Necesidades Educativas Especiales

Necesidades Educativas Especiales

Actualmente, en nuestro sistema educativo regular, es posible encontrarse con alumnos que presentan dificultades en su aprendizaje o bajo rendimiento académico con una historia académica determinada por el fracaso, así como también estudiantes que presentan deficiencias físicas, sensoriales o síquicas, cuya discapacidad les obstaculiza su proceso de formación escolar. En ambas situaciones se requiere brindar respuestas educativas que les proporcionen un currículo ajustado a sus necesidades. (Marín 2011, p.p 121.

Estas respuestas educativas son responsabilidad de los padres de familia y de los docentes. Ambos juegan un papel determinante en el proceso de aprendizaje e integración de los niños. Por eso, la participación e involucramiento de ambos es necesaria. Sin embargo, en muchos casos uno de los dos no está presente en este proceso; lo que hace que dificulta la integración de los infantes.

En el ámbito familiar, los padres de familia son un punto de referencia para el niño y deben adaptarse a su condición para llevar a cabo un manejo adecuado de las situaciones. Por eso, es importante sensibilizar a la familia en el involucramiento del proceso de aprendizaje y en la condición de sus hijos; ya que:

“Las relaciones familiares son importantes para propiciar el ambiente socio-emocional, que requiere el niño y el joven para su desarrollo” (Rodríguez, 2002d p.21). De tal manera, que el papel de los padres es vital para que se generen espacios en los que las necesidades educativas especiales sean efectivas en el proceso educativo del niño.

Además, otro aspecto que según Rodríguez (2002d) es de gran consideración es la naturaleza de los ecosistemas humanos en los que se desenvuelve el niño; a saber: la familia y el grupo de clase.

Al ser lugares con estructuras únicas y diferentes esto genera que la relación se torne frágil. Se parte de esta premisa, el involucramiento de los tutores del niño no se queda únicamente en la acción de estudiar, sino que va más allá y deben procurar establecer una buena relación hogar-centro educativo de forma amigable para el beneficio del desarrollo escolar del niño. (p.119).

En este sentido, la familia debe también involucrarse con el centro educativo; de esta forma será un aliado con el docente para que juntos realicen un trabajo en equipo y ambos puedan determinar el tipo de necesidades educativas especiales que requiere el estudiante.

Los estudiantes por su naturaleza humana, presentan necesidades educativas que deben ser atendidas por familia, maestros, instituciones y equipo interdisciplinario involucrado. Y aquellas necesidades educativas especiales en que ninguno de los anteriores puedan resolver deberán de saber que deben utilizar recursos adicionales para brinda apoyo al alumno, no solo en el ámbito escolar sino en su desarrollo integral.

Las necesidades educativas especiales son permanentes o temporales. Existen diversos tipos, según la deficiencia: física, emocional, intelectual, sensorial o social. Dificultan el aprendizaje y es necesario modificar el currículo adaptándolo a la necesidad de cada estudiante. Las condiciones de aprendizaje deben adaptarse para que el alumno logre una educación adecuada y efectiva con el objetivo de propiciar un desarrollo integral como persona.

Como objetivo principal las necesidades educativas buscan favorecer la integración de los estudiantes. Esto significa lograr un proceso en el cual se incorporen al resto de la sociedad. Siendo miembros activos de la comunidad, gozando de los mismos derechos y privilegios que el resto de los demás.

Es importante tener claro cuáles son los estudiantes que tienen necesidades educativas especiales. Según el documento del Ministerio de Educación Pública: “Políticas, Normativa y Procedimientos para

...