Mujeres Reales?

MUJERES REALES?

PLANTEAMIENTO DE LA PROBLEMÁTICA

Hoy en día la exagerada consideración de la apariencia física ha hecho que tanto medios de comunicación como círculos sociales, impongan valores de lo que es bello y estético. Esto significa que los individuos están sujetos a influencias que tienden a distorsionar sus percepciones.

Es evidente que estos factores que ejercen presión social hacia lo que se considera una “buena apariencia física” existen para todos, sin embargo es mucho más intensa para las mujeres, ya que prevalece una tendencia a que las mujeres sean juzgadas, básicamente por su apariencia y los hombres sean juzgados por sus acciones. Existe también el estereotipo físico de la mujer ideal, cuyas características deben ser la belleza, la delgadez y mantener determinadas medidas corporales.1

La problemática de todo esto es que al compararse con los estereotipos que la sociedad considera los adecuados y encontrarse con diferencias, las mujeres se rechazan a sí mismas y aspiran a ser lo más parecido a los modelos impuestos, se vuelven acomplejadas y frustradas, llegando al grado de tener problemas de autoestima importantes.

Y es que esto no sería un problema si fuera lo que las mujeres quieren, el problema es que estas cosas son lo que las mujeres creen que quieren, sin detenerse a pensar un minuto en que son el resultado de todo el bombardeo de publicidad que nos dicen que no nos sentimos bien con nosotras mismas y que tenemos que hacer algo para cambiarlo.

La publicidad ha distorsionado nuestra percepción, nos ha construido un modelo de mujer ideal, según el cual éstas deben ser jóvenes, atractivas, altas, delgadas, siempre arregladas, tener labios grandes y carnosos, busto grande, abdomen plano, nariz recta, uñas y pestañas postizas para poder ser consideradas mujeres bellas, y se nos presentan en carteles, folletos, comerciales de televisión, espectaculares, catálogos, revistas, y todo tipo de imágenes que inconscientemente nos están creando una falsa idea de belleza.

Lo más grave del caso es que en la sociedad actual, la mayoría de las personas no cumplen todos los estándares, y esto propicia que muchas de las mujeres, inconformes con su apariencia sean altamente exigentes con su cuerpo y se sometan a numerosos tratamientos de belleza, hagan dietas excesivas, utilicen cremas para las arrugas, se maquillen exageradamente para ocultar imperfecciones que según los estándares no son apropiadas, utilicen fajas modeladoras, se tiñan el cabello, se pongan tacones altísimos, vistan con ropa siempre nueva y a la moda, se operen, se depilen a cada rato, etcétera, quedando como resultado una imagen falsa y engañosa de lo que en realidad son.

Estamos llegando a una sociedad de mentiras incitadas por los medios de comunicación que ya no buscan ayudar a las personas, sino su propia conveniencia. Lo que quieren es vendernos imágenes de seres irreales para que pensemos que no somos suficientemente bellos, a fin de conseguir su único propósito que es seguir vendiendo los productos que nosotros ingenuamente compramos con la idea de hacernos mejores. Nos vienen a decir lo siguiente: No te sientes bien contigo misma, preocupada por las arrugas, celulitis, algunos centímetros de más de cintura, canas, várices en las piernas, problemas con el cabello, etc… tranquila, te presentamos a una mujer que no tiene ninguno de esos problemas para que creas que el producto que publicita te va a hacer igual que ella. Posiblemente no lo consigas pero si no te ves favorecida, ánimo, otra vez será.12

Varias encuestas han demostrado que lo anterior es cierto. La Segunda Encuesta Nacional realizada por la Corporación Humanas, realizada en 2008 indicó que el 66% de las mujeres mexicanas ve televisión diariamente. De este 66%, el 46% responde que la mayoría de las veces ve programas de espectáculos, dejando más abajo a las noticias y los programas educativos con un 38% y 19% respectivamente.

Dos investigadores holandeses, Marc F. Luxen y Fons Van de Vijver, han publicado los resultados de un experimento que demuestra cómo el atractivo facial influye de forma decisiva en el éxito de los aspirantes a un puesto de trabajo.13

La doctora Shelly Grabe y el profesor Janet Hyde exponen un meta-análisis de 77 estudios anteriores, que involucran a más de 15.000 sujetos. Los resultados de este extenso análisis permiten llegar a la conclusión de que la exposición a los modelos mediáticos de mujeres ultra delgadas incrementa la preocupación de la mujeres sobre su cuerpo y delgadez, provocando mayor cantidad de mujeres disconformes con su cuerpo.14

En el estudio llevado a cabo por Grabe y Hyde se analizan una variedad de formas de exposición mediáticas, desde la grafica hasta la televisión, y los autores aseguran que el efecto que tienen los mensajes mediáticos de ultra delgadez van en aumento. Los estudios correspondientes al año 2000 revelan una mayor cantidad de mujeres afectadas que los estudios de 1990. Esto parece indicar según Grabe que, no importa cuánto esfuerzo se ponga en enseñar a las mujeres a aceptar y cuidar su propio cuerpo, la influencia de los medios sigue en aumento.

Pudimos reafirmar estos datos al realizar nosotras mismas un grupo de discusión, en el que se tocaron temas como la importancia de la imagen personal en las empresas, la influencia de los medios de comunicación sobre la apariencia de las personas, el autoestima, los estándares marcados por la sociedad, las cirugías estéticas, etc. De esta manera pudimos notar que la mayoría de las personas piensan que los medios sí influyen en la apariencia física, y que la importancia que se le da a la apariencia física va cada vez en aumento. Nos dimos cuenta de que los estándares ya están marcados es muchas personas y que ven los estereotipos como algo absolutamente normal.

13. Revista Journal of Organizational Behavior, publicación numero 27

14. Boletín de Psicología de la Universidad de Wisconsin-Madison, edición de mayo

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