Un Enfoque Sobre La Seguridad Social

El término sociedad proviene de la necesidad física, afectiva y filogenética de entablar relaciones afectivas, de colaboración de reconocimiento, de entendimiento, seguridad, apoyo, trascendencia, interdependencia, proyección y otras más, que se identifican en el transcurrir desde la presencia de los humanos como tales en este planeta; eventos por cierto no exclusivos de nuestra especie, pero si con mayor grado de refinamiento por lo menos conceptual y veleidosamente, pues hay niveles de organización superiores en otras formas de vida diferentes a la nuestra, aunque claro sin llegar a construir diversidades estéticas tan portentosas tal como nosotros lo hemos hecho. Entonces el que socialicemos es que interactuemos procurándonos unos a otros las ventajas de los avances científicos y el bienestar con ellos producido. Caemos entonces en el hecho indiscutible que la socialización o sea el socialismo, no es sino el llegar todos juntos y a la vez a las cumbres del progreso, sin que signifique una chabacana idea de igualdad en donde todos tengamos, poseamos o ganemos lo mismo, socializar es que todas las personas puedan disfrutar de los mejores niveles de salud, educación, deporte, recreación, etc. compartiendo, subsidiando, solidarizándonos, confraternizando, aplicando el mutualismo, la asistencia, es decir, aplicar el humanismo en la mejor de sus facetas.

¿Por qué se ha distorsionado la convivencia en armonía en la que debemos vivir todo el género humano? Podemos encontrar muchas explicaciones para dar respuesta aspectos que desaprueban el acontecer de las relaciones entre las personas: avances desiguales, formas culturales diversas a veces divergentes, hambrunas coexistiendo con abundancia del vecino, competencia natural en el camino de la sobrevivencia con persistencia y superioridad de los más aptos, grupos esforzadamente constructores en tanto otros adoptan formas desquiciadas tendientes a la destrucción, nomadismo versus sedentarismo; todo aderezado con ingredientes mesiánico religiosos, intereses comerciales motivados por la avidez del lucro, naciones tradicionalmente militaristas, hasta las infames formas de esclavitud y subyugación de individuos y pueblos de unos hacia otros.

Un papel fundamental son las relaciones económicas derivadas de los tipos y formas de producción de materiales, intercambiadas justa o injustamente en forma de mercancía; el aspecto de la propiedad privada de los medios de producción es otro factor quiérase o no, determinante para explicar la existencia de monopolios, latifundios y riquezas exorbitantes por una parte, coexistiendo con carencias, miseria y falta total de medios de subsistencia por otra.

Seguir con la vía violenta revolucionaria para arrebatar a los acaudalados lo que creen los pobres les pertenece, será una cuestión inacabable de afrentas, venganzas y por ende matanzas. A estas alturas de que cada vez sabemos más sobre el macrocosmos y el microcosmos,

...