Cultura Científica y Humanística II El bazar del renacimiento

Ismael Alatriste López

Cultura Científica y Humanística II  

El bazar del renacimiento 

Brotton, sostiene que la compleja influencia de los intercambios entre este y oeste dio origen a la cultura, el arte y la erudición que popularmente se asocian con el Renacimiento. Desde las cruzadas, Europa y la España musulmana, el Egipto de los mamelucos, la Turquía otomana y el lejano oriente mantuvieron intercambios comerciales y de ideas, a pesar de los conflictos militares entre cristianos y musulmanes. La versión tradicional del Renacimiento (que Brotton califica de obsoleta) sostiene que a finales del siglo XIV la cultura europea empezó a redescubrir la olvidada tradición intelectual grecorromana, lo cual permitió que los estudiosos y artistas afincados principalmente en Italia desarrollasen formas más cultas y civilizadas de pensar y actuar.  Este enfoque sostiene también que el Renacimiento puso las bases sobre las que se asentó la civilización europea moderna.  La idea del Renacimiento como logro cultural de occidente es elitista y euro centrista.

 La máxima expresión de esta individualidad será el arte y en el caso de la pintura de Holbein está presente en la actitud, la mirada de los personajes. En pinturas como esa está presente el nacimiento del hombre moderno. Renacimiento culto (Humanismo). La consola al centro de la pintura contiene diversos objetos tanto en la parte superior como en la inferior. Ellos representan a las artes liberales.

El Renacimiento en el mundo. El David de Miguel Ángel, representa la obra cumbre de la versión tradicional del Renacimiento: una obra que se remite a la Antigüedad clásica y se completa con los avances del época; ejemplo de la genialidad artística e imagen atemporal de la perfección de la forma humana. Veos lo que queremos ver, una muestra de la civilización a la que pertenecemos.

En el mundo interior del capital

Peter sloterdijk

En la primera parte del libro Sloterdijk marca el inicio del proceso de globalización, en el inicio de la globalización marítima, es decir en la época de los grandes exploradores y mercaderes que empezaron a circunvalar el globo con sus navíos hacia principios del siglo XVI, fue este hecho(reflejo de un capitalismo temprano), lo que provoco que los europeos adquirieran progresivamente una primera imagen de la tierra como globo “interconectado” (aunque esta interconexión fuera forzada para los pueblos no europeos, véase colonialismo). 

Globalización marítima; el poder de la subjetividad 

Los primeros compases de la globalización, los marcan estos marinos-comerciantes que van a territorios lejanos para conseguir (principalmente) un excedente, un beneficio que sería utilizado para pagar sus deudas, ya que estos viajes eran financiados por la nobleza y la burguesía de la época. Estos aportadores de capital invertían sus recursos en expediciones a priori arriesgadas, y lo hacían porque esperaban obtener su margen de ganancias de ellas. Los protagonistas de esta primera etapa de la globalización, pues son estos productores-deudores, Sloterdijk los bautiza como “empresarios” (consiguen ganancias para saldar deudas), invierten y toman riesgos para construirse un futuro hecho a su medida que no dependa de la ayuda de ningún dios. Para ellos el globo era un campo de negocio generalizado de inversión, que aunque en esa época poseyera las características de algo peligroso y desconocido, suponía también una oportunidad de negocio nada despreciable. 

Para que estos sujetos se aventuraran hacia lo hipotético-desconocido, se tuvieron que producir antes dos cambios importantes respecto a la época anterior (la Antigüedad). El primero es la positivización de la deuda, para invertir y poder endeudarse, la deuda tenía que librarse de su propia connotación negativa (influida en aquella época por la moralidad cristiana). Esto se superó cuando se produjo el segundo cambio, un cambio profundo en la psique de los hombres, tan importante que después de él vería a luz una nueva clase de humano, diferente del de la antigüedad, un humano consciente de sí mismo, un “ser-sujeto”. Este es uno de los puntos más interesantes que encontramos en el libro del filósofo alemán, en él nos explica el proceso de cambio mental que hizo posible la aparición del hombre moderno. Este ser-sujeto se diferencia del humano antiguo porque es capaz de pasar de la teoría a la praxis solo, no necesitaba un “señor externo”(dogma religioso/político) que le ordenara su cometido, era capaz de encontrar sus propios motivos para superar la inhibición (al menos aparentemente)y pasar a la acción. Estos motivos eran auto-impuestos desde la propia subjetividad del individuo, la desinhibición, pues, es en realidad una auto-desinhibición ya que las fuentes que la nutren son el auto-asesoramiento y la auto-persuasión. Para que estas estructuras mentales funcionaran, el individuo se tenía que considerar previamente como “sujeto”. 

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