Lenguaje Y Comunicación
Enviado por xescori • 28 de Mayo de 2013 • 2.592 Palabras (11 Páginas) • 266 Visitas
LENGUAJE Y COMUNICACIÓN. COMPETENCIA LINGÜÍSTICA
Y COMPETENCIA COMUNICATIVA.
1.- El concepto de comunicación.
Básicamente, para que exista una verdadera comunicación han de darse necesariamente los siguientes factores: un emisor ha de emitir un mensaje, a través de un canal, en forma de una señal, o signo, que un receptor pueda percibir, descifrar e interpretar. Para ello es necesario que ambos compartan el mismo código en que se cifra el mensaje y que éste remita a un determinado referente. Para que se dé un bucle de retroalimentación, o feedback, el receptor ha de ser capaz de asumir las funciones de emisor y, al mismo tiempo, el anterior emisor puede pasar a receptor. De este modo la comunicación no presupone un sujeto activo frente a otro pasivo, pues mientras que el emisor emite, el receptor decodifica y es, a su vez, emisor potencial.
Para Jakobson, a cada factor le corresponde una función, dependiendo de las intenciones comunicativas del emisor:
Expresiva: pone de relieve la interioridad del emisor: Estoy alegre.
Conativa: la comunicación se centra en el receptor, esperando un cambio de actitud en éste: ¡Ven!
Referencial: el enunciado se limita a enfocar el referente: Son las dos en punto.
Fática: intenta comprobar la viabilidad del canal; así las onomatopeyas en las pruebas de sonido de un concierto.
Poética: el lenguaje trata de llamar la atención sobre sí mismo: Tres tristes tigres comían en un trigal.
Metalingüística: El lenguaje se centra en el propio código: “Yo” es un pronombre personal.
Ambos integrantes deben compartir en parte su sistema referencial: comunicar algo sobre lo que el receptor carece de información alguna implica que la interpretación del mismo no sea satisfactoria. Según la Teoría de la Información, un sistema de signos óptimo es aquél que consiga transmitir el máximo de información con el mínimo de unidades sígnicas. Además, si cualquiera de los factores que dificulten la comunicación se llama ruido, mientras que todo aquel recursos destinado a subsanar el ruido se conoce como redundancia, el mejor sistema de comunicación será el que menos posibilidades tengan de ruido y el que mayor número de recursos tenga para redundar el mensaje.
El estudio de la comunicación ha sido estudiada por la semiología y por la semiótica. Saussure definió la semiología como la ciencia que estudia la vida de los signos en el seno de la vida social, haciéndola depender de la sicología y siendo su rama más importante la lingüística. Peirce, por su parte, concibió la semiótica desde un enfoque más logicista que sociológico. Hoy ambas disciplinas se funden a menudo en una y llegan a ser realmente sinónimas desde el momento en que ambas tienen un objetivo común: el del estudio y la clasificación de los sistemas de comunicación y de sus unidades mínimas: los signos.
Un signo es toda aquella sustancia perceptible portadora de significado. Según Reznikov, el signo funciona como vehículo de un significado, como soporte de una información con respecto a un objeto determinado; la relación entre éste y su signo puede ser natural o arbitraria. Los signos se utilizan para percibir, conservar, transformar y retransmitir una información, funcionando como mediatizador entre el hombre y la realidad, hasta el punto de que llega a ser un instrumento capaz de crear un a cultura. Umberto Eco llega a firmar que, de hecho, toda cultura se ha de estudiar como un fenómeno de comunicación, de modo que la semiología será la ciencia que estudie todos los procesos culturales en tanto procesos de comunicación.
De esta manera, el semiólogo italiano ha establecido una taxonomía no cerrada de diferentes semiologías: la animal, o zoosemiótica aborda la comunicación entre animales; la semiología olfativa oscila entre los signos naturales como índices - olor a fresco - y los códigos artificiales de los perfumes, por ejemplo; la táctil es un sistema de comunicación muy usado entre los humanos: el beso, el abrazo,...; la semiología gustativa ha sido abundantemente estudiada por el estructuralista Lévi - Strauss en comunidades primitivas, especialmente fundada en antinomias del tipo dulce/ amargo,...; la semiología del gesto, o kinésica, estudia los gestos corporales con valor significativo, así los movimientos rituales de los sacerdotes budistas o hinduistas, la danza,los guiños,...; la semiología del silbido ha sido muy frecuente entre pueblos primitivos y algunos de ellos se conservan como en La Gomera; la de los lenguajes formalizados, como los matemáticos, los lenguajes de programación informáticos, el de la lógica proposicional,... y, evidentemente la semiología lingüística. Como el mismo autor reconoce, esta tipología es provisional: muchas de las semiologías sufren intersecciones, como la gestual y la animal, y otras faltan: la cromática o los sistemas mixtos audiovisuales.
2.- La clasificación de los signos.
No tiene por qué haber sistema de un sólo tipo de signos: hay sistemas de comunicación mixtos, donde se mezclan signos de diferente naturaleza, como en las artes escénicas. Por otro lado, también es conveniente advertir que la comunicación no precisa de intencionalidad por parte del emisor: ya afirmó Roland Barthes que el hombre es un animal comunicativo porque no puede no comunicar ni dejar de descifrar.
Podemos clasificar los signos según su naturaleza. De un lado tendremos lo naturales, o índices, y, de otro, los artificiales. Los artificiales pueden dividirse en lingüísticos - y éstos a su vez, en auxiliares y fundamentales - y no lingüísticos - divididos en señales, símbolos e iconos -. Los signos naturales no son creados por el hombre, pero sí interpretados por éste: así, la fiebre es índice de enfermedad, o el humo, del fuego.
Los signos artificiales no lingüísticos son creados por el ser humano. Pueden ser de tres tipos: símbolos, iconos y señales. Los símbolos son objetos materiales que representan ideas abstractas, funcionan por ejemplificación, alegoría o metáfora y por ello precisan de una convención previa para que sea entendido: así ocurre con el símbolo de sustancia nuclear, la cruz como símbolo del cristianismo,o como símbolo de sagitario. Los iconos, por el contrario, no representan ideas abstractas, sino concretas, con la que guardan una relación de semejanza: así una calavera cruzada por tibias en un cartel ante un campo es un icono peligro de muerte; o un muñeco con faldas a la puerta de un servicio es icono de servicio de señoras; o como icono de teléfono público. En este sentido,
...