Historia Oral

La Historia Oral, es una metodología que deriva como menciona Aceves de la Historia Social, se utiliza para la reconstrucción de hechos, la manera en cómo se recolecta los datos por medio de esta es lo crea la polémica dentro de los historiadores ortodoxos, que desdeñan a la misma por falta de objetividad y la hegemonía del uso de las fuentes escritas y tangibles.

En el texto de Gwyn Prins, plantea diversos casos en el uso de la historia oral como método para la reconstrucción de los hechos en diferentes momentos, poniendo como ejemplo principal el caso de África, ejemplo importante del uso de la metodología de la Historia Oral, ejemplo de estos son los diversos estudios que se han realizado para el rescate de la historia de las diferentes tribus por medio de la tradición oral.

Los rescatable de este método a lo que la mayoría del historiadores ortodoxos, hablan de una subjetividad en el tratamiento de la fuente, pareciera que es la parte más humana del quehacer del historiador, “La historia oral, con su riqueza, su humanidad, su emoción frecuente, y siempre con su escepticismo sobre el quehacer histórico, se encuentra mejor preparada para estos componentes vitales de la tarea del historiador: la tradición y el recuerdo, el pasado y presente” . Que es esto es muestra de la multidisciplinariedad de este método, de las herramientas que toma de otras disciplinas sociales para la elaboración del trabajo, entre ellas la sociología, psicología, antropología, lo que hace que sea completa en la creación de nuevas fuentes, pero esto no desdeña el papel de las fuentes escritas, sino que viene a complementar el enriquecimiento de datos, y que tienen mayor fiabilidad.

En los dos textos habla de la importancia de la historia oral como formadora de nuevas fuentes históricas que tocan un gran abanico de temáticas, teniendo como principal premisa la memoria, esta puede ser individual o colectiva, en la que el historiador se encuentra en el papel de constructor de estas, dejando registro del testimonial.

Tanto como Prins y Aceves están en favor del uso de este método para la recopilación de datos, pero como menciona Aceves, “el recopilador oral no siempre recibe lo que necesita, pero con frecuencia encuentra más de que lo que piensa hallar o recibir […] conoce la fuente y el proceso de constitución de esta”.

Entre los dos textos, el de Prins nos habla rápidamente de ejemplos en los que se ha usado la historia oral, como método para la reconstrucción histórica de la tradición, buscando la legitimización de la oralidad como una metodología capaz de entrar con el rigor de uso de las fuentes escritas, la veracidad. Algo que puntualiza es el poder de la distorsión de mente en el discurso emitido, la tergiversación de la memoria y el olvido de la misma, nos dice que el fragmentos del recuerdo esta olvidados por diferentes situaciones que el historiador tiene que reconstruir

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