Los Hombres Nuevos

“LOS NUEVOS HOMBRES: LATINOAMÉRICA”:

Durante el siglo XX, en América Latina se hacen cada vez más fuertes los movimientos en pro de la creación de sistemas económicos nacionales con el fin de la superación de los diferentes problemas sociales, así es pues, que la búsqueda de la industrialización fue un objetivo común para la mayoría de las naciones latinoamericanas, pero tras estas acciones siempre se encuentra el desarrollo de la ideas, de una nueva filosofía, la filosofía Latinoamericana.

Esta nueva filosofía de las ideas en América Latina revalora el pasado, las diversas manifestaciones políticas, sociales, religiosas, científicas, etc., pues fundamentan la ideología nacional y esto permite el reconocimiento del individuo y la sociedad a la que pertenece, lo mismo que brinda una perspectiva de sus necesidades sociales y políticas.

El ingreso de América Latina a la historia mundial fue forzado, no decidido por los allí nacidos; fue el resultado de la conquista, de la colonización del continente.

Ellos, los colonizadores con normas de conducta e ideas del hombre ya establecidas, delimitaron el actuar y por lo tanto quien no estuviera acorde con esas normas era visto como un bárbaro, como alguien que carece de ser y puede, por ello, esclavizado o asesinado. Esto es exactamente lo que ocurrió con la llegada de los conquistadores a las Américas. La primera pregunta filosófica que se hicieron los conquistadores fue: ¿son los indígenas hombres o no lo son?

A lo que quiero llegar con esto es que la filosofía tiene dos vertientes, la primera es la filosofía de los centros de poder, la cual se pone en practica como instrumento de opresión y, la segunda es la de los oprimidos, pues esta situación da origen a una filosofía de la liberación, esta filosofía da pauta para las rebeliones y revoluciones de los pueblos oprimidos.

Ya para los inicios del siglo XX América Latina está en pleno desarrollo de una nueva de una filosofía de la liberación.

Para poder llevar a bien el tema de la filosofía de la liberación latinoamericana, debo mencionar algunos acontecimientos que alimentaron esta conciencia del siglo XX. También hago observar que de ahora en adelante me referiré a América Latina con las siglas A.L.

A.L. era proveedora de las grandes naciones de materias provenientes de las minas, el campo y la manufactura es decir, A.L. era considerado un ente campesino, un ente obrero y nada más que eso, sin dejar de ser un gran ente de dominación para quien quisiera expandir su territorio y su poder, pues a pesar de no ser un ente rico económicamente, si lo era (y es) en cuestión de recursos naturales.

Al inicio de la Primera Guerra Mundial, A.L. no participo activamente, pues se consideró que esta guerra era de índole completamente europeo, es decir, como un acontecimiento que no tenía nada que ver con la historia americana; sin embargo, cuando a la guerra se le fueron sumando más países, principalmente Estados Unidos el impacto a la economía de A.L. se manifestó, pues al aumentar la inversión de las economías europeas hacia las actividades directamente relacionadas con la guerra disminuyó el abastecimiento de productos manufacturados con lo cual, aumentaron los precios y sin duda esto afectó tanto la economía de los países de A.L., como su forma de vida.

Lo anterior propicio huelgas y movimientos sociales, no solo en lo que respecta a A.L. si no, a los países alrededor del mundo, que protestaban contra la subida de precios y la rapiña capitalista, como la revolución de los obreros en Rusia, que implantó bajo condiciones muy difíciles el primer Estado socialista en el mundo. Por otra parte, hubo un crecimiento económico en algunos países, que vendían sus productos a los Aliados; sin embargo, las economías latinoamericanas fueron afectadas lógicamente, pues desaparecieron muchos empleos, por lo que los cuatro años y medio que duró la Primera Guerra Mundial (1914-1918) fueron socialmente muy difíciles.

La crisis de 1929 golpeó a Latinoamérica durante la siguiente década, surgiendo entonces la necesidad de trazar rutas para fortalecer la capacidad industrial, mediante modelos desarrollistas que dejaba entre ver que el progreso iba de la mano con la dependencia del capital extranjero. Cabe mencionar que Estados Unidos a partir de su independencia y basándose en la doctrina Monroe (América para los americanos) ambicionaron no fomentar una Latinoamérica, si no es bajo su liderazgo. Siendo Estados Unidos el que brinde a los demás el capital monetario y de manera inteligente crea dependencia, es decir, el que paga manda, Estados Unidos tiene todo para formar un impero y así lo hace.

No obstante además de esta situación de dependencia, lo Estados Latinoamericanos bajo la explotación y la injustica social en la que vivían, tuvieron también que lidiar con sus propias dictaduras.

Ante el hecho hundirse bajo una crisis de desarrollo de capital, la dependencia económica y la crisis en comercio exterior, se fueron concretando movimientos revolucionarios, en la que la clase dominada cuestiona la legitimidad del poder existente, llegando entonces a las confrontaciones entre gobiernos “fuertes” y los movimientos populares, los cuales con el pasar de tiempo toman dos corrientes:

Una corriente revolucionaria que se aproxima a la izquierda y que has sido la principal base del movimiento guerrillero latinoamericano y la corriente nacionalista-reformista- desarrollista que acepta la inevitabilidad de la dependencia y propone una solución de parche: un desarrollo dependiente.

En este entendido las confortaciones se tornan mayoritariamente internas en cada una de las naciones, sin dejar de lado su inconformidad con Estados Unidos y son mucho los países de A.L. que sufrieron ante este hecho.

Concretamente mencionaré el caso de Cuba por que me parece que queda perfectamente ejemplificada la dominación y presencia de Estados Unidos en cuanto al control ejercido, no de manera diplomática solamente, si no más bien con la violación de los derechos humanos. También me parecen adecuado mencionar la relación de las

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