ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Lectura Por Palabras


Enviado por   •  3 de Diciembre de 2013  •  740 Palabras (3 Páginas)  •  481 Visitas

Página 1 de 3

TEXTO DE EVALUACIÓN DE VELOCIDAD LECTORA

CUARTO AÑO BASICO

LA ASTUTA HIJA DEL CAMPESINO 5

Érase una vez un pobre campesino que no tenía tierras. Solo poseía una casa 20

muy pequeña y una hija única. Un día la hija le dijo: - Padre, debiéramos 37

pedirle al rey que nos diera una porción de tierra aún sin trabajar. 51

El rey, al enterarse de su pobreza, les regaló además una parcela de hierba, la 69

muchacha la labró junto a su padre y sembraron allí un poco de trigo y 84

algunos árboles frutales. Cuando ya tenían cultivado casi todo el campo, 97

encontraron en la tierra un mortero hecho de oro puro. – Escucha – dijo el 111

padre a la muchacha -: como nuestro señor, el rey, ha sido tan compasivo y 128

nos ha regalado este campo, vamos a obsequiarle el mortero a cambio. 142

- Padre – dijo -, si tenemos solo el mortero y nos falta la mano, tendremos 157

que buscarla. Así es que mejor no digas nada. 168

Pero él no hizo caso, tomó el mortero y se lo llevó al rey. Le dijo que lo 188

había encontrado en la pradera, pidiéndole que lo aceptara el señal de respeto 202

El rey tomó el mortero y preguntó si no había encontrado algo más. 216

- No – contestó el campesino. 221

Entonces el rey le ordenó que trajera también la mano. El campesino repuso 235

que la mano no la había encontrado, pero sus palabras no sirvieron de nada: 250

Tomado del Libro “Cuento Contigo”

Hermanos Grimm

NOMBRE:

N° DE PALABRAS

PALABRAS INCORRECTAS

TOTAL DE PALABRAS

TEXTO DE EVALUACIÓN DE VELOCIDAD LECTORA

CUARTO AÑO BASICO

LA ASTUTA HIJA DEL CAMPESINO

Érase una vez un pobre campesino que no tenía tierras. Solo poseía una casa

muy pequeña y una hija única. Un día la hija le dijo: - Padre, debiéramos

pedirle al rey que nos diera una porción de tierra aún sin trabajar.

El rey, al enterarse de su pobreza, les regaló además una parcela de hierba, la

muchacha la labró junto a su padre y sembraron allí un poco de trigo y

algunos árboles frutales. Cuando ya tenían cultivado casi todo el campo,

encontraron en la tierra un mortero hecho de oro puro. – Escucha – dijo el

padre a la muchacha -: como nuestro señor, el rey, ha sido tan compasivo y

nos ha regalado este campo, vamos a obsequiarle el mortero a cambio.

- Padre – dijo -, si tenemos solo el mortero y nos falta la mano,

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (3 Kb)
Leer 2 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com