Ciencias Económicas y Empresariales. Administración de Empresas

UNIVERSIDAD RAFAEL LANDíVAR

Ciencias Económicas y Empresariales.

Administración de Empresas.

Sistemas Financieros

Lic. Rodrigo Duque.

FEDERACIÓN CENTROAMERICANA

Isabel Castellanos 1067211.

José Alfredo Magaña 2417410. 

Rodrigo Samayoa Godoy 1302111.

Mario Trujillo 1112006.

Harry Méndez 1342912.

Karla Toscano 1255611.

Guatemala septiembre de 2012.

INDICE

Introducción……………………..……………………… pág. I

Federación Centroamericana………………......... pág. 1-3

Conclusión……………………….……………………….. pág. 4

Introducción

A partir del 15 de Septiembre de 1821, las antiguas provincias que integraban el Reino de Guatemala quedaron libres del dominio de la Corona Española. A pesar de ello, el régimen gubernativo no sufrió alteración debido a la permanencia de las mismas autoridades y funcionarios públicos españoles en sus respectivos puestos, con la condición de trabajar por el nuevo país independiente. La crisis económica después de la Independencia obliga a los Estados recién independientes a aceptar la propuesta del Imperio de Agustín de Iturbide de anexarse a México, la cual es aceptada por la Junta Gubernativa de Guatemala encabezada por Gabino Gaínza, confirmándola el 5 de enero de 1822 ante la oposición de San Salvador. La caída de Iturbide representó un triunfo para recobrar la independencia de la Federación Centroamericana, la cual declaró, mediante Decreto del 1º. de julio de 1823, su absoluta independencia no solo de España y México, sino de cualquier otra nación que quisiera gobernarlos, tomando a partir de ese momento el nombre de Provincias Unidas del Centro de América, integradas por Guatemala, San Salvador, Honduras, Nicaragua y Costa Rica. Las primeras monedas de la Federación fueron acuñadas en 1824; un Decreto, del 19 de abril de ese mismo año, autorizó únicamente a la Casa de Moneda de Guatemala la producción de piezas que circularían en la Federación.

[pic 2]

Federación Centroamericana

A partir del 15 de septiembre de 1821, las antiguas provincias que integraban el Reino de Guatemala quedaron libres del dominio de la Corona Española. A pesar de ello, el régimen gubernativo no sufrió alteración: permanecieron las mismas autoridades y funcionarios públicos españoles ejerciendo sus respectivos puestos, con la condición de trabajar por el nuevo país independiente.

Guatemala atravesaba por una de las peores crisis económicas de los últimos años. El informe del Ministro de Hacienda, al entregar la Tesorería el 29 de septiembre de 1821, indicaba que no había en las cajas reales más que 60 pesos y medio real en efectivo. Un nuevo acontecimiento agravó aún más la difícil situación de Guatemala: el imperio mexicano de Agustín de Iturbide propuso la anexión a México a la Junta Gubernativa de Guatemala encabezada por Gabino Gaínza, quien la confirma el 5 de enero de 1822, ante la tenaz oposición de San Salvador. (Chinchilla, 1977: imperio mexicano envió al General Vicente Filísola a invadir Guatemala en febrero de 1822. Los gastos hechos por la Hacienda Pública, para financiar a las tropas imperiales, provocaron la bancarrota del erario guatemalteco.

Ejemplo del Anverso de un real, del emperador Agustín de Iturbide, 1822.[pic 3]

El gobierno de Iturbide dispuso que la moneda circulante en Guatemala llevara en el anverso el busto del nuevo monarca y la inscripción, e indicaba la fecha de acuñación. En el reverso tenía el águila mexicana coronada en la actitud de volar sobre el nopal y la leyenda, registraba además el valor en reales, la ley y las iniciales del ensayador. Aunque estas monedas no fueron fabricadas por la Casa de Moneda de Guatemala, tuvieron circulación legal aquí mismo durante la anexión.

La caída del imperio de Iturbide representó un triunfo para recobrar la independencia de la Federación Centroamericana. Frente a esta situación, Filísola se dio obligado a convocar un Congreso con diputados centroamericanos, quienes sancionaron el Decreto del 1 de julio de 1823, con el cual se declaró la Independencia absoluta no solo de España y de México, sino de cualquier otra nación que quisiera gobernarlos, tomando a partir de este momento el nombre de Provincias Unidas del Centro de América, integradas por las provincias de Guatemala, San Salvador, Honduras, Nicaragua y Costa Rica. El 24 de noviembre de 1824, la Asamblea promulgó la Carta Constitucional que organiza de manera definitiva el gobierno de Federación, nombre con el que actualmente conocido que es Centro América.

El escaso intercambio y la retracción de las actividades agrícolas provocaron una severa crisis económica en la recién formada nación. La escasez de circulante monetario produjo la propagación de moneda macuquina de baja ley, acuñada en 1823 por la Casa de Moneda de Tegucigalpa, en el cual aparecía aún el escudo de armas españolas, lo cual obligó a las autoridades a reorganizar la Casa de Moneda de Guatemala que decreta, el 19 de marzo de 1824, el tipo, ley y peso de las monedas que debían acuñarse, y de esa cuenta prohibió la fabricación de cualquier moneda que incluyera el busto y armas de la monarquía española.

[pic 4]Las primeras monedas de la Federación fueron acuñadas en 1824 en valores de 8 y 1 reales, así como ½ y ¼ de real. Las monedas de plata de 8 y 1 reales presentan en el anverso una cordillera de cinco volcanes, expresión simbólica de los cinco Estados de la Federación; y al lado izquierdo, un sol naciente que representaba la esperanza de un provenir brillante. Y el reverso tiene grabada la Ceiba. Las piezas de oro fueron acuñadas en los valores de 8, 4, 2, 1 escudos y ½ de escudo, que se diferenciaban de las piezas de plata (podemos observar arriba) porque las de oro presentaban al sol en el centro de los volcanes y la fineza de 21 quilates.

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