DEPENDIENCIA EMOCIONAL: VIRTUD O SACRIFICIO

                DEPENDIENCIA EMOCIONAL: VIRTUD O SACRIFICIO

Desde un punto de vista filosófico cada persona es un ser humano único e irrepetible que anhela la felicidad buscando un equilibrio entre su soledad y compartir socialmente con amistades y familiares. Bajo esta premisa “todo ser humano debe apostar por su propia autonomía e independencia desde un punto de vista emocional para vivir” (Guelbenzu, s.f.)

A pesar de ello existen casos en los que este equilibrio se ve modificado al crearse una dependencia hacia otra persona fruto de las inseguridades internas, los vacíos, y es llevada hasta tal punto de convertirse en una adicción, pensando que es más gratificante, más altruista, sacrificarse por otra persona en vez de solucionar los propios conflictos internos.

Es el caso que vemos en Teresa, que busca encontrar un apoyo emocional en Thomas pero que con el paso del tiempo se va dando cuenta que ella es más fuerte que él y con el fin de no volver a Praga y olvidar el sufrimiento que causó su madre busca desesperadamente aferrarse a Thomas, aun a pesar de las infidelidades de éste y de saber que su amor no le es correspondido de la manera como ella quisiera.

“Si vive sólo para su marido, no es su vida”(Kundera, 1984) le reprocha una fotógrafa, sin embargo la negación de esta frase es la justificación que esgrime Teresa para dar importancia al hecho de que cuenta con una persona a la cual poder entregar su vida (al menos para justificarse socialmente como si fuera una virtud), pero en el fondo es una farsa dado que no se siente correspondida y lo que vive es una fantasía al esperar mucho más de lo que Thomas le puede dar.

Esta situación desemboca en una relación asfixiante donde se pone de manifiesto la baja autoestima de la persona: es un sacrificio dada la poca libertad que tiene al estar bajo el dominio o esclavitud de la otra, es una idealización excesiva donde se piensa que si no está con ella se acaba el mundo y donde se pone de manifiesto la incapacidad o dificultad de decir no para terminar la relación.

En conclusión, este tipo de dependencia genera el que no se viva la propia vida sino la de los otros al centrarse única y exclusivamente en los demás, abandonando por completo el amor propio y auto-infringiéndose infelicidad y dolor.

“Reflexionar serena, muy serenamente, es mejor que tomar decisiones desesperadas” (Kafka, 1915) por lo tanto antes de llegar como tal a una dependencia puramente sensible es necesario pensar antes de actuar, es decir analizar con lógica antes de involucrarse en una relación para saber si a futuro es o no conveniente. De igual manera si realmente existe un sentimiento verdadero hacia la otra persona no es forzoso el analizar la relación ya que existe un verdadero amor y por lo tanto el concepto de dependencia no existiría puesto que se funden en una sola persona. A través del tiempo empiezan a salir las auténticas personalidades de cada quien y pueden encontrarse en que uno puede pretender poseer al otro, es donde surge la dependencia tanto el de ella como ella de él, es en estos momentos en que cada uno fluye como ser independiente único y libre y decide si puede seguir siendo dependiente del otro o si por el contrario busca una autonomía; la decisión la toma cada quien y no se pretende sacrificio para tener una relación en estabilidad emocional. Por consiguiente a este respecto vale la pena indagar:

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