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IMPORTANCIA DE LA LACTANCIA MATERNA EN EL DESARROLLO DEL NEONATO


Enviado por   •  29 de Agosto de 2019  •  Documentos de Investigación  •  2.843 Palabras (12 Páginas)  •  159 Visitas

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Tecno Ideas Uruapan  2016

“Atrévete a trascender internacionalmente”.

Importancia de la lactancia materna en el desarrollo del neonato

Nombre del autor(es): María Rocío Estrella Reyes

Diana Scarlett Moreno Escamilla

Nombre de Asesor(es): Guillermo Sandoval Hernández

Área: Medicina y salud

Categoría: Medio-Superior

Uruapan, Michoacán, México, a 05 de Mayo de 2016.


Importancia de la lactancia materna en el desarrollo del neonato

Estrella M., Moreno D., Sandoval G.,

Sumario

A pesar de que la leche materna es el alimento más completo y por naturaleza el mejor para la nutrición de los recién nacidos, ya que brinda todos los nutrientes necesarios y marca la pauta para un óptimo desarrollo, su práctica va cada vez más en descenso debido a la desinformación del tema, falta de acciones de promoción, protección y apoyo.

La leche matera contiene todo lo que el niño necesita durante los seis primeros meses de vida siendo que su composición nutritiva cambia y se ajusta a las necesidades del niño a medida que éste crece, favoreciendo su desarrollo, maduración y salud, además de fortalecer el vínculo afectivo madre e hijo, transfiriendo amor, seguridad, placer y compañía.

Enfocándonos sobre todo en las de promoción de la salud y prevención de enfermedades y tomando como base estudios  e información proporcionados por organismos internacionales esperamos causar impacto en las madres para que opten por amamantar pues ha quedado comprobada la superioridad  de la leche materna trayendo grandes beneficios al niño tanto a corto como largo plazo, a la madre y a la sociedad, considerándola irremplazable para la alimentación y crianza del lactante y el niño pequeño.


  1. Problema

México es uno de los países con los porcentajes más bajos del mundo en la práctica de la lactancia materna.

La lactancia materna ya no supone una cuestión de supervivencia. Por ello, la forma de criar a los recién nacidos se ha convertido en una elección libre para la madre que desee vivir en su cuerpo una experiencia única y dar a su hijo lo mejor.

Los profesionales sanitarios y las mujeres saben que la lactancia materna proporciona innumerables ventajas para la salud, el crecimiento y el desarrollo de los niños, disminuye el riesgo de gran número de enfermedades agudas y crónicas. Pese a ello, en las últimas décadas se ha observado una disminución del número de mujeres que amamantan a sus hijos.

  1. Objetivos

El objetivo de este proyecto es dar a conocer las ventajas y beneficios que trae consigo la lactancia materna, brindar información específica del tema y con ello conseguir alentar a madres a amamantar a sus hijos

  1. Hipótesis

En muchos casos, la decisión de dar el pecho o el biberón se basa en criterios de comodidad, estilo de vida, cabe destacar también el gran número de madres, que teniendo la idea clara de amamantar, finalmente optan por el biberón tras unos primeros días llenos de dificultades

Es preciso informar sobre los conocimientos actualizados de la lactancia natural, no sólo en aspectos tan importantes como la nutrición, sino también de manejo práctico y de consejos para la lactancia. Ello permitirá que la mujer tome una decisión informada en lo que respecta a la alimentación de su hijo, con el convencimiento de que, desde un punto de vista nutricional, el desarrollo del bebé está garantizado  con la lactancia materna.

  1. La leche materna

La leche de la madre es el alimento más

adecuado y natural para el bebé durante

los primeros meses de vida y se adapta en

cada momento a sus necesidades.

Proporciona los nutrientes que necesita

para su adecuado crecimiento y desarrollo

adaptándose perfectamente a su función

digestiva..

La evidencia científica avala la superioridad de la leche materna para la alimentación del recién nacido y del lactante durante los primeros seis meses de vida. Después de esta edad, deben recibir alimentos complementarios al tiempo que continúan con leche materna hasta los 2 o más años.

  1. Composición externa de las mamas
  1. Areolas: Es la parte más oscura alrededor del pezón. Durante el embarazo se oscurece aún más, para hacerse más visible cuando el bebé empiece a mamar. El niño o niña debe tomar parte de la areola para mamar bien
  2. Pezón: Es la punta del pecho por donde sale la leche a través de 15 a 20 pequeños agujeros.
  3. Glándulas de Montgomery: Son glándulas sebáceas localizadas en las areolas rodeando al pezón. Estas glándulas producen secreciones sebáceas que mantienen la areola y el pezón lubricado y protegido. Las sustancias volátiles que también segregan las glándulas pueden servir de estímulo olfativo para el apetito de los recién nacidos.

Tener pechos grandes o pequeños no tiene nada que ver con la producción de leche.

  1. Composición interna de las mamas

  1. Alvéolos: Es donde se produce la leche. Con cada mamada éstos se contraen para sacar la leche.
  2. Conductos lactíferos: Son los que conducen la leche de los alvéolos a los senos lactíferos. Continuamente la leche baja por ellos.
  3. Senos lactíferos: Los senos lactíferos quedan debajo de la areola; es allí donde se almacena la leche. Por eso, es importante que el niño niña abarque parte de la areola para exprimir la leche.
  4. Nervios: Son los que mandan la orden al cerebro de hacer más leche en los alvéolos. También transmiten la orden al cerebro para hacerla salir del pecho.
  5. Tejido graso: Envuelve todo el seno y le sirve de colchón protector. Algunas mujeres tienen más grasa en los pechos que otras. Por eso, las mujeres tienen diferentes tamaños de pechos. Tener senos grandes o pequeños no afecta la producción de leche.
  1. Producción de la leche

Cuando el niño o niña mama bien, la lengua y la boca estimulan el pezón. Entonces los nervios del pezón mandan el mensaje al cerebro de la madre de que el niño o niña quiere leche. El cerebro responde y ordena la producción de la hormona prolactina. La prolactina hace que la leche se comience a formar en los alvéolos. Entre más mama el niño o niña más leche produce la madre. Para que la leche baje de los alvéolos al pezón, el cerebro hace producir otra hormona que se llama oxitocina. A veces la madre puede sentir la bajada. Si el niño o niña no mama bien, la madre no recibe el estímulo adecuado y no produce suficiente leche.

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