El niño, nacimiento y desarrollo

INTRODUCCIÓN

En el siguiente trabajo se plasma el análisis elaborado sobre el tema nacimiento y desarrollo, después de visualizar las películas: “Desarrollo embrionario y fetal” y “Etapas del embarazo semana a semana” y haber dado lectura a “La organización del proceso de crecimiento” y “Teoría general del desarrollo psicológico en el niño”. Con lo comprendido de todas las anteriores se contrastaron los conocimientos previos para su realización, teniendo como prioridad el rescatar los conceptos de nacimiento y desarrollo.

DESARROLLO

El desarrollo humano es sin lugar a dudas una de las maravillas de la vida más complejas y variadas que existe;  pues resulta imposible encontrar dos seres humanos completamente idénticos, a pesar de que haya gemelos que compartieron la misma bolsa ambos organismos se ven afectados de manera distinta por el medio, pues cada uno recibe diferentes cantidades de citoplasma y a su vez, dentro del desarrollo existen discrepancias mínimas, mismas que se denominan gradientes de crecimiento, que abarcan no sólo desde su formación sino a lo largo de su vida hasta llegar a la adolescencia.

Sin embargo por ser la adolescencia una de las etapas más complejas tanto física como psicológicamente, se realizan estudios independientes a lo que compete nuestra área.

El comportamiento y las características de una persona como ya lo mencionamos, comienzan desde su formación, a pesar de ser el mismo proceso en todos los seres humanos, son muchos los factores que influyen y que hacen diferente las características del individuo. Incluso la madurez y personalidad  de los padres pueden determinar el desarrollo del niño, o bien la circunstancia en que este fue concebido; es decir si los padres están juntos o no, si era un bebé esperado o vino a interrumpir los planes de los mismos. Otro factor que viene a determinar la salud y desarrollo del niño, es la alimentación y estado en que se encuentra la madre, ya sea física o mental.

A pesar de que muchas personas afirman que los bebés no son capaces de percibir las emociones de la madre, éste es capaz de sentir el rechazo o el amor de sus padres, principalmente de la madre quien se convierte en la fuente de vida del bebé.

Durante las primeras nueve semanas de vida, el pequeño pasa de ser un blastocito del tamaño de la punta de un lápiz a tomar una forma más humana, primeramente se desarrollan dos capas: externa e interna, la capa externa será la bolsa donde se encuentre el bebé y la capa interna será el pequeño, alrededor de la quinta semana el embrión comienza a adquirir los órganos primitivos: su cerebro, la médula espinal y su sistema circulatorio, comenzando así a latir su corazón. A partir de la novena semana el bebé pierde la cola que lo hacía lucir como un renacuajo y comienzan a salir sus extremidades como los brazos, dedos, boca, ojos, nariz y orejas.

Las próximas semanas dentro de la etapa fetal ocurrirán notables cambios para el pequeño quien a pesar de medir lo mismo que una nuez ya tiene facciones definidas y espacio para los dientes, comienzan a definirse sus uñas y huellas digitales, es capaz de abrir y cerrar el puño, además su musculatura y reflejos crecen, comenzando sus movimientos. En cuanto a sus órganos internos también existe un desarrollo de los mismos, principalmente del hígado y su sistema nervioso. El cordón umbilical es el encargado de transportar el oxígeno y la sangre con nutrientes que mantienen al feto con vida.

En la semana 14 el bebé ya tiene formados sus ojos y oídos, haciendo numerosas gesticulaciones, Durante la siguiente semana su cerebro se conecta con el resto del cuerpo, se forman sus huesos, y se acelera su desarrollo sensorial.

El lapso de la semana 21 y 27 es muy emotivo pues el bebé es capaz de percibir y responder a las caricias de su madre, además en sus pulmones se forman bronquiolos y comienza la práctica de la respiración.  Incluso en esta etapa el bebé podría vivir fuera del útero con intensos cuidados.

De la semana 28 a la semana 37 su peso  es de 900 gr y seguirá aumentando hasta el momento del nacimiento, su piel comienza a endurecerse y produce una capa de grasa que le permitirá mantener su temperatura. Otro aspecto importante es su actividad cerebral, pues las neuronas comienzan a realizar conexiones que permitirán su aprendizaje, además el pequeño ya ha adquirido el sentido de la vista. El bebé comienza a girar 180° y permanece así hasta el momento de su nacimiento.

El nacimiento se considera una etapa crucial para el ser humano, pues se enfrenta a un fuerte cambio de vida, pasará de ser un ser dependiente de su madre de manera directa a sobrevivir por sí mismo ante el cambio de temperatura y medio, donde su primer reto consistirá en respirar. Para ello el cuerpo de la madre comienza a producir prostaglandina y oxitocina, las cuales provocan las contracciones en el útero que dará lugar a que el pequeño sea expulsado por la vagina.

Una vez que el bebé ha nacido comienza su desarrollo fuera del vientre materno, el recién nacido necesita múltiples cuidados, pues éste atraviesa por un periodo donde sólo se rige por el placer de satisfacer sus necesidades básicas, mismas que sólo la madre puede cubrir.

En el aspecto psicológico  el bebé aún se encuentra en un estado carente de estímulos que puedan significar algo para él. Solamente se rige  por el displacer que ciertas personas, sensaciones  u objetos puedan llegar a provocarle. Denominándole a este estado “autismo” según Kaneer (1943,1968) y Mahler (1952,1965).

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