ETICA Y VIDA DIARIA

La ética como eje regulador en la vida diaria

Se entiende que el mundo de la moral y de la ética con sus terrenos bien definidos han dado al mundo un pensar desde siempre , pero no podemos negar que estos campos del pensamiento y actuar humano han regulado la conducta del hombre y le han ahorrado infinidad de conflictos e injusticias, definitivamente pocas , pero importantes en algunos momentos de la historia detuvieron masacres, crímenes contra la humanidad y diversas fechorías políticas , económicas y sociales, en ese sentido hace falta volver un poco la vista hacia esos puntos fundamentales que la razón humana jamás ha dejado pasar de largo, pero como aplicarlo al actuar diario a la vida llana y simple de un mortal sin influencia sobre las masas, que provecho tiene ser moral y ético en una sociedad que parece manejar un doble discurso con relación a la palabra y la acción, ¿como dar un paso a paso simple?. Este ensayo no pretende direccionar una vida , pero hace una reflexión sobre principios básicos de conducta ética.

En cuanto a las acciones de la vida diaria, se propone de primera instancia el cumplimiento de algún deber, como inicio de un proceso ético, como se afirma: “Hegel nos dice que no podemos siquiera llegar a concebir una conciencia moral reñida con su deber, o que lo pusiera en duda” de este modo se nos deja ver que el deber merece atención y respeto, aunque a nuestra conciencia no le agrade el hecho de hacer lo correcto , en realidad no hacemos las cosas “buenas” por que nos agrada hacerlo, sino, por que es nuestro deber hacerlas, en aras del bien o de lo que hemos entendido por él, sin cuestionar o tener la incertidumbre respecto a lo que es justo o moral, aunque la realidad nos sugiera otra acción más fácil y practica., esto nos puede permitir conocer lo que se conoce como los frutos de la buena conciencia, cuando la acción o la convicción de la acción es algo que tiene consistencia y existencia, es decir la convicción con la que la acción se lleva a cabo se vuelve en el sentir del hombre algo real en un momento de provecho para que el hombre se reconozca en sí mismo a través de su actuar pudiendo de alguna manera dejar su “buena acción” en sus propias manos y no en la divinidad.

Otro paso contundente para dirigirse a una vida ética es la autonomía moral, que conlleva al conocimiento de principios y saberes mediante los cuales el individuo pudiera hacerse responsable y ponerse a cargo de una manera racional de las opciones que puede tener en todo momento o situación, par tomar decisiones y que no se encuentre únicamente a merced de sus emociones, si bien es cierto que el ser humano vive en una sociedad muy compleja, con una conducta masificada , que en ocasiones generaliza las malas acciones o las hace pasar por aceptables debido a la reiteración de las mismas, debe reconocerse que: ”En realidad cualquier proceso socializador transmite valores y normas, censura antivalores, prohíbe acciones y sanciona transgresiones” en ese sentido debemos conocer que las propias relaciones sociales nos permiten autorregularnos a favor de los otros, el estar al cuidado de otros permite que aprendamos a autorregularnos .

El ejercicio de la libertad lleva al individuo de manera obligada al pluralismo el reconocimiento de este es el autorreconocimieto de la libertad propia, produciendo por ende el pluralismo de libertades en ese sentido el goce de la libertad genera una responsabilidad de respeto para con los otros, si reconocemos que la neutralidad se queda corta en el sentido de aceptación personal , entonces el pluralismo puedes ser un buen recurso para mediar nuestra conducta ética delante de los demás si no coincido con los otros o no acepto sus maneras sean cuales sean , entonces debo comprender que el pensamiento humano es plural y en ese sentido ya no me siento obligado o afectado emocionalmente ante las acciones de los otros como se define: “La pluralidad es una situación estructural de una sociedad en la que se respetan los derechos”.

La esfera normativa tiene diferentes vertientes , pero hay dos maneras básicas que pueden llevar a un individuo a una buena convivencia por un lado los valores culturales que nos ofrecen estilos

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