ORGANISMOS GENÉTICAMENTE MODIFICADOS Y SU IMPACTO SOCIAL

ORGANISMOS GENÉTICAMENTE MODIFICADOS Y SU IMPACTO SOCIAL
Karla Sophia Magaña León                                                 Universidad Autónoma de Baja California

[pic 1]

La biotecnología ha sido utilizada mayormente para el desarrollo de productos destinados al consumo humano, especialmente en ámbitos de agricultura y de salud. Por medio de microorganismos se pretende mejorar las características de un alimento, crear nuevas texturas y sabores, mejorar procesos de cultivo y producción, facilitar la fabricación de vacunas, medicamentos, entre otros. A grandes rasgos, la biotecnología puede ser descrita como la aplicación tecnológica que utiliza elementos biológicos, como organismos vivos, para crear o modificar productos o procesos con un fin específico

Dentro de la infinidad de productos y procesos realizados por medio de la biotecnología se encuentran los Organismos Genéticamente Modificados (GMO). Éstos se obtienen añadiendo uno o varios genes nuevos, o modificando uno ya existente, alterando así su genoma, y al mismo tiempo, las características del organismo, ya sea para brindarle características nuevas o para eliminar alguna de ellas.

Sin embargo, a medida que aumenta el uso de los Organismos Genéticamente Modificados, surgen preocupaciones e inquietudes en la sociedad sobre el impacto que podrían causar en la salud humana y el ambiente, ocasionando el temor y el rechazo por parte de ésta hacia dichos organismos.

El principal objetivo de esta investigación, la cual se basó en el estudio y análisis de información documentada, es entender cómo afectan cotidianamente los GMO, pero para ello es necesario conocer qué son y cuál es el proceso por el que se obtienen estos organismos.

Los GMO son aquellos organismos a los que se les inserta uno o varios genes que anteriormente no tenían dentro de su ADN,  es decir, la molécula que contiene toda la información genética (King, 2002), con el fin de que éstos adquieran nuevas características o mejoren ciertos rasgos, por ejemplo, una mayor resistencia a plagas, mejoramiento de la calidad nutricional o tolerancia a climas extremos, en el caso de las plantas.

El procedimiento para obtener un GMO consiste en seleccionar y aislar el gen de interés, es decir, el que contiene las características que se desea otorgar al organismo, posteriormente se hacen varias copias de dicho gen y se introducen dentro del ADN del organismo. Para realizar la transferencia de genes existen dos opciones actualmente: la biobalística, o cañón de genes, y el método biológico, también conocido como transferencia por medio de Agrobacterium^[1].

La biobalística consiste en “disparar” micropartículas de oro o tungsteno recubiertas con el gen de interés dentro de las células del organismo que se desea transformar. El método biológico se utiliza generalmente en plantas, ya que es posible transferir nuevos genes dentro de ellas cuando la bacteria Agrobacterium se introduce en su organismo (Riechmann, 2000). Primeramente se cultiva esta bacteria y se le inserta el gen de interés. Cuando la bacteria entra en el organismo de la planta, la infecta generando una especie de tumores, principalmente en el tallo. Durante la infección, la bacteria transfiere parte de su ADN a las células de la planta, transfiriendo al mismo tiempo el gen previamente insertado en el ADN de la bacteria y agregándolo también a las células de la planta.

Una vez que se realizó la transferencia de genes, se verifica que éstos funcionen conforme a lo esperado, y finalmente se reproducen más organismos derivados del ya transformado para verificar que éstos también posean el gen nuevo. Este procedimiento puede realizarse en plantas, animales y otros microorganismos vivos.

Los GMO ofrecen múltiples beneficios industriales, agronómicos, alimenticios y médicos (ver anexo 1), pero a pesar de ello, existe un creciente temor en la sociedad sobre las repercuciones que éstos podrían tener en el ambiente, y sobre todo, en la salud humana. Entre las principales preocupaciones se encuentran el peligro de intoxicación o reacciones alérgicas por el consumo de alimentos derivados de GMO. Sin embargo, antes de autorizar la comercialización de algún cultivo de GMO (ver anexo 2), éste se somete a rigurosas evaluaciones de seguridad en las que se toman en cuenta diversos aspectos, los cuales van desde la forma y estructura de la planta, hasta la composición nutricional de su producto, y una vez que se ha comprobado que cumplen con las especificaciones de seguridad establecidas, se puede asegurar que éstos cultivos producen alimentos seguros para su consumo, es decir, que no contienen toxinas o algún otro componente que pueda causar una reacción alérgica al momento de ingerirse o digerirse, por lo cual no es posible que algún fragmento del material genético del GMO se adhiera a nuestras células (Agrobio, 2015). Estos organismos han tenido una vital importancia dentro del ámbito médico, ya que se utilizan tanto para la producción de vacunas y productos farmaceúticos, como para el diagnóstico y el tratamiento de diversas enfermedades de origen genético.

Por otra parte, los cultivos de GMO, más que afectar al medio ambiente contribuyen al cuidado de éste, ya que al ser modificados para que tengan una resistencia a distintos herbicidas e insecticidas ayudan a reducir la emisión de gases nocivos que provocan el efecto invernadero, como lo es el CO2 ^[2], así como también se reduce el gasto de agua gracias a los cultivos resistentes a las sequías, esto contribuye a la conservación y disponibilidad de agua potable a nivel mundial (James, 2014).

Desde que se comenzó a producir este tipo de organismos, la biotecnología ha logrado brindar ayuda a agricultores, productores, médicos, entre otros, creando nuevas herramientas que pernitan responder eficazmente a la demanda de alimentos, medicamentos y otros productos de uso cotidiano, con una mayor cantidad de aportes benéficos, costos más bajos de producción y comercialización, y menos riesgos ambientales y de salud. Estos factores no solamente se toman en cuenta para el presente, ya que se siguen desarrollando y perfeccionando las herramientas y métodos para la producción de GMO así como también las características que se les puede añadir, por lo que se procura que el impacto que tengan estos actualmente, influya también de manera positiva en el futuro en los ámbitos de salud, ambiente, producción y economía. Más allá de ser una amenaza, los organismos genéticamente modificados son una solución efectiva para las carencias y los daños a nivel mundial ocasionados por la humanidad misma.

...