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Ligamentos de la rodilla


Enviado por   •  8 de Octubre de 2012  •  Trabajo  •  1.315 Palabras (6 Páginas)  •  644 Visitas

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A) LIGAMENTOS DE LA RODILLA

Los ligamentos son haces de fibras de colágeno que tienen como función limitar el desplazamiento de la articulación por encima de los límites anatómicos y biomecánicos.

A.1) Ligamentos de la rodilla

1) Ligamento cruzado anterior (LCA): Es la estructura que se lesiona con mayor frecuencia, en ella nos centraremos en el artículo.

2) Ligamento cruzado posterior (LCP)

3) Ligamentos laterales externo/interno: Se comentarán sus pormenores en el siguiente artículo.

B) LESIONES DE LIGAMENTO CRUZADO ANTERIOR

Pese a haber comentado con anterioridad este tipo de lesiones, en este artículo se hará referencia concreta a las roturas y, la solución quirúrgica de las mismas.

El ligamento cruzado anterior es el freno principal (en un porcentaje aproximado del 90%) al desplazamiento anterior de la tibia, limita la rotación tibial y la angulación externa e interna de la rodilla cuando está completamente estirada.

Las mujeres tienen una mayor propensión a lesionarse el LCA dadas sus características anatómicas: mayor laxitud articular, pelvis más ancha lo cual condiciona una rotación externa de la tibia, el lugar donde se aloja el LCA en la rodilla (escotadura).

C) ¿CÓMO SE PRODUCE LA ROTURA DEL LIGAMENTO CRUZADO?

El mecanismo de rotura se fundamenta en un cambio brusco de dirección de la rodilla al decelerar de manera súbita. Un ejemplo gráfico de tal circunstancia es la realización de un mal apoyo de la extremidad tras un salto o bien, parar de manera precipitada durante una carrera

Los efectos de la rotura se traducen de manera clara en la expresión tan manida por los deportistas que la sufren de: “ se me ha quedado la rodilla clavada”

D) SÍNTOMAS DE LA ROTURA

- Se siente e incluso se puede llegar a oír un chasquido en el interior de la rodilla.

- Aparece una inflamación moderada o severa.

- Dificultad para apoyar la extremidad lesionada.

- Limitación para doblarla y estirarla, normalmente provocado por el dolor.

- Ante una exploración de la rodilla, el paciente refiere sentirla dolorida.

- Tendencia a mantenerla en semiflexión.

- Impotencia funcional a la marcha.

E) DIAGNÓSTICO

- En la lesión de ligamentos cruzados, serán positivos el signo del cajón anterior en caso de lesión de LCA, o del cajón posterior en caso de lesión del LCP.; en presencia de una lesión de LCA aguda, el signo del cajón anterior puede ser negativo. Son necesarias muchas veces otras pruebas.

- El estudio radiológico en dos planos permitirá descartar la existencia de fracturas o arrancamientos óseos a nivel de las inserciones de los ligamentos.

- Para una correcta valoración se precisa una resonancia magnética. Se debe tener en cuenta que en el momento de producirse la lesión y, en ciertas ocasiones debido al hematoma interno existente, se hace difícil el ver de forma correcta el estado del ligamento.

- El diagnóstico inicial es por lo general difícil, debido al dolor y, a las posibles lesiones combinadas y asociadas a lesiones meniscales (frecuente la lesión del ligamento lateral interno y menisco interno, la temida “tríada”), pero desde el punto de vista ligamentario, el clínico debe precisar si la lesión afecta a las estructuras periféricas del compartimiento interno o externo, o si afecta a los ligamentos cruzados (el LCA. es el más frecuentemente lesionado, siendo el LCP. sólo ocasionalmente afectado).

- La evolución natural de una ruptura de ligamentos conlleva a la inestabilidad crónica de la rodilla, provocando en el paciente la sensación de inseguridad en la misma, impidiéndole por ende la actividad deportiva y, limitando muchas actividades de la vida sedentaria.

F) SITUACIONES CON TRATAMIENTO NO QUIRÚRGICO

Existen una serie de situaciones en las cuales no es recomendable o bien, no se considera imprescindible la intervención y que se enumeran a continuación:

- Tratarse de una persona mayor y con un nivel de exigencia física diaria baja.

- Presentar un grado de inestabilidad de la rodilla mínimo.

- Inexistencia de lesiones asociadas.

F.1) La no intervención quirúrgica implica:

1) Capacidad del lesionado para cumplir con un programa de rehabilitación prolongado: reforzamiento muscular (cuadriceps, isquiotibiales).

2) A menudo se precisa una rodillera estabilizadora para realizar determinadas actividades deportivas (especialmente en las que existe un stress rotación al de la rodilla) o, simplemente para caminar (decisión personal y opcional).

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