PISA

PRESENTACIÓN

Lo que se busca en este texto es aportar elementos que permitan responder a una pregunta constantemente planteada por los profesores: ¿Cómo puedo mejorar la competencia lectora a partir del enfoque de PISA? Teniendo la finalidad de impulsar en las escuelas el desarrollo de un hábito que sea para toda la vida, de la vida cotidiana de los estudiantes, que contribuya informándoles y formándoles como sujetos activos y responsables dentro de la sociedad, es decir, fortalecer una competencia lectora que los haga ciudadanos en toda la extensión de la palabra. Para comenzar a comprender esto se organiza el área de comprensión lectora en dos categorías: por sus características textuales y su propósito.

Por sus características:

1. Texto: A partir de la forma de su contenido:

• Textos con formato continuo: Organizados en oraciones, párrafos, capítulos. Textos con una continuidad (Libros, periódicos, revistas, etc.)

• Textos con formato discontinuo: Información no secuencial (tablas, graficas, esquemas).

• El formato mixto: Es una combinación entre el formato continuo y el discontinuo.

2. Proceso: Son procesos cognitivos, están determinados por la forma como los lectores se relacionan con los textos.

• Acceder y recuperar implica habilidades asociadas a buscar, seleccionar y reunir información.

• Integrar e interpretar requiere que el lector comprenda la relación entre diferentes partes de un texto, así como demostrar y entender su coherencia.

• Reflexionar y evaluar implica aprovechar el conocimiento, las ideas que están más allá del texto con el propósito de relacionar la información proporcionada en él.

3. Situaciones: por el público al que van dirigidos y por los usos y propósitos por los cuales se creó.

• La personal se relaciona con textos que buscan satisfacer los intereses del individuo.

• La Pública corresponde a los textos relacionados con intereses y necesidades sociales.

• La educativa se vincula con los textos diseñados para una tarea de aprendizaje.

• La laboral alude a los textos dirigidos al mundo del trabajo.

Por su propósito:

1. Leer para hacer: Las personas también leen para aprender acerca del mundo, para informarse, aun cuando esta actividad no tenga una utilidad práctica inmediata. La única actividad inmediata y probable podría ser la discusión con los otros sobre el contenido de lo que se ha leído.

2. Leer para informarse: Leer para aprender acerca del mundo, para informarse, aun cuando esta actividad no tenga una utilidad práctica inmediata.

3. Leer para entretenerse: Significa ocupar un tiempo para la lectura por placer, una forma de práctica letrada que posee un fin en sí misma. Las narraciones literarias son consideradas como el material propicio para la lectura de entretenimiento.

¿CÓMO CONCIBE PISA LA COMPETENCIA LECTORA?

La competencia lectora es la capacidad de un individuo para comprender, emplear, reflexionar e interesarse en los textos escritos con el fin de lograr sus metas personales, desarrollar sus conocimientos, su potencial personal y, en consecuencia, participar en la sociedad. Dicha definición intenta ser inclusiva y comprender cómo se da el proceso de construir significados a la hora de leer, entendiendo que muchos de estos procesos se dan dentro de un contexto social.

DE LA HABILIDAD INDIVIDUAL A LA PRÁCTICA SOCIOCULTURAL

PISA propone una definición de competencia lectora y la organiza en tres dimensiones a partir de las cuales se vislumbran las distintas razones y usos que llevan a las personas a leer un texto. Para ahondar más aún en los propósitos que tienen las personas a la hora de leer es preciso profundizar en el concepto de lectura y en sus distintos enfoques.

1. Perspectiva lingüística:

El centro de estudio es el código escrito. La lectura consiste en decodificar el significado ubicado en el texto. También llamado fonético, sosteniéndose que el aprendizaje de la lectura va de la parte al todo: se comienza con las letras, luego las sílabas y finalmente la frase y, en consecuencia, se obtiene el mensaje.

Y si el significado se encuentra en el texto, basta conocer las letras, las palabras, sus formas y significados, las reglas, ya sean sintácticas o discursivas, para decodificar un texto, así pues, la lectura es “como abrir un paquete para recuperar lo que alguien puso adentro”.

En esta perspectiva se enseñan silabas, y no se atiende las necesidades contextuales del sujeto.

2. Perspectiva psicolingüística:

El centro de estudio es la interacción entre el texto y la mente del lector. En la lectura, el significado se encuentra precisamente en la mente de quien está leyendo y no tanto en el texto mismo. Esta perspectiva posee la característica de que el lector “no procede letra a letra, sino que hace uso de su conocimiento previo y de sus recursos cognitivos para establecer anticipaciones sobre el contenido del texto, y se fija en éste para verificarlos”, pero también mediante un proceso de inferencias psicológicas sobre la textualidad de la realidad.

Desde esta perspectiva, el lector no sólo debe decodificar el mensaje explícito del texto, también debe hacer uso de su conocimiento previo para inferir el significado implícito. La respuesta de esta perspectiva a los bajos niveles de comprensión lectora se centraría ya no en verificar si el lector está obteniendo la interpretación establecida, sino indagar si el lector posee o no las habilidades cognitivas necesarias para poder construir su significación.

3. Perspectiva sociocultural:

La lectura no es una actividad aislada, es una actividad social: “no reside solamente en las cabezas de las personas como un conjunto de habilidades que deben ser aprendidas, tampoco reside en el papel, capturada en los textos que deben ser analizados. Como toda actividad humana, la lectura es social y está vinculada con las interacciones que se llevan a cabo entre las personas y está relacionada con los mecanismos que regulan tanto la inclusión como la

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