo se tienen en cuenta los estímulos físicos luz (imagen) y sonido, puesto que se trabaja con la estimulación visual y la estimulación auditiva.

La luz blanca que percibe el ojo humano, es un fenómeno físico debido a la propagación de un conjunto de ondas de una longitud que varía entre los 450 y los 723 nanómetros de longitud. El conjunto se denomina espectro visible.

Los objetos pueden ser captados por la retina humana, solamente cuando las ondas lumínicas del espectro visible inciden en ellos y éstos a su vez reflejan y absorben proporciones adecuadas del espectro. Esas proporciones son las que comunican al cerebro las sensaciones de formas y colores de los cuerpos. La visión mediante dos ojos (dos puntos de observación), permite captar la profundidad y el volumen de los objetos.

PROCESO PARA EL ENFOQUE VISUAL.

El proceso de enfoque visual, la acomodación visual, se ejecuta rápidamente; es fácil estar observando una estrella, que está a muchos miles de kilómetros de distancia y rápidamente mirarse la palma de la mano, esto porque es la luz la que transporta la imagen de los objetos. (Hoy, en la tierra estamos viendo estrellas que hace años dejaron de existir pero nos sigue llegando su imagen)

En esta práctica, el enfoque visual de la fuente de estimulación se logra previamente por observación constante, de un cronómetro colocado a una distancia entre 25 y 30 centímetros de los ojos del examinado, para no causar pérdida de tiempo entre la fuente de estimulación y la retina, que es el receptor estimulado. La estimulación es la iniciación del movimiento de los números en la pantalla del cronómetro.

TIEMPO DE REACCION PARA LA ESTIMULACIÓN VISUAL.

El tiempo de reacción por estimulación visual es el tiempo transcurrido desde el instante en que el receptor es estimulado por la iniciación del movimiento de los números en la pantalla del cronómetro, hasta cuando se ejecuta un movimiento de respuesta pequeño pero evidente y selectivamente voluntario, suficiente para detener la marcha del cronómetro convenientemente adaptado, e incluye los siguientes procesos:

1. La retina actuando como fotoreceptor es estimulada en los conos y bastones. Los conos y bastones son los verdaderos receptores, son prolongaciones citoplasmáticas de las células que conforman la capa nuclear externa. Estas hacen sinapsis con las células de la capa nuclear interna y luego con la capa de células ganglionares, las cuales se proyectan hacia la papila óptica para formar el nervio óptico el cual entrecruza elementos con su homólogo en el quiasma óptico y se proyecta como cintilla óptica hacia el cuerpo geniculado lateral en donde realiza una nueva sinapsis. Desde este sitio se dirige hacia la corteza occipital a través del fascículo geniculocalcarino en donde realiza una sinapsis más, en el área receptora visual primaria (área 17 de Brodmann). La trayectoria descrita incluye solamente una distancia de no más de 10 centímetros.

Algunos axones de las células ganglionares de la retina pasan de las cintillas ópticas a la región pretectal del mesencéfalo para hacer conexiones que median los reflejos visuales (parpadeo, acomodación visual...) Otros axones se dirigen del quiasma óptico al hipotálamo, donde se interconectan para regular ritmos circadianos y endocrinos.

2. Simultáneamente con la información hacia la corteza visual, se proyecta la información desde la retina al tálamo. Fisiológicamente el tálamo posee el tálamo específico, y el tálamo inespecífico los cuales se interconectan y de allí la información va al sistema reticular.

Estas tres vías tienen funciones diferentes: si el sujeto de la experimentación fuese a realizar un análisis de lo que ve, usaría primordialmente la porción específica del tálamo para llegar a la corteza cerebral, pero como está concentrado esperando la iniciación del movimiento de los números en el cronómetro, utiliza la vía del tálamo no específico, que es el que se comunica

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