ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Ejercicios de asimilación


Enviado por   •  3 de Febrero de 2015  •  4.017 Palabras (17 Páginas)  •  263 Visitas

Página 1 de 17

QUINTA SEMANA

UNIDAD XII El ensayo

Ejercicios de asimilación

I- Desarrolla las cuestiones siguientes:

1.- ¿Qué es un ensayo?

El ensayo es una redacción en la que se plantea una tesis (idea primaria), que se desarrollará a lo largo del escrito, afirmándola, refutándola o moderándola.

Se define ensayo como un escrito breve en el que el autor expone su punto de vista acerca de un tema o aspecto determinado de análisis. Y que se caracteriza por la utilización de un lenguaje acorde con el tipo de lector al cual está dirigido, así como el tratamiento que se le da al tema en cuestión. En tal sentido pueden existir ensayos de tipo filosófico, coloquial, literario, entre otros, dependiendo de la intención investigativa del autor, y lo más importante, teniendo en cuenta el tipo de lector al que va dirigida la escritura. (Blanco, 2006)

Para redactar un ensayo es necesario determinar con claridad cuál es el propósito, qué se pretende demostrar, cómo y por qué. Por ello es crucial el momento de plantear una tesis o hipótesis, puesto que da origen al texto. Después de definir nuestra hipótesis y de acuerdo con el tipo del ensayo que se trate, hay que considerar que lo más recomendable es realizar una investigación bibliográfica previa a la escritura, pues servirá para desarrollar la argumentación y demostrar nuestros planteamientos. De igual manera, se debe tomar en cuenta que el ensayo responde a la lógica propia de cualquier texto: una estructura IDC, es decir, introducción, desarrollo y conclusión.

2.- Describe el papel de las funciones denotativa y connotativa del lenguaje en el ámbito del ensayo.

El Lenguaje Denotativo es cuando el texto es totalmente objetivo. En este tipo de textos no se aplican los recursos de la poesía por ejemplo: La personificación, la comparación, la metáfora, etc.

• El Lenguaje Connotativo cuando un texto esta escrito de manera connotativa, significa que es subjetivo. Por ejemplo los poemas normalmente son connotativos ya que tienen el uso de la metáfora, la hipérbole, la personificación. Estos elementos hacen que el texto no sea directo y no este escrito tal como algo estaría escrito en un diccionario.

3.- El ensayo es una reflexión personal del autor. Sin embargo, se recomienda hacer una documentación del tema antes de empezar a escribir. ¿Por qué?

La documentación aportara conocimiento y nuevas ideas al autor, por eso es recomendable ya que esta constituye el fundamento del ensayo.

4.- ¿Cuáles son las características del ensayo?

Sus características son:

estructura libre

de forma sintética y de extensión relativamente breve

variedad temática

estilo cuidadoso y elegante

tono variado, que corresponde a la manera particular conque el autor ve e interpreta al mundo.

El tono puede ser profundo, poético didáctico, satírico, etc., la amenidad en la exposición, que sobresale sobre el rigor sistemático de ésta.

Se clasifica en: Uno de carácter personal, en el que el escritor habla sobre sí mismo y de sus opiniones sobre hechos dentro de un estilo ligero y natural. Otro, más ambicioso o extenso, de carácter formal o que se aproxima más al trabajo científico, aunque siempre interesa el punto de vista del autor.

El verdadero ensayista debe poseer un perfecto dominio de la materia y buena dosis de cultura general para desarrollar un tema artísticamente a la manera de un motivo musical que se desenvuelve a través de ricas y variadas relaciones tonales. El ensayo es también una especie de divulgación y un juego brillante por el mundo de las ideas.

II.- Lee detenidamente el siguiente ensayo. Responde las interrogantes que aparecen al pie del mismo:

Para un arte de escribir

Jorge Mañach

Cubano (1898 – 1961)

Evidentemente, escribir es sólo cuestión de tener algo que decir y de decirlo lo mejor posible. Por lo tanto, de substancia y de forma.

Prescindamos por el momento de lo que resulta anterior aún a eso, que es la preparación general, el fondo de cultura y de adiestramiento específico indispensable para tener algún depósito contra el cual girar. Sobre eso vendremos luego, aunque sea previo. Asumamos que ese fondo existe en mayor o menor medida, y que nuestro escritor en ciernes experimenta unas ganas irresistibles de expresarse literariamente. Lo primero, repito, en ese trámite, es lo que se quiere decir: la substancia.

La substancia puede ser de índole muy variada; substancia de pensamiento, substancia de cosas o substancia de emoción. En otras palabras: el escritor se pone ante la cuartilla como un meditador, como un “reportador” o como un poeta…aunque sea en prosa. Obviamente, el trance menos severo es el del que llamo “reportador”. Tiene éste el mundo, o una parcela de él, frente a sí. Las cosas que se propone entresacar de él y revelar o destacar al lector están ahí: es sólo cuestión de elegirlas con acierto, por lo que tienen de insólitas o, al contrario, de características; por lo que tienen en todo caso, de significativas. Si no ve eso, no vale la pena que escriba. El escritor es por definición, un señor que cree ver más o mejor que los demás. No hay modo de quitarle al oficio esa vanidad. Y ya el ver claras las cosas significativas, el verlas con su propio perfil, no es poca substancia. De los buenos informadores, entran pocos en libra.

Otro modo de substancia es la emoción que se experimenta ante las cosas o por la ausencia y nostalgia de ellas. Es la materia del poeta; del escritor de sensibilidad o el escritor de fantasía. El primero es el que se conmueve con presencias; el segundo, el que se emociona con ausencias. Aquél podrá informar primero de las cosas que le impresionan, como en el caso del cronista o del narrador, pero lo más importante de su materia será siempre la herida que ellas hacen en su sensibilidad, y su acierto expresivo consiste en respirar por esa herida. El segundo se crea un mundo a su gusto o su angustia. Tendrá que ser un mundo interesante, un mundo en que el aleteo de su fantasía sea bastante vigoroso para despertar la fantasía que los demás hombres llevan dormida.

Y finalmente, está el escritor cuya materia es el pensamiento. Se parece mucho al escritor emotivo; sólo que en él la sensibilidad es de la inteligencia y de la conciencia, y consiste en la aptitud para reaccionar con ideas ante las cosas del mundo, o ante las ideas mismas de él y de los demás.

Es evidente que esas substancias _ imágenes de cosas, emociones, ideas_, se tienen o no se tienen cuando se va a escribir. No sé que haya ninguna

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (25 Kb)
Leer 16 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com