Infertilidad

RESUMEN

Reflexionar sobre el proceso que sigue una pareja que se enfrenta a la infertilidad, el triste, doloroso, costoso y sobre todo esperanzador camino que se recorre en este proceso, como lo vive la pareja y las personas que los rodean, a través de la revisión del libro La danza de la realidad del autor Alejandro Jodorowsky

Para así dar a conocer desde el interior de una pareja como enfrentar el dolor, y crear conciencia a una sociedad aun carente de información acerca de este problema que cada vez es más común.

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INTRODUCCIÓN

El darse cuenta de que no se puede tener hijos es como caer en un abismo que aterra. Cuando se inicia ese largo camino de lucha, cirugías, estudios varios, todo tipo de hormonas y una que otra superstición, a las parejas no se les ocurre pensar que aun con todos los tratamientos existentes no podrán concebir un hijo.

Cuando todas las alternativas se han agotado se tiene que enfrentar la situación, no habrá hijos en esa pareja y tienen que reconstruir su vida desde el dolor de la perdida y la desesperanza, con las preguntas poco sensibles de parientes y amigos sin que se tenga la respuesta correcta para calmar esa morbosidad que muerde el corazón, sin que puedan comprender que, “se puede” Sí, no tener hijos también se puede.

Alejandro Jodorowsky,

Tocopilla Chile 17 de febrero de 1929, es un artista polifacético chileno de origen judío-ucraniano. Entre sus muchas facetas destacan las de escritor, filosofo, dramaturgo, actor, poeta, director de cine, guionista de cómics, instructor de tarot y psicomagia entre otras cosas. Fundo el grupo Pánico. Su aportación mas controvertida es la psicomagia, una técnica que conjuga los ritos chamanes, teatro y psicoanálisis para provocar en el paciente una catarsis de curación.

A la edad de 24 años quemó sus fotografías y se fue de Chile. Vivió en México y actualmente reside en Francia, país del que ha adquirido la nacionalidad.

Jodorowsky llega a México tras un periodo de seis años al lado de Marcel Marceau en Paris (1953).

A su llegada a México en 1960 se inicia en la meditación zen con el maestro Ejo Takata y en la psicología al lado de Erich Fromm en Cuernavaca. Al pasar los años vuelve a París a fundar el Movimiento Pánico.

En 1967 realiza su siguiente obra teatral. Rueda con él su primera película Fando y Lis se proyecta en Acapulco pero sale huyendo tras un intento de linchamiento.

La danza de la realidad

Este libro es un ejercicio de autobiografía imaginaria, aunque no en el sentido de ficticia pues todos los personajes, lugares y acontecimientos son verdaderos sino en el hecho de que la historia profunda de mi vida es un esfuerzo constante para expandir la imaginación y ampliar sus límites para aprehenderla en su potencial terapéutico yb transformador. Ella actúa en todos los terrenos de nuestra vida, incluso en los que consideramos racionales. Por eso no se puede abordar la realidad sin desarrollar la imaginación desde múltiples ángulos normalmente lo visualizamos todo según los estrechos limites de nuestras creencias condicionadas de la realidad misteriosa

Evangelios para sanar

Evangelios para sanar, libro mítico y fundamental en la obra terapéutica de Alejandro Jodorowsky, se publica ahora en España en una edición revisada y ampliada manteniendo el lenguaje directo de las conferencias originales que ofreció en la universidad Jussieu en París, el autor va citando fielmente, casi uno a uno, los versículos de los cuatro evangelios (cada frase del evangelio es perfecta y contiene una enseñanza) para realizar a continuación una interpretación, completamente nueva y radical, de lo que éstos pretenden decirnos. Como el propio autor señala, esta nueva interpretación, que afecta tanto a la sexualidad de Cristo o de María, al nacimiento y muerte del Cristo, a las bienaventuranzas o a los milagros, intentará proponer una moral satisfactoria basada en la salud y la belleza; y enseñar a los que estén listos y prestos a mutar, el sagrado regreso a sí mismos.

El niño del jueves negro.

“Cuando le pedí al Rebe que me contara su vida, no me respondió pero se puso a llorar. Ni mi abuelo ni mi padre habían pensado en preguntarle cómo había sido su existencia antes de que los osos le devoraran el cuerpo. Yo fui el primero en interesarme en ese pasado. Comprendo la actitud de mis antecesores: Jaime nunca estuvo seguro de la realidad del caucasiano. Podría ser la esquizofrenia, y no un viaje real fuera del cuerpo, la que haciéndonos herederos de su locura nos la transmitió. Sin embargo, alucinación o no, el Rebe cambió nuestras vidas. Sin él, yo nunca hubiera podido echar raíces en este mundo que, en su mayor parte, es agresión. Mi abuelo hizo de él un cómplice, mi padre un intruso y yo un maestro, porque a Jaime lo perdí a los dos años y sólo volví a verlo a los diez. Por eso, aunque mi razón diga lo contrario, prefiero creer que el Rebe y todo aquello que contó de mi país y mi familia es verdadero.”

JUSTIFICACIÓN

¿Porque elegí el tema?

Elegí el tema en primer lugar porque es un problema que me toca de primera mano y el cual deseo abordar desde el interior de la pareja infértil, mas allá de los fríos tratamientos médicos y no médicos, lo que sienten, como viven el doloroso proceso, lleno de esperanza, sufrimiento y gastos excesivos todo con el único fin, la concepción.

Como enfrentan las maliciosas preguntas y los miles de consejos que no se piden pero que la gente te los brinda “de buena fe” y que al estar al borde de la desesperación se llevan a cabo cosas tan extrañas que te sugieren hacer que lo mas desagradable es que las lleven a cabo, sin darse cuenta que cada tratamiento sea cual sea sin que den resultado los hace llenarse de rabia y coraje contra la vida, contra Dios, con el destino, y sin embargo es tanto el deseo que vuelven a intentarlo una vez mas, solo una vez mas “ahora si la ultima” sin darse cuenta que cada vez se están hundiendo en un abismo del cual cada vez será mas difícil salir y que solamente ellos dos lo podrán hacer con su amor su fuerza y la determinación para decir basta, basta del sufrimiento físico de tantos estudios dolorosos e inútiles, basta

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