Infecciones Madre A Hijo

Serología de procesos infecciosos de transmisión materno- fetal

Esta forma de transmisión es la llamada vertical o perinatal, cuando una mamá infectada o seropositiva transmite el virus su hijo durante el embarazo, parto o amamantamiento. Se considera que alrededor de 33 niños de madres portadoras nacen infectados.

Actualmente existen métodos para que aplicados oportunamente en las madres embarazadas portadoras y en el niño, disminuyan considerablemente la probabilidad de transmisión.

Por eso es muy importante que cuando la madre considere que está en riesgo, se practique un análisis antes de embarazarse para poder prevenir daños al hijo o hija.

Como la transmisión a través de la lactancia materna también es posible, la mamá infectada no debe dar el pecho a su hijo, porque si bien está comprobado que en el adulto, la boca no es una vía de entrada de algunos virus, a menos que se tenga una eyaculación en ella, en el caso del bebé sí lo es.

También se puede infectar al feto vía transplacentaria, a consecuencia de diseminación hematogena en la madre, o por vía ascendente, desde el tracto genital, tras infección del liquido amniótico o por rotura de las membranas.

Existen dos factores de riesgo importantes para la transmisión del virus al bebé durante la lactancia, uno que su sistema inmunológico no está suficientemente maduro y otro es que el bebé mama varias veces al día y las constantes exposiciones al virus aumentan el riesgo de infección por lo que la lactancia materna debe suplirse por leche suplementaria.

Entre la infección transmitida por vía materno – fetal encontramos:

 Sífilis:

La infección por Treponema Pallidum en el embarazo puede resultar en un aborto espontáneo, mortinato o infección del feto con manifestaciones precoces durante el período neonatal o tardío durante la infancia.

 Toxoplasmosis:

La transmisión vertical al feto es de un 30 a 40% y varía según el trimestre del embarazo en que se adquiere la infección. De un 15% en el primer trimestre aumenta a una 60% en el tercer trimestre. El toxoplasma se contagia fundamentalmente por la ingestión de carne cruda y del contacto con gatos, que son antecedentes epidemiológicos importantes de investigar en la madre cuando se sospecha de esta infección.

 Rubéola:

Los efectos de la infección por el virus rubéola sobre el feto dependen del período del embarazo en que este es adquirido. Así el riesgo de infección fetal es de alrededor:

• 81% en las primeras 12 semanas

• 56% de las 13 a 16 semanas

• 36% de las 17 a 22 semanas

Los fetos infectados en las primeras 8 semanas presentan malformaciones especialmente cardíacas y sordera en el 50% de los casos. Entre las 9-12 semanas el riesgo de malformaciones es de alrededor de 40% y entre las 13-16 semanas baja

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